El Bosque Encantado de Aldán, en las Rías Baixas
Galicia tiene muchos lugares mágicos, y un buen ejemplo de ello es el Bosque Encantado de Aldán, un paraje natural que parece sacado de un cuento de hadas, gnomos y otros seres fantásticos.
El municipio de Aldán es una de las muchas joyas que encontraremos en las Rías Baixas. Perteneciente a Cangas de Morrazo, en la provincia de Pontevedra, sólo 30 kilómetros separan esta pequeña población de la ciudad de Vigo. Paraíso de hermosas playas y calas vírgenes, nos reserva otro secreto tierra adentro: el Bosque Encantado de Aldán.
En este fantástico paraje natural, inundado de vegetación, recorreremos antiguos caminos bordeados por viejos molinos de agua, mientras nos arrulla el cantarín sonido de las aguas del río Orxas. Es una espléndida muestra de bosque atlántico situada en la finca de O Frendoal, un lugar realmente mágico que podremos inmortalizar con nuestra cámara.
Apunta este encantador destino si vas a visitar las Rías Baixas, y en especial la zona de Cangas de Morrazo, porque te aseguramos que no saldrás decepcionado, todo lo contrario.
Paseo por el Bosque Encantado de Aldán
La finca donde se encuentra este precioso bosque pertenecía a los Condes de Canalejas, y formaba parte del pazo conocido como la Casa Torre de Aldán. El destino quiso que, hace ya unos cuantos años, la construcción de la carretera PO-315 dividiera la finca en dos partes, por lo que el conde decidió donar la mitad en la que no se encuentra en pazo al Concello de Cangas. El Ayuntamiento a su vez lo cedió para el uso y disfrute de los ciudadanos y turistas que visitan la zona.
El bosque es realmente denso, contado con grandes ejemplares de castaños, robles, abedules y laureles, que filtran la luz del sol a través de sus copas y ofrecen una iluminación muy especial. Además de molinos de agua, en el recorrido por lo senderos hallaremos mesas y varios bancos de piedra donde sentarnos a completar la belleza del entorno. Curiosamente, algunos de ellos fueron hechos a partir de antiguos sarcófago.
Pero uno de los lugares que ha dotado al Bosque de Aldán de ese halo mágico y especial es el llamado Castillo de O Frendoal, que está rodeado por un foso con puente levadizo. En realidad se trata de una peculiar construcción iniciada por los dueños de la finca, pero que nunca terminaron, por lo que sólo cuenta con la fachada, a la que no le falta un pequeño torreón. Y aunque está en estado de abandono, te aseguramos que es de lo más instagrameable. También lo es un acueducto de mampostería, conocido como el Arco da Moura o Arco da Condesa, que se dice es de origen romano.
Cómo llegar al Bosque Encantado de Aldán
Llegar hasta el Bosque Encantado de Aldán no resulta tan sencillo como pueda parecer. Puedes pedir indicaciones, o seguir las que te ofrecemos para llegar a la finca de O Frendoal. Se encuentra en el kilómetro 109 de la PO-315 en dirección Cangas-Bueu. Cuando circules por esta carretera ya podrás ver la finca del Pazo-Torre de Aldán, ubicada al otro lado de la misma.
El lugar exacto de acceso a este lugar tan especial está donde la Rúa Estrada de Bueu converge con la Rúa das Pardellas. Apenas a 50 metros de este punto, a la izquierda de la vía y junto al río Orxas, veremos el antiguo Lavadoiro (lavadero) das Pardellas, donde podremos aparcar el coche, ya que aquí empieza la principal entrada al bosque.
A partir de ahí, déjate llevar, explora, disfruta, escucha y, sobre todo, haz fotos, muchas fotos, porque no sólo podrás presumir de descubrimiento, también, cuando vuelvas a verlas, rememoras todo el encanto y la magia del Bosque Encantado de Aldán.