Alzira, mucho que ver y hacer en Valencia

A 44 kilómetros por carretera de la ciudad de Valencia, entre los Valles de la Murta, la Casella y Aguas Vivas y la Sierra de Tous, se encuentra la localidad valenciana de Alzira. Posee uno de los términos municipales más extensos de la Comunidad Valenciana, y ofrece una de las ofertas más completas de naturaleza y monumentos históricos de la provincia.

Lugares como el Paraje Natural de la Murta, su encantador y animado centro histórico, su rica gastronomía o sus animadas fiestas son una buena muestra de lo que nos espera en esta villa que conserva un gran legado medieval.

Con casi casi 45.000 habitantes, la ciudad de Alzira es la capital de la Ribera Alta, y se accede a ella desde Valencia por la autovía A-7 y la autopista AP-7. Los trenes de RENFE de la línea Valencia-Almansa tienen parada en la villa, al igual que la línea de cercanías de Valencia C2. También llegan autobuses interurbanos desde las localidades valencianas de Carcaixent, Algemesí, Cullera y Sueca.

Qué ver en Alzira

Hay mucho que ver en Alzira, pero el mejor lugar por donde empezar el recorrido es por su casco histórico. A este popular barrio los alzireños lo conocen como “La Vila”, y ha sido declarado Bien de Interés Cultural. Los motivos son evidentes, ya que aquí se encuentran edificios tan históricos como la Casa Consistorial, del siglo XVI; el Palacio de Casassús, del siglo XVIII, o la Iglesia de Santa Catalina, con su imponente fachada barroca.

El siguiente punto de nuestro recorrido son las Murallas de Alzira, de origen musulmán. Declaradas Bien de Interés Cultural y Patrimonio Histórico de España, se remontan al siglo IX, y fueron construidas por los almohades para defender la ciudad. No toda la muralla se encuentra actualmente a la vista, ya que algunos tramos están enterrados y cubiertos con cristal para preservarlos. Encontraremos secciones de la muralla en el Parque de Arabia Saudí, en el Antiguo Mercado y en la Ronda de Algemesí.

Hay otras dos visitas imprescindibles en esta villa valenciana. Una es el MUMA, el Museo Municipal de Alzira, que se halla en un antiguo edificio de la calle Sant Roc que ha sido declarado Bien de Relevancia Local. El otro destino de interés es el Monasterio de la Murta, que es el resultado de la agrupación de varias ermitas datadas entre los siglos XIV y XV. Forma parte de la Ruta de los Monasterios Valencianos, que comienza en Gandía y termina en Alzira.

Qué hacer en Alzira

Para disfrutar de un completo recorrido por la villa de Alzira y sus alrededores deberemos estar bien alimentados, y eso es fácil en esta localidad. Nada mejor que un rico plato de arroz, como un arroz al horno, “el arròs amb fesols i naps” o la famosa paella, y para completar el menú, unas buenas albóndigas de carne, llamadas aquí “pilotes”. De postre podremos elegir entre buenas naranjas de la huerta valenciana o los deliciosos helados que los valencianos elaboran mejor que nadie.

Con fuerzas renovadas nos dirigimos a hacer al ruta del Parque de la Murta y la Casella, declarado Paraje Natural Municipal. Descubriremos 765 hectáreas de bellos parajes naturales y una gran oferta cultural y arqueológica. Además de sumergirnos en sus atractivos naturales, también podremos visitar las ruinas del Monasterio de los Jerónimos de Nuestra Señora de la Murta, las ermitas rupestres del Mont Calvari, el puente de Felipe II, una almazara de aceite, numerosas fuentes, el Observatorio de L’Ouet y varias cuevas y simas.

Y hay momentos ideales y especiales para visitar Alzira. Por ejemplo, durante la celebración en el mes de marzo de Las Fallas, evento que ha sido declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Y de paso visitamos el Museo Fallero, situado en el número 16 de la calle Santa Lucía. También es muy especial la Semana Santa Alzireña, declarada de Interés Turístico Nacional. Otra fiesta señalada es la que se celebra en honor a su patrono, San Bernardo, en el mes de julio. Y el penúltimo día del año, el 30 de diciembre, se celebra a lo grande el aniversario del paso del rey Jaime I por Alzira en el siglo XIII.