Guía de Mahón
La pequeña ciudad de Mahón, capital de la isla balear de Menorca, es un destino de primera por su luminosidad, su agradable clima, su riqueza cultural y natural, sus playas y otros muchos atractivos que nos fascinarán.
A la ciudad de Mahón no se le nota la edad. Y es que sus más de 3.000 años de antigüedad le han sentado realmente bien a la capital de la isla de Menorca. En la actualidad, es un codiciado destino turístico, sobre todo para aquellos que lo que buscan es tranquilidad.
Su patrimonio monumental y arqueológico, sus parajes naturales protegidos, sus encantadoras playas y calas y su cuidado urbanismo son algunos de los atractivos de esta ciudad que cuenta con alrededor de 30.000 habitantes.
Y no hay que olvidar que la isla de Menorca fue declarada Reserva de la Biosfera en el año 1993. Esto es algo que los mahoneses se toman muy en serio, por lo que a su tradicional hospitalidad se une su afán por seguir protegiendo su tierra. Descúbrelo a través de esta Guía de Mahón.
Qué visitar en Mahón
- Puerto de Mahón: con una extensión de cinco kilómetros, cuenta con uno de los paseos marítimos más bonitos de España. En él, además de restaurantes y bares de copas, todavía pueden verse algunos edificios de la época industrial de la villa, como los edificios de la Autoridad Portuaria, antigua sede de la Estación Marítima; la fábrica “La Minerva”, que fue la primera harinera industrial de la ciudad, o los almacenes, de toda la vida, en los que se guardaban las pequeñas embarcaciones, manteniendo algunos de ellos la puerta de entrada con la forma de la barca. En el puerto está también la Sirenita Mô, obra del escultor Leonardo Lucarini y todo un símbolo de la capital menorquina.
- Fortaleza de La Mola: está situada en la misma bocana del puerto, y fue construida entre los años 1848 y 1875 para defender la isla de la amenaza británica. Se trata de uno de los mejores ejemplos de la arquitectura militar del siglo XIX. Visitarla lleva entre dos y tres horas, y gran parte del recorrido es subterráneo. Los precios son de 8 euros para los adultos; 5,50 euros para niños entre 12 y 16 años y mayores de 65; 4 euros para niños entre 6 y 11 años, y entrada gratuita para los menores de 6 años.
- Museo de Menorca: es el espacio museístico más importante de la isla, y se encuentra ubicado en el antiguo convento franciscano de Jesús del siglo XV, en la calle Convento de San Francisco. En su interior se pueden ver más de 200.000 objectos relacionados con la historia de Menorca, desde la prehistoria hasta la actualidad. Su horario y tarifas están en su página web.
- Fuerte Marlborough: lo encontraremos en el lado sur de la bocana del puerto de Mahón, en la cala de Sant Esteve. Fue construido durante la ocupación británica, entre los años 1720 y 1726. En 1782 los españoles lo destruyeron parcialmente, y fue reconstruido, con algunas modificaciones, en el último período británico, entre 1798 y 1802.
- Torre de Stuart o d'en Penjat: edificada en 1798 por orden del General Stuart, gobernador inglés de Menorca en esa época, se encuentra en buen estado. Está ubicada en el cerro del Turco o del Ahorcado, llamado así porque en él estaba situaba la horca en la que se ajusticiaba a los condenados que se encontraban recluidos en el desaparecido Castillo de San Felipe.
- Reloj del Ayuntamiento de Mahón: se encuentra situado en la torre central de la fachada del Ayuntamiento, la cual está enmarcada por unas pilastras de capitel jónico y coronada con un campanario. Fue construido en Londres por Mr. Windonill, y comprado en el año 1731 por orden de Richard Kane, el que fuera gobernador británico de Menorca durante los dos primeros períodos de la ocupación británica de la isla.
- Iglesia de la Concepción: fue edificada en el siglo XVII sobre la antigua muralla medieval. Es de estilo gótico bizantino, y cuenta con una planta de cruz griega. Se encuentra en la calle Cos de Gràcia, y no fue de culto católico hasta 1868, año en el que se reformó su fachada para eliminar de ella los símbolos ortodoxos.
- Bastión de Sant Roc: se trata del único vestigio que queda de la muralla medieval que en su día rodeaba toda la capital menorquina. Se trata de la puerta que comunicaba el casco histórico con el resto de la población.
- Iglesia de Santa María: fue edificada entre los años 1748 y 1771 sobre otro templo de estilo gótico. Se halla en el centro de la ciudad menorquina, y su interior es de estilo neoclásico. Cuenta con un impresionante órgano del siglo XIX de cuatro teclados y 3.006 tubos.
- Albufera des Grau: situada a dos kilómetros de Mahón, es el parque natural más destacado de Menorca. Se trata de un humedal de litoral que cuenta con zonas de cultivo, dunas, playas, plantaciones forestales, lagunas e islotes, como la Illa de Colom. Posee un gran valor natural y ecológico.
- Plan de Baixamar: se trata de un terreno ganado al mar, en el que se han construido algunos de los edificios más modernos de la villa. Aquí se encuentra la única destilería que todavía continúa fabricando la auténtica ginebra menorquina, la del Gin Xoriguer, que se encuentra en Andén de Poniente nº 91 y merece ser visitada.
Playas de Mahón
- Cala Caldés: tiene una longitud de 100 metros, y es de grava y arena. Se trata de un cala aislada de de complicado acceso y oleaje moderado, por lo que cuenta con una baja ocupación.
