El Castillo de Simancas, un lugar para perderte en Valladolid
Una alternativa diferente para pasar un fin de semana inolvidable en la provincia de Valladolid. Descubre Simancas, su historia, su leyenda y su castillo.
Hay un lugar especial en Castilla y León, a orillas del Pisuerga y a tan solo 13 kilómetros de Valladolid que merece una parada en el viaje. Se trata de Simancas, una localidad que custodia nuestra historia tras los muros de un castillo de cuento.
Simancas no tiene mucha afluencia de visitantes y la mayoría lo ven de pasada aprovechando su estancia en Valladolid. Pero si te gusta alejarte del bullicio de la capital y disfrutar de un lugar especial casi en solitario, estás en el sitio perfecto.
El Castillo de Simancas
El Castillo es el emblema de Simancas, además de ser uno de los más importantes de España. Construido en el siglo XV sobre una antigua fortaleza árabe, los Reyes Católicos lo reclamaron para la corona y lo convirtieron en prisión.
Tiene todo lo que necesita un castillo de cuento, gruesos muros, cubos, almenas, foso y puente de entrada. Y, por supuesto, cámara de tortura que debió ser de mucha utilidad cuando funcionó como prisión. Este castillo también fue un lugar crucial en el famoso levantamiento de los comuneros.
Superado su pasado violento, Felipe II lo transformó en Archivo general del Reino y actualmente es el Archivo General de Simancas, donde se siguen guardando importantes documentos de Estado. Sus salas custodian la historia de nuestro país, algo que merece una visita sin prisas.
Qué ver en Simancas
Y sin pausa. Porque no hemos terminado en Simancas y aún nos queda recorrer sus calles empedradas y sus casas de sillería y ladrillo que muestran orgullosas los escudos de armas de sus más ilustres propietarios. En los soportales de la Plaza Mayor está el Ayuntamiento y la Casa de Cultura, de estilo neoclásico.
También merece una visita el Hospital del Salvador, del siglo XVI y la Iglesia Parroquial del Salvador. La iglesia es un edificio gótico del siglo XVI, aunque se aprecian influencias renacentistas y aún se conserva una torre anterior románica del siglo XII. En su interior destaca el retablo mayor plateresco y el relieve de la Piedad, además de una fascinante colección de orfebrería litúrgica de los siglos XVI y XVI.
Además de Castillo, Simancas también tiene su puente medieval que puedes observar junto con unas vistas magníficas del Pisuerga desde la Plaza del Mirador. Y no te pierdas el Rollo de Justicia, una columna de piedra que se levantaba en las localidades que podían administrar justica.
Las siete doncellas de Simancas
Que no se te pase por alto en tu visita a este rincón de Castilla y León, la fuente de siete caños que hay en la villa, porque tiene un motivo con leyenda incluida. A Simancas también se la conoce como "la villa de las siete doncellas" y hasta tiene un monumento dedicado a ellas.
Las siete doncellas simbolizan la victoria de los cristianos frente a los árabes cuando, siempre según la leyenda, Abderramán II las reclamó como tributo. Las muchachas de Simancas no se negaron, pero mientras estaban cautivas, se cortaron las manos para evitar ser entregadas. Esta historia, pero en versión menos sangrienta, se recrea cada año en Simancas el 6 de agosto durante las fiestas de El Salvador.