La Vía Verde Valle del Eresma, en Segovia
Con un trayecto que discurre por la antigua vía de tren entre Segovia y Medina del Campo, la Vía Verde del Valle del Eresma es una buena forma de recorrer la provincia segoviana.
A comienzos del mes de marzo de 2019 quedaba finalizada la última fase de la Vía Verde Valle del Eresma, entre la ciudad de Segovia y el pueblo segoviano de Fuente de Santa Cruz. Actualmente esta ruta discurre por la antigua vía de tren que unía la capital segoviana con la población vallisoletana de Medina del Campo, y llega hasta el pueblo de Olmedo, en Valladolid.
Hoy en día este recorrido se ha convertido en una magnífica propuesta de ocio al aire libre, y son muchas las personas que desde su creación la han realizado a pie o en bicicleta, formando parte de las actividades habituales de algunos clubes deportivos, asociaciones y otras entidades.
El Consorcio Vía Verde Valle del Eresma, integrado por el Ayuntamiento de Segovia y las diputaciones provinciales de Segovia y Valladolid, promociona esta ruta no sólo como una posibilidad de ocio, sobre todo como una forma de turismo alternativa que sea respetuosa con el entorno. Forma parte de los programas de educación ambiental e interpretación de la naturaleza de la provincia, y favorece la conservación del patrimonio cultural y tradicional, proporcionando un nuevo uso a infraestructuras abandonadas.
Trayecto de la Vía Verde del Eresma
Esta vía constituye un camino natural que atraviesa las localidades de Segovia, Valverde del Majano, Hontanares de Eresma, Los Huertos, Armuña, Yanguas de Eresma, Armuña, Ortigosa de Pestaño, Santa María la Real de Nieva, Nieva, Nava de la Asunción, Coca y Fuente de Santa Cruz, además de las poblaciones vallisoletanas de Fuente Olmedo, Aguasal y Olmedo.
En total son 73,3 kilómetros situados sobre el antiguo trazado ferroviario que se utilizó desde 1884 hasta 1993. Fue la empresa Tragsa la encargada recuperar este trazado como ruta de senderismo y ciclismo, proceso que realizó entre tres fases y supuso un presupuesto de 2.300.000 euros.
Durante la ejecución de esta vía verde se han recuperado varios elementos del patrimonio castellano-leonés, destacando varios antiguos puentes de hierro. Uno de ellos es el que se encuentra sobre el río Eresma, a la altura de la población de Yanguas, y tiene 75 metros de longitud. Hay otro sobre el río Voltoya, en el municipio de Coca, que cuenta con 28 metros de altura. Ambos puentes se han adaptado para el paso de peatones y ciclistas.
Mejoras en la Vía Verde Valle del Eresma
Desde su finalización, no han dejado de hacerse mejoras por parte del Consorcio Vía Verde Valle del Eresma. Entre otras actuaciones se han realizado trabajos de saneamiento del manantial en la zona de Yanguas de Eresma, desbroce mecánico de márgenes y de cunetas y de recebo de zonas deterioradas por las lluvias.
Además, la Asociación Terractua Ambientalistas de Segovia ha plantado 252 árboles en la vía a la altura del término municipal de Nava de la Asunción, repartiendo 126 ejemplares a cada lado de la vía. El plan de mejora también incluye próximas acciones, como el alumbrado del túnel de Perogordo o trabajos ordinarios de mantenimiento y conservación de la vía.
En definitiva, se trata de una bonita ruta diseñada tanto para senderistas como para ciclista, y que en su mayoría está adaptada para personas con movilidad reducida. Atraviesa diversas localidades segovianas y vallisoletanas, ademá de parajes naturales de campiña, pinares, alamedas y bosques de ribera. En el trayecto se puede visitar el conjunto monumental de Segovia, declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; la Ermita de Nuestra Señora de la Aparecida, en Valverde del Majano; la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI, que está en Hontanares de Eresma; el Yacimiento Arqueológico de Los Casares en Armuña, la Iglesia Monasterio de Nuestra Señora de la Soterraña, la Ermita de San Miguel de Párraces o la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Paradinas, en Santa María la Real de Nieva.