La villa costera de Marín, en Pontevedra

Belén Valdehita
Belén Valdehita 10 Agosto, 2021

El intenso color azul del mar y el verde de la abundante naturaleza son las señas de identidad del municipio de Marín, una joya turística en la provincia de Pontevedra.

La villa de Marín, en Pontevedra
terrasdepontevedra.org

Ubicada en plena Rías Baixas, al abrigo de la Ría de Pontevedra, el principal encanto de la villa pontevedresa de Marín reside en su entorno natural de mar y monte, de playas y bosques, de agua y verde vegetación. Un entorno que invita a disfrutar de actividades como la vela, el buceo, el piragüismo, el senderismo, el cicloturismo…

Y en medio de tanta belleza natural, este pueblo costero es una invitación a descubrir su casco antiguo y sus monumentos, a sumergirse en los símbolos gallegos, a degustar una cocina marinera elaborada con fresquísimos pescados y mariscos o a conocer profundamente esta villa que es famosa por su Escuela Naval.

Playa de Mogor, en Marin, Pontevedra
turismo.gal


Qué ver en Marín

Comenzamos nuestro recorrido por Marín visitando su casco antiguo, de origen medieval, con sus estrechas calles y sus populares plazas. Aquí conviven antiguas casas de pescadores con otros edificios señoriales, como la Casa das Irmás Fontenla. Podremos ver el llamado Templo Vello, una iglesia de estilo barroco del siglo XII; la animada Plaza de Abastos, la Alameda, el Palco de la Música o el Museo Manuel Torres, entre otros sugerentes lugares.

Sorprendente son los Petroglifos de Mogor, cerca de la Playa de Mogor, que acoge A Pedra do Labirinto, uno de los petroglifos más representativos de Galicia. Otra muestra del pasado prehistórico del municipio es el Castro de A Subidá, de entre los siglos I y IV dC.

Pero hay muchos otros lugares que descubrir, como La Granxa de Briz o Parque de los Sentidos y las maravillosas playas de Marín, como la Playa de Aguete, la Playa do Santo, la Playa de Loira, la Playa de Mogor o la Playa de Portocelo.

Danza de las Espadas, en Marín, Pontevedra
pontevedraviva.com

Qué hacer en Marín

Pero Marín no es sólo playas, es un espectacular entorno natural que invita a hacer senderismo. Un excelente ejemplo es la Ruta de los Cinco Miradores, una recorrido circular de 10 kilómetros y dificultad media-baja, y que nos permitirá contemplar las mejores vistas panorámicas de la Ría de Pontevedra. Algo más complicada es la Ruta do Monte Penizas, un trayecto lineal de seis kilómetros que discurre por tramos de carretera y caminos naturales que nos acerca a uno de los grandes miradores y a dos de los monumentos religiosos más destacados de la villa: Santa María do Campo y Santo Tomé de Piñeiro.

Y gracias a la Ría de Pontevedra, en esta villa se pueden degustar unos reconocidos pescados y mariscos. Nada mejor que probar los lenguados, rodaballos, chocos, lubinas, besugos, pulpos, sardinas, langostas, camarones, ostras, cigalas, centollos, nécoras, mejillones, vieiras, almejas o berberechos maridados con el exquisito vino Albariño.

No faltan buenas fiestas en Marín, como la de San Miguel, a finales de septiembre, que lleva celebrándose desde el año 1639 y está declarada de Interés Turístico de Galicia. Uno de sus actos más populares es la Danza de las Espadas, un baile realizado por hombres y mujeres en honor a San Miguel, patrón del Gremio de Mareantes. Otras festividades destacadas son las de la marinera Virgen del Carmen, a principios del mes de julio, o la Fiesta de la Cigala, que se celebra finales del mismo mes.

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