Escapada al pueblo de Bezas, en Teruel

Bezas es una localidad con mucho encanto en la provincia de Teruel, en la Comunidad Autónoma de Aragón. Está situada en la comarca de la Sierra de Albarracín, y más exactamente en el espacio protegido de los Pinares de Rodeno.

Se encuentra a buena altura, a 1.005 metros sobre el nivel del mar, y cuenta con una superficie territorial de 26 kilómetros cuadrados. Su población es de poco más de 75 habitantes, a los que se conoce con el gentilicio de blecenses. Y tan sólo 22 kilómetros separan esta población de la capital de provincia, la ciudad de Teruel.

Esta zona posee un clima de tipo continental, siendo la temperatura media anual de 10 grados centígrados. Julio es el mes más cálido, con una media de 20 grados, mientras que enero es el mes más frío, con 2 grados de media.

Atractivos turísticos de Bezas

Son varios los lugares que descubrir en Bezas, tanto de interés monumental como natural. Entre los primeros destaca la antigua Iglesia Parroquial de la Visitación de Nuestra Señora, del siglo XVI.

Mucho más antiguas son las pinturas rupestres del conjunto de las Tajadas, que se encuentran los abrigos del Huerto de la Tajada Bajera, el de la Paridera de la Tajada de Enmedio y en el abrigo conocido como Contiguo a la Paridera de las Tajadas de Enmedio.

Entre los atractivos naturales, mencionar La Laguna, que está ubicada dentro del Lugar de Interés Comunitario (LIC) de la Cuenca del Ebrón, o la Peña de La Cruz, también llamada Peña Botadera, que es un gran peñasco con una puede contemplar una de las mejores vistas panorámicas de Bezas y de todos sus alrededores.

Qué hacer en Bezas

Antes de iniciar una ruta por los alrededores de Bezas, conviene contar con las fuerzas necesarias. Y la mejor manera es dándose un buen homenaje gastronómico. Para ello se puede elegir entre los muchos platos tradicionales de esta parte de Teruel, como las gachas, los gazpachos, las sopas tostadas, los puches, las tortas gazpacheras, el cocido, las sopas de ajo, el bacalao o abadejo, las tortas sobadas con manteca, las tortas finas, los mantecados y el excelente pan artesanal de la zona.

Después de reposar la comida, estaremos listos para recorrer algunos de los parajes de la Sierra de Albarracín, como los Pinares de Rodeno. En el Centro de Interpretación de la Naturaleza del Rodeno, que está instalado en la antigua Casa Forestal de Dornaque, nos informarán de todos los atractivos naturales y culturales de este espacio protegido.

En todas las rutas que se pueden realizar por este bello espacio natural llaman la atención las formas caprichosas de las rocas de color rojizo, la abundancia de fauna y flora y las diversas manifestaciones de Arte Rupestre Levantino, consideradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.