El histórico pueblo de Pedrola, en Zaragoza
La localidad zaragozana de Pedrola posee un impresionante casco histórico forjado hace siglos por la nobleza aragonesa.
Situado a tan sólo 35 kilómetros de la ciudad de Zaragoza, el municipio de Pedrola está marcado monumentalmente por su pasado histórico, en el que tuvieron mucho que ver el gran número de familias de alta alcurnia que habitaron en sus tierras desde el siglo XIII. El propio Miguel de Cervantes hablaba en la segunda parte de El Quijote de esta singular villa, recordando su estancia en el Palacio Ducal.
Los visitantes que lleguen a este pueblo zaragozano quedarán impresionados con su impresionante casco histórico, un barrio lleno de historia marcado por la influencia de la nobleza aragonesa, tanto por el señorío de los Luna como por el de los Villahermosa, que han dejado una riquísima herencia patrimonial.
Este municipio aragonés, ubicado en la Depresión del Valle del Ebro, posee también una faceta eminentemente industrial, claramente influenciada por la planta que el fabricante de automóviles Opel posee en la cercana localidad de Figueruelas.
Qué ver en Pedrola
Dos son los monumentos que concentran el mayor interés de Pedrola, el Palacio Ducal de Villahermosa y la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, ambos declarados Conjunto Histórico-Artístico.
El palacio, del siglo XVI, es una obra arquitectónica de estilo mudéjar. En su interior alberga obras pictóricas de Roland de Mois, Goya, Sorolla o José Antolinez y esculturas en bronce de Carderera. También se pueden ver muebles de época, porcelanas de Sèvres, tapices de Gobelinos y destacados artesonados renacentistas.
Por su parte, la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, del siglo XIV, fue modificada y ampliada a lo largo de los siglos XVI y XVIII. También merece una detenida visita la Ermita de San Sebastián, cuyo origen se remonta al siglo XVI.
Gastronomía y fiestas de Pedrola
La cocina tradicional de Pedrola, como sucede con la gastronomía típica de la provincia de Zaragoza, resulta sencilla, pero muy nutritiva. En sus platos se emplean numerosas verduras y frutas autóctonas. Para maridar los platos disponen de los buenos vinos de la región: Cariñena, Borja, Paniza, Lecera y los del Valle de Jalón.
Entre las recetas más populares se encuentran el bacalao al ajoarriero, que aquí incorpora huevos y ajos; los huevos al salmorejo, que se sirven con salsa de espárragos; la longaniza de Fuentes, el pollo a la chilindrón, el cordero a la pastora, el ternasco asado o el lomo de cerdo a la Zaragozana. Entre los dulces tradicionales, mencionar los turrones, los roscones y el mostillo, que son dulces o galletas elaboradas con mosto.
La fiesta mayor de este municipio aragonés se celebra en el mes de agosto en honor de su patrón, San Roque. El pueblo también celebra fiestas por la Virgen del Pilar, el día 12 de octubre; San Sebastián, el 20 de enero, o San Isidro Labrador, el 15 de mayo.
