Los Acantilados de Los Gigantes, en Tenerife
La isla canaria de Tenerife nos ofrece auténticos tesoros de la naturaleza, como los espectaculares Acantilados de Los Gigantes.
El nombre lo dice todo. Y es que los Acantilados de Los Gigantes reciben este nombre por su gran envergadura. Situados en la costa oeste de la isla de Tenerife, entre los municipios de Buenavista del Norte y Santiago del Teide, llaman poderosamente la atención sus enormes paredes de roca volcánica.
Estos acantilados, cuya altura oscila entre los 300 y 600 metros, se precipitan verticalmente sobre el mar junto al Barranco de Masca. Y es justo en esta zona de complicado acceso donde se halla el Caserío de Masca, una excelente muestra de la arquitectura rural de Tenerife que ha sido declarada Recinto Etnográfico.
Los Acantilados de Los Gigantes forma parte del Parque Rural de Teno, y a sus pies, en sus fondos marinos de alrededor de 30 metros de profundidad, existe una gran riqueza natural que resulta muy atractiva para los aficionados al submarinismo y a la pesca de altura.
La Muralla del Infierno
Los antiguos pobladores de las Islas Canarias, los guanches, les otorgaron a estos impresionantes acantilados el sobrenombre de la “Muralla del Infierno” o “Muralla del Diablo”. El motivo es que en este mismo punto de la isla de Tenerife situaban ellos el fin del mundo. Las curiosas formas humanas a las que se asemejan estos acantilados también hacían volar la imaginación de los aborígenes canarios.
Hoy en día nos sigue estremeciendo la inmensidad de estos acantilados, que provocan vértigo tanto vistos desde arriba como desde abajo. También sorprenden el color oscuro de sus paredes y las columnas de lava solidificada que hay en ellas.
La mejor manera de descubrir y contemplar los Acantilados de Los Gigantes es realizando un paseo en barco o desde el Mirador de Archipenque, que forma parte de la red Insular de Miradores. No sólo ofrece imponentes vistas de los acantilados, también de la localidad que lleva su nombre, de su puerto deportivo, del faro de la Punta de Teno e incluso de la isla de La Gomera.
Qué ver y hacer en los Acantilados de Los Gigantes
En torno a los Acantilados de Los Gigantes se puede disfrutar de un buen número de planes, como practicar el submarinismo o el snorkel. Y es que los fondos marinos de la zona poseen una gran diversidad biológica. Se pueden ver esponjas, coral negro, algas calcáreas y una gran variedad de peces. Además, los acantilados son un excelente punto para el avistamiento de los cetáceos que habitan en las aguas de esta parte de Tenerife, como el calderón tropical y el delfín mular.
Otras actividades que se pueden realizar son las excursiones en moto de agua, el paddle surf o el kayak. Y para los que prefieran tierra firme, el senderismo es la actividad estrella, gracias a las bonitas rutas que parten de las poblaciones de Puerto de Santiago o de Masca.
Si queremos bañarnos o tomar al sol podremos hacerlo en la Playa de Los Gigantes, que es de arena negra, o en la piscina natural de la urbanización de Isla Cangrejo. Y un momento muy especial para visitar estos fantásticos acantilados es durante el Carnaval de Los Gigantes, que se celebra a finales de febrero o primeros de marzo durante cuatro días en la localidad costera de Santiago del Teide.
