Escapada al pueblo de Jaraba, en Zaragoza
Su bello entorno natural, sus aguas minerales con grandes propiedades o su patrimonio monumental y cultural hacen de Jaraba un gran destino rural en la provincia de Zaragoza.
Un buen destino rural debe contar con una cuidada infraestructura turística de alojamiento y restauración, pero también con lugares históricos que visitar, un bello entorno natural para hacer senderismo y un ameno calendario de actividades culturales y festivas.
La localidad de Jaraba, en Zaragoza, tiene todo eso y más, porque también ofrece una completa oferta de balnearios, parajes ideales para practicar la escalada o la posibilidad de hacer rutas ornitológicas.
Por todo esto, y por algunas cosas más, esta población de la comarca de la Comunidad de Calatayud se perfila como un gran destino turístico aragonés.
Qué ver en Jaraba
El protagonismo monumental de la villa de Jaraba lo tiene un lugar situado fuera del pueblo, en un talud rocoso ubicado a la entrada del Barranco de la Hoz Seca. Se trata del Santuario de Nuestra Señora de Jaraba, un conjunto arquitectónico que fue construido entre los siglos XIII y XVIII. Está integrado por la iglesia y por la casa del santero, y es uno de los principales puntos de encuentro de peregrinos y romerías en esta zona aragonesa.
Ya en el municipio destaca la Iglesia de la Transfiguración del Señor, que se remonta a finales del siglo XVI. Una tormenta provocó que en el año 1846 se derrumbarán la fachada y la torre, pero durante el mismo siglo XIX fue reformada reconstruida y ampliada. En su interior acoge varios valiosos retablos de entre los siglos XVI y XVIII, siendo el retablo mayor de estilo barroco.
Nos quedan varios lugares que despertarán nuestro interés en Jaraba, como las Pinturas Rupestres de Roca Benedí, que podrían tener unos 7.000 años de antigüedad; los Peirones de San Vicente, San Antón y Santa Agueda, unos pilares hechos en piedra o ladrillo que sirven para indicar los caminos, y que están rematados con una hornacina que alberga la imagen de un Santo o Virgen y una cruz; los antiguos apriscos ganaderos ubicados en las paredes calcáreas próximas al río Mesa, el Monumento al Agua o el Antiguo Lavadero, que contaba con dos pozas de piedra y ha sido decorado en una de sus paredes con un simpático mural.
Qué hacer en Jaraba
Cuidarse, relajarse y desconectar son pilares básicos del turismo rural, y dónde mejor para hacerlo que en un buen balneario. Pues Jaraba cuenta con tres: el Balneario Sicilia, el Balneario Serón y el Balneario La Virgen. Los tres proporcionan las estupendas aguas minero-medicinales de la zona, y disponen de modernas instalaciones totalmente equipadas para una estancia de lo más completa y perfecta.
El hermoso entorno natural de Jaraba es otra fuente de sorpresas, ya que nos reserva lugares tan especiales como las Hoces del río Mesa y rutas tan apetecibles como la que va de Jaraba a Calmarza por el río Mesa, la Ruta de la Pedriza o la Ruta de los Miradores.
Los aficionados a la observación de los pájaros cuentan con la Ruta Ornitológica Mirador de los Buitres Calmarza, y para los que prefieren la escalada cuentan con varias vías, como la Pared de San Roque, la Pared del Diablo, la Pared de los Techos, el Rincón del Gitano, la Rinconada o la vía del Barranco de la Hoz Seca.
