Miradores de Bilbao: el Monte Artxanda
Considerado como uno de los lugares más emblemáticos de Bilbao, el Monte Artxanda es también un excelente mirador sobre la ciudad y la ría.
Bilbao es una vanguardista y cosmopolita ciudad que ofrece a sus visitantes un turismo de calidad. Posee una excepcional oferta monumental, cultural, gastronómica y de ocio. Pero, además, cuenta con un bello entorno natural, integrado por varios montes y parques.
Uno de esos montes es el de Artxanda, al que se puede subir dando un agradable paseo. Una vez arriba, disfrutaremos de una perspectiva diferente y muy especial de la ciudad de Bilbao. Sus encantos naturales los descubriremos realizando el “Anillo Verde”, una ruta de gran recorrido que deja atrás las calles de la villa para adentrarse en los parques forestales de su entorno, como el del Monte Artxanda.
Esta elevación se ha convertido en uno de los pulmones naturales de la ciudad, además de ser un espacio ideal para contemplar el paisaje, para pasear y cargar nuestros pulmones de oxígeno, para disfrutar del patinaje o para degustar las mejores especialidades gastronómicas vascas en alguno de sus locales de restauración.
Qué ver y hacer en el Monte Atxanda
Podremos acceder al Monte Artxanda subiendo por el popular funicular que ya ha superado los cien años, o a través del GR 228, el Anillo Verde de Bilbao, que tomaremos desde el Puente de La Salve o desde la Vía Vieja de Lezama.
Uno de los recorridos más sencillos y agradables que se pueden realizar por este monte es la conocida como la Ruta Memorial. Se trata de un paseo de menos de un kilómetro que nos llevará hasta la Ermita de San Roque, que se encuentra situada en un pequeño alto desde donde podremos contemplar unas impactantes vistas del Valle de Txorierri.
Durante la Guerra Civil Española, en el año 1937, este tranquilo espacio natural fue el escenario de algunas batallas de lo más cruentas para defender Bilbao. Como recuerdo a los cayeron durante la contienda, en el año 2006 se erigió en Artxanda la escultura “Aterpe”, y cada año se celebra un acto de homenaje en su honor. Toda esta zona se se llenó de trincheras, las cuales, a día de hoy, están siendo excavadas por un equipo de arqueólogos.
El Anillo Verde de Bilbao
Uno de los empeños que con más ahínco ha realizado la ciudad de Bilbao en las últimas décadas ha consistido en incrementar el número y tamaño de las zonas verdes, y lo han conseguido con mucho éxito.
En un espacio corto de tiempo, esta destacada población vasca ha pasado de los seis metros cuadrados de espacios verdes por persona que había en 1999 a los 24 metros cuadrados con los que cada uno contará cuando termine el último plan que todavía está en marcha.
El llamado Anillo Verde de Bilbao está integrado por varios parques urbanos ubicados en el mismo centro de la ciudad, y también por los parques forestales que están situados en los alrededores, muchos de ellos en las laderas de los montes cercanos. Todo ello constituye un GR de casi 100 kilómetros que discurre por los parques forestales de Artxanda, Monte Avril, Arnotegi, Pagasarri y Arraiz. Y lo mejor de todo es se puede acceder a cada uno de ellos desde el mismo centro de Bilbao.
