El pueblo de Cretas, en la Toscana Española

La comarca del Matarraña se ha convertido en los últimos años en uno de los destinos más solicitados de la provincia de Teruel, que hace tiempo dejó muy claro que “también existe”. Pueblos como Calaceite, Valderrobres o la Fresneda, además de entrar en la lista de “Los Pueblos más Bonitos de España”, se han convertido en todo un ejemplo del mejor turismo rural.

Entre los encantadores pueblos de la conocida como la Toscana Española se halla la localidad de Cretas, que cuenta con una población de alrededor de 600 personas. Es el lugar ideal para desconectar, para sumergirse en la naturaleza, para disfrutar de su historia y sus monumentos, para darse un buen homenaje gastronómico o para participar de su oferta de enoturismo.

Qué ver en Cretas

El principal atractivo de los pueblos del Matarraña reside en el aire medieval que conservan en sus calles y en su cuidado patrimonio renacentista. En el caso de Cretas, un pausado y relajante recorrido a pie por el pueblo nos llevará a descubrir lugares tan especiales como la Iglesia de la Asunción, la Casa Turull, la Capilla de San Roque o la Capilla de San Antonio de Padua.

Otras visitas que añadir a nuestro archivo fotográfico son las del Arco de la Casa Sapera, el antiguo Molino de la Villa, la Calle Mayor, la Plaza Mayor, la Casa de la Villa, los antiguos calabozos, el Portal de Vall de Roures, la Gran Casa, del siglo XVI, o la Casa Castillo del Diexmo, del siglo XIII. Y si nos acercamos a las afueras del pueblo podremos ver la hermosa Ermita de la Misericordia, de entre los siglos XIV y XVI.

Entre Cretas y la villa de Calaceite se halla el poblado íbero Els Castellans, donde se conservan unas espectaculares estructuras defensivas y de fortificación. El recorrido por el yacimiento se puede completar con la visita al Centro de Visitantes de Cretas, que está dedicado a la lengua y escritura ibéricas.

Qué hacer en Cretas

El entorno natural de Cretas nos reserva también grandes sorpresas, como los Puertos de Beceite, ubicado entre las tierras de Aragón, Catalunya y Valencia; el Parrizal de Beceite, el Salt de la Portellada o un buen número de pozas y piscinas naturales en las que podremos darnos un refrescante baño durante los meses estivales.

La gastronomía local es fuente de nuevas y grandes sorpresas, especialmente para los carnívoros. Y es que en la cocina local son habituales ingredientes como la carne de cordero y los embutidos. Es esta también tierra de codiciadas trufas, buenos quesos y, sobre todo, de un excelente aceite. Y como prefecto complemento, los vinos del Matarraña, contando en Cretas con algunas bodegas que podremos visitar.

Un buen momento para descubrir Cretas es durante algunas de sus más animadas fiestas y eventos, como el día de Sant Joan, el 24 de junio, en honor del patrón de la villa, que incluye hogueras, verbena y coques de Sant Joan; las Fiestas Mayores en honor a Santa Pelaia, a principios del mes de octubre, o las Ferias Medieval y del Vino, que tienen lugar en el mes de abril.