El castillo de Sagunto, en Valencia
Esta fortaleza se ubica en el último monte de la sierra Calderona, en Valencia, antes de desembocar en el mar. Tiene una longitud de un kilómetro aproximadamente y fue declarada Monumento Nacional en 1931.
El castillo tiene su origen en un poblamiento ibérico que más tarde ocuparon romanos, visigodos y musulmanes, hasta que en 1238 Jaume I conquistó estas tierras y los cristianos lo habitaron. Desde entonces y hasta principios del siglo XX ha habido guarniciones que lo han ocupado.
Se trata de una fortaleza bimilenaria que ha protegido a la ciudad de Sagunto, en Valencia, a lo largo de los siglos. El contorno que presenta hoy el castillo, de su época musulmana, no respeta el primigenio asentamiento ibérico y romano. Esto se concluye de que en las laderas sur y este se conservan restos de construcciones romanas y, hacia el oeste, la muralla ibérica.
Recorrido por el castillo de Sagunto
Para realizar la visita al castillo de Sagunto hay que prepararse bien, armarse de ganas para recorrer todo el recinto y llevar un buen cargamento de agua para no dejar de estar nunca hidratados, pues se trata de un paseo largo. Eso sí, hay que tener en cuenta que vale totalmente la pena, pues está dotado de un gran valor histórico y patrimonial nacional.
La fortaleza saguntina está dividida por zonas. En la zona oriental está la plaza de Tres Castellets y la de la Conillera formando la albacara, un tipo de fortificación característica de la Baja Edad Media que se usaba como refugio para sus habitantes en caso de verse amenazados por el enemigo. Al oeste está la plaza de Almenara, que comunica con la plaza de Armas, situada en el centro del castillo y que conserva el aljibe de las 21 columnas así como los restos más importantes del foro romano.
También en la zona más occidental hay dos plazas y algunas torres, como la Torre de Hércules, la del Penó y la Torre Barrana, en la que acaba el recinto. Las plazas que se encuentran en ese lado del castillo son la Ciudadela y la del Dos de Mayo. Entre los lugares de interés del recorrido también están la Puerta de Mahoma, la de los Estudiantes, que da paso a una plaza con su mismo nombre, y la Plaza de San Fernando.
El teatro romano de Sagunto
En la zona norte de la montaña en la que se erige el castillo está el teatro romano, construido en el año 50 d.C. aproximadamente, en la época del Emperador Tiberio, y declarado Monumento Nacional desde 1896. Durante el tiempo en el que los romanos ocuparon el castillo, esta construcción adquirió un notorio carácter político, social y religioso.
En su construcción se empleó la técnica del Opus Caementicium, que consistía en un armazón de mortero revestido de piedras pequeñas de cantería. Tenía una capacidad de unos 4.000 espectadores pero tanto en la Edad Media, como en las Germanías y la Guerra de la Independencia, se utilizó como una avanzadilla del castillo para uso militar y se perdió tanto la escena como otras partes del teatro.
Su rehabilitación, realizada en el último cuarto del siglo XX ha sido catalogada por muchos como una de las más polémicas en la historia del patrimonio español. Los restos originales quedaron sepultados bajo toneladas de cemento y nuevos materiales, y el talante clásico del lugar se transformó en una obra contemporánea. Sin embargo, el visitante no debe olvidar que camina sobre 2.000 años de historia. En la tribuna es fácil imaginar las muchas representaciones que aquel lugar acogió –y que aún hoy se ofrecen-.