La Fuente del Amor de Elorrio, en Vizcaya
Tanto si lo que buscas es una ruta romántica, como si lo quieres es hacer un bonito recorrido de senderismo, te recomendamos acercarte a conocer la llamada Fuente del Amor de Elorrio.
Su verdadero nombre es el de Fuente de Berriozabaleta, y se halla en el barrio del mismo nombre, en la localidad vizcaína de Elorrio. Pero su historia, y el bucólico enclave en el que se encuentra, le han otorgado, por mérito propio, el sobrenombre de la Fuente del Amor.
A esta romántica fuente, y al idílico paraje donde se halla, se puede llegar en vehículo, pero resulta mucho más recomendable dar un tranquilo paseo hasta este precioso destino vasco, porque se trata del escenario perfecto para disfrutar de un momento especial, sobre todo al atardecer.
La historia de la Fuente del Amor de Elorrio
El responsable de la construcción de esta fuente fue Manuel Plácido de Berriozabalbeitia, que nació en 1775 en el caserío Berriozabalbeitia, en el barrio de Berriozabaleta, y que llegó a ser el Oidor del rey en Perú, donde se casó con una cuzqueña de una buena familia criolla que le confirió los títulos de conde de Vallehermoso y Casapalma.
A su regreso de América, ya en en el siglo XIX, mandó construir esta fuente en su barrio natal de Elorrio. Fueron muchos los que pensaron que era una fuente de estilo inca, e incluso hubo quien llegó a decir que Manuel Plácido la hizo traer desde Perú, piedra a piedra, para que su mujer no añorara su tierra natal, lo que sería todo un acto de amor.
En cualquier caso, tanto esta fuente-lavadero como el camino que lleva a ella y su entorno natural son impresionantes, y disfruta de unas espectaculares vistas de los montes de Urkiola.
Qué ver y hacer en Elorrio
Y ya que estamos en Elorrio, deberemos aprovechar para conocer esta bonita villa vasca. Entre los lugares de obligada visita se hallan la Basílica de la Purísima Concepción, del siglo XV; el Convento de Santa Ana, de finales del siglo XVII; el Museo de Berrio-Otxoa, dedicado a San Valentín de Berrio-Otxoa, copatrono de Bizkaia, o el Palacio Arriola, donde nació San Valentín de Berrio-Otxoa el 14 de febrero de 1827, y que actualmente acoge la Oficina de Turismo de Elorrio. Hay otras ilustres mansiones en la localidad, como el Palacio Arespakotxaga; el Palacio Zearsolo o “Casa Jara”; el Palacio Olazabal o “Modet” o el Palacio Urkizu Aldatsekua, entre otros.
En cuanto a la tradición gastronómica, estamos en el País Vasco, y con eso se dice todo. En Elorrio disfrutaremos a lo grande saliendo de pintxos, auténticas delicias gastronómicas en miniatura, y descubriremos la deliciosa morcilla de aquí, llamada buzkantza, que cuenta con su propia fiesta durante el puente de diciembre. Y para los golosos, nada mejor que los dulces que elaboran de forma artesanal en su pequeño obrador las monjas de Elorrio.
Y ten en cuenta su agenda de eventos a la hora de visitar Elorrio, que incluye fiestas como el Euskal Jaia, el día de las tradiciones y la danza vasca, que tiene lugar en abril; la Feria de los Oficios Antiguos, que se celebra en junio, sólo los años impares, en el barrio de San Agustín; el Día de San Valentín de Berrio-Otxoa, patrón de Elorrio, el 4 de julio; las Fiestas Mayores o Ferixa Nausikoak, que empiezan el primer fin de semana de septiembre y duran 10 días, o el Errebonbilloak, el primer domingo de octubre, fiesta en la que los jóvenes de Elorrio, los Errebonbillos, disparan salvas en sitios determinados por la tradición.
