La Nucía, un pueblo diferente y muy especial en Alicante
En el interior, pero con vistas al mar, y muy alejado del urbanismo desaforado habitual en la zona de Levante. Así es La Nucía, un encantador pueblo que aparece en las revistas de diseño de Nueva York.
Sólo nueve kilómetros separan al municipio de La Nucía de la costa mediterránea y de la localidad de Benidorm, pero parece que en ese corto espacio hubiéramos cambiado totalmente de planeta. Pero no es así, seguimos en Alicante, aunque lo que encontramos en esta villa alicantina no es lo habitual en la costa del Mediterráneo.
No es una población que esté en primera línea de costa, ni falta que le hace, pero disfruta de maravillosas vistas al mar y a la montaña, siendo la puerta natural de acceso al bello y montañoso valle de Guadalest. En este pueblo de casas blancas no se construye a lo alto, sino en horizontal, y priman las viviendas unifamiliares y la arquitectura sostenible. Dispone de todo tipo de servicios, además de contar con una excelente oferta de alojamiento y restauración.
Desde hace un tiempo, el estudio alicantino Crystalzoo se está encargando de reformar algunos edificios gestionados por el Ayuntamiento de La Nucía, como el Centro de Día de la Tercera Edad, dándoles no sólo un avanzado toque de diseño, también haciéndolos totalmente sostenibles. Y también están haciendo famosa a la villa, porque estas vanguardistas reformas no sólo están recibiendo premios de arquitectura, también están apareciendo en las más reputadas revistas especializadas del sector de Nueva York.
Qué ver en La Nucía
Es el casco antiguo de La Nucía, situado sobre la loma de un bonito monte, el que nos reserva mayores atractivos. Es el caso de la Iglesia de la Purísima Concepción, con su magnífica escalinata de piedra y su gran campanario del siglo XVIII.
En el centro histórico también se encuentran la encantadora Plaza Mayor, un Lavadero de principios del siglo XX, o el Calvario, que comienza en la última casa del casco urbano y recorre 700 metros hasta llegar a una ermita. Y en lo alto del monte hay un mirador desde el que se disfruta de las mejores vistas de la zona de huerta de La Nucía y de la Bahía de Altea.
En la Plaza de los Músicos se encuentra el edificio conocido como “El Chalet”, un palacete de estilo colonial edificado en el año 1914, y que hoy en día acoge el Juzgado de Paz. Si no quieres perderte nada en el casco antiguo, puedes apuntarte a las visitas guiadas que ofrece el Ayuntamiento. Se puede hacer en la Oficina de Turismo, situada en la avenida de de la Marina Baixa, o a través del teléfono 966 101 098.
Qué hacer en La Nucía
El entorno natural de La Nucía es ideal para disfrutar del senderismo. De hecho, el pueblo cuenta con una red de senderos que incluye cuatro itinerarios, los cuales recorren en total algo más de 20 kilómetros por esta bella zona de vegetación mediterránea. Son todas rutas circulares, y están perfectamente señalizadas, siendo aptas para todo el mundo, incluso para los más pequeños. Podremos escoger entre la Senda local Blanca-Verde, la Ruta Azul, la Ruta Magenta y la Ruta Roja.
Pero el senderismo no es la única actividad que podremos realizar, porque el ayuntamiento ha apostado fuerte por el deporte. Por este motivo construyó la gran Ciudad Deportiva Camilo Cano, que en sus 400.000 metros cuadrados ofrece la posibilidad de hacer atletismo o jugar al fútbol, al frontón o al pádel. También cuenta con un skate park, un rocódromo o un circuito de educación vial, entre otras muchas infraestructuras.
Un buen momento para visitar La Nucía es a mediados del mes de agosto, y no sólo porque hace un estupendo tiempo y las playas están cerca. También porque es cuando se celebran las Fiestas Mayores en honor a la Virgen de la Asunción y San Roque. Son unas fiestas muy animadas y participativas, en las que no faltan pasacalles, conciertos, una ofrenda floral, un desfile de disfraces, mascletás…