Griegos, un destino de interior perfecto en verano
Griegos está de moda. Su nombre suena mucho, especialmente en verano por sus bajas temperaturas durante la noche. Sin embargo, la localidad aguardará a todos aquellos que la visten mucho más que el placer de esa frescura.
En la provincia de Teruel encontramos el municipio de Griegos. Se trata de un pequeño pueblo de menos de 200 habitantes de la Sierra de Albarracín, en los Montes Universales. Situado a 1604 metros de altitud, a los pies de La Muela de San Juan, y rodeado de la llamada Dehesa la Mayor, está considerado como el pueblo más frío de España.
Su localización privilegiada, en un paraje natural dominado por los bosques del pino silvestre y las praderas típicas de alta montaña, hacen de Griegos un destino perfecto para hacer senderismo con unas agradables temperaturas en verano. Además, el modelado cárstico que le da un carácter único, las innumerables fuentes de agua cristalina y, en general, todo su entorno, cautivan a los visitantes e invitan a disfrutar de la naturaleza en estado puro.
Qué ver en Griegos
Parece ser que el origen de la localidad se remonta a la época celta. En la partida de El Cuarto se localizó una necrópolis celta, situada dentro de un círculo de piedras de unos veinticinco metros de extensión en la que había un total de 14 tumbas datadas en unos 300 años a.C. Entre los objetos de bronce hallados destaca un bello escudo que se cree que pudo pertenecer a algún importante guerrero y que hoy se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional. También se encontraron broches, restos de cadenas, hebillas y brazaletes. De hierro, se encontraron hojas de lanza y tijeras. Muy interesante resulta la visita a esta necrópolis.
Dentro de la población, la iglesia de San Pedro parece estar datada en el siglo XVI, aunque fue remodelada en el siglo siguiente y parcialmente derrumbada durante la Guerra Civil. Realizada en mampostería, posee una bóveda de medio cañón con lunetos sobre una nave. Tiene dos capillas y su torre es cuadrada y de dos cuerpos. Por otra parte, la ermita de San Roque, patrono del pueblo junto a San Pedro y Santa María Magdalena comenzó a construirse en 1624 y ha sido reformada en numerosas ocasiones.
Como ya hemos señalado, uno de los aspectos más destacados de Griegos es su ubicación en la Reserva Nacional de Caza de los Montes Universales, por lo que se convierte en un privilegiado destino para los amantes de la naturaleza y su conservación. Los bosques de Griegos mantienen una gran biodiversidad. En primavera, la flora estalla y atrae a numerosos naturalistas y fotógrafos. En cualquier época del año se pueden avistar ciervos, corzos, cabras, así como ovejas, cabras, reses bravas y mansas y diferentes tipos de aves.
Griegos, destino de naturaleza
Los alrededores de Griegos se constituyeron en espacios especiales para pasear o practicar el senderismo. También pueden realizarse rutas ecuestres o, simplemente, aprender a montar a caballo. Son muchas las rutas disponibles que abarcan desde las más sencillas y cortas para todos los públicos y familias en general, hasta las más largas, dificultosas y con grandes desniveles para los más expertos. En cualquier caso, el objetivo es el mismo: respirar aire puro y disfrutar de paisajes idílicos que se encuentran entre los montes, bosques o valles de su término.
Cualquier noche, además, podemos disfrutar de un espectáculo increíble, siempre y cuando no esté nublado, claro. La Sierra de Albarracín es uno de los mejores lugares para disfrutar de las estrellas. Según los expertos, en los pueblos que constituyen esta sierra, una noche despejada pueden verse hasta 6000 estrellas. De hecho, está catalogada como una de las mejores zonas para disfrutar de las estrellas en España. Dos zonas son especialmente indicadas para gozar de este espectáculo: el mirador astronómico de Griegos y el mirador de la Muela de San Juan, muy cerca también del casco urbano y a una altitud de 1830 metros sobre el nivel del mar.
Y, por último, no se puede abandonar la localidad sin visitar el Museo de las Mariposas. Su exposición “La Casa de las Mariposas” es perfecta para los amantes de la naturaleza y de la entomología. Un gran número de insectos coleópteros, dípteros, ortópteros, etc., así como material llamativo, con casi todas las especies de la zona representadas, son un buen pretexto para disfrutar de estos bellos insectos, entre los que destaca una de las mariposas más bellas catalogadas: la mariposa isabelina, una especie de las más vistosas de la fauna europea.