Anento, uno de los pueblos más bonitos de España

Situado al sur de la provincia de Zaragoza, a sólo 15 kilómetros de Daroca, se halla Anento, un pequeño y precioso pueblo de poco más de 100 habitantes censados, aunque apenas viven dos docenas de personas todo el año. Su privilegiada ubicación, en un valle rodeado por suaves y verdes elevaciones, es uno de sus atractivos. Bosques, cuevas, huertas, riachuelos o peculiares y caprichosos parajes arcillosos lucen de manera espectacular a lo largo de todo el año.

También el pueblo está lleno de encantadores rincones, contando con algunos interesantes monumentos, que incluyen los restos de un castillo. Esta antigua población, con sus tradicionales casas de tonalidades rojizas y sus cuidadas callejuelas de origen medieval, es un magnífico destino para los aficionados al turismo rural y al turismo de naturaleza.

Prepárate para conocer Anento y a sus agradables habitantes, los cuales cuidan y presumen tanto de su pueblo como de su entorno natural.

Qué ver en Anento

Recorriendo las empedradas calles de Anento, disfrutando de su arquitectura tradicional y de sus encantadores rincones, descubriremos la Iglesia Parroquial de San Blas, de estilo románico y construida en el siglo XIII. En su interior se pueden ver unas magníficas pinturas murales en el ábside, y su retablo mayor del siglo XV es uno de los más grandes y mejor conservados de Zaragoza y de todo Aragón.

Otros lugares que visitar son el Castillo, del que se sabe que ya existía en el siglo XIV; la pequeña Ermita de Santa Bárbara o el torreón celtíbero de San Cristóbal, cuyo origen se calcula en torno al año 200 a. C.

Su naturaleza también nos proporciona gratas sorpresas. Es el caso del precioso manantial Aguallueve, que surge en forma de gotas de agua que caen en cascada en un precioso paraje natural; El Recuenco, un sorprendente y peculiar paisaje arcilloso que surgió tras el desprendimiento natural de tierra por el efecto de las lluvias y otras inclemencias climatológicas, y las cuevas, tanto las excavadas bajo el tozal sobre el que se encuentra el castillo como las originadas por el manantial Aguallueve. También hay cuevas-casa que los habitantes de la localidad han excavado en el interior de sus viviendas.

Anento y las abejas

De antiguo viene la relación del pueblo con las abejas. Hoy ya no quedan tantos apicultores, pero algunos quedan. Uno de ellos es Jesús, un vecino del pueblo que ha creado el Museo “El Colmenar. Abejas y naturaleza”. Se encuentra situado en una de las cuevas que hay a los pies del mirador del castillo.

Se trata de un espacio dedicado a las abejas y la naturaleza de esta zona de Zaragoza. En él podremos aprender todo lo relacionado con este insecto, tan importante para la conservación del medioambiente. También se pueden conocer las herramientas con las que trabajan los apicultores, así como los distintos usos que tiene la cera de abejas o las muchas ventajas de la Jalea Real. El museo, cuyo acceso es gratuito, también cuenta con una zona dedicada a la flora y fauna de la zona.

Ten en cuenta que el casco urbano del pueblo es totalmente peatonal. Por este motivo se ha habilitado un aparcamiento para los visitantes en el antiguo campo de fútbol, justo a la entrada del pueblo. Su precio es de dos euros para todo el día. Hay que adquirir unas fichas para el parking en la Oficina de Turismo, que se encuentra en la plaza, ya que será necesaria para que suba la barrera cuando vayamos a salir.