- Cala de Sa Torreta: cuenta con 220 metros de largo, y su composición es de arena dorada. De oleaje moderado y baja ocupación, en ella suelen fondear barcos, y se practica el nudismo.
- Cala Macar de Binillautí: tiene sólo 16 metros, y su composición es de grava y arena dorada. De difícil acceso, y sin ningún tipo de servicio, su ocupación es baja.
- Cala Mesquida: esta playa de 300 metros de largo cuenta con servicios de alquiler de hamacas y sombrillas, servicio de limpieza y puesto de la Cruz Roja. Su composición es de grava y arena, y su grado de ocupación es medio.
- Cala Morella Nou: de grava y arena oscura, y con 290 metros de longitud, cuenta con un oleaje moderado y un bajo grado de ocupación.
- Cala Murtar: Longitud: los 60 metros de longitud de esta cala están compuestos de grava y arena oscura. Su oleaje es moderado, y su grado de ocupación bajo. Principalmente la frecuentan los residentes de los pequeños edificios que la rodean.
- Cala Tamarells: se trata de una playa nudista de 110 metros de longitud. Es de arena dorada, su oleaje es moderado y su grado de ocupación bajo. Se accede a ella a través de largos caminos de tierra, andando o en vehículo todoterreno.
- Playa Capifort: playa nudista con 180 metros de longitud. Está compuesta por arena dorada, y su oleaje es moderado. Es una de las playas más tranquilas de la zona, y llaman la atención sus aguas, siempre cristalinas.
- Playa Es Grau: con una longitud de 600 metros, está compuesta por arena dorada. Tiene un grado de ocupación medio, y sus aguas son muy tranquilas, ya que está resguardada por encontrarse en una bahía.
- Playa S'Arenal de Mongofre: tiene una longitud de 150 meros y está compuesta por grava y arena dorada. Es de difícil acceso, y tiene un grado de ocupación bajo.
De compras por Mahón
Salir de compras por Mahón es una agradable experiencia que podremos realizar a pie. En su centro histórico, la Asociación Mô Comercial aglutina más de 150 comercios, en los que podremos adquirir tanto productos gastronómicos de la isla como objetos artesanales o tradicionales, además de ropa, calzado, bolsos...
El mercadillo de Mahón, que se celebra los martes y sábados, es también un buen lugar para comprar, a buen precio, una gran variedad de productos. Cuenta con más de 80 puestos, y se instala en la Plaça de s'Esplanada. A continuación enumeramos algunos de los recuerdos y especialidades que merece la pena adquirir durante tu estancia en Mahón:
- Ensaimadas: recuerda que este tradicional y exquisito dulce menorquín hay que encargarlo con, al menos, un día de antelación. Si se te olvida, siempre podrás comprarlo en el puerto o en el aeropuerto, pero tendrás que pagar más.
- Gin Xoriguer y licores de Biniarbolla: son dos típicas bebidas menorquinas. Con el Gin Xoriguer se prepara la popular "pomada menorquina”, un cóctel que lleva ginebra y limón.
- Queso Mahón-Menorca: con denominación de origen protegida, se elabora y madura siguiendo procesos totalmente artesanales.
- Abarcas: estas típicas sandalias menorquinas, bajas y muy cómodas,se realizan siguiendo procesos artesanales. Una de las fábricas más famosas de la isla es Ria, situada en la localidad de Ferreries.
- Sobrasada: la sobrasada menorquina es de cerdo y se elabora de forma artesanal. Está protegida con el sello de indicación geográfica, y se puede tomar tal cual o en platos tan típicos como el arròs brut.
- Productos de piel: por toda la isla de Menorca encontraremos fabricas de piel, en las que venden directamente al público tanto calzado como complementos de piel. Una de las más famosas es la de Mascaró, en Ferreries.
Comer en Mahón
Además de los buenos vinos y licores de hierbas autóctonas que se elaboran en la isla, en Mahón, y en toda Menorca, podremos degustar excelentes embutidos, ricos dulces y una gran variedad de platos tradicionales. Estas son algunas de las especialidades locales:
- Oliaigua con tomate: es la sopa menorquina más típica, y en los meses de verano se suele acompañar con higos frescos o aceitunas.
- Caldereta de langosta: es uno de los platos más solicitados de la cocina tradicional menorquina, y se elabora con langosta hembra y con sus huevas.
- Perol de sèpia al forn: para este exquisito guiso marinero se utilizan calamares pequeños, ya que son los más tiernos.
- Berenjenas rellenas a la menorquina: se preparan con cebolla, pimiento rojo, salsa de tomate, huevo, ajo, perejil, pan rallado, pimentón, aceite de oliva, sal y, por supuesto, las exquisitas berenjenas menorquinas.
- Otras especialidades menorquinas: los robiols rellenos de atún, espinacas y carne; el camaiot, que es una morcilla que se embute dentro de la corteza de la pierna del cerdo; la salsa mahonesa, la sobrasada de Menorca, los pasteles formatjades de carne o el flaó de Menorca.
De fiesta en Mahón
El Puerto de Mahón cuenta con el mejor ambiente nocturno de la isla, pero siempre partiendo de la base de que Menorca es muy tranquila. No esperes, ni de lejos, encontrar la misma marcha que en la isla balear de Ibiza. Otra cosa son las fiestas tradicionales y los festivales de la ciudad, que cuentan con una gran afluencia.
Entre las festividades más populares de la ciudad está la de Nuestra Señora de Gracia (Festes de la Mare de Deu de Gràcia), la patrona local, que se celebran la primera semana de septiembre. Incluyen tantos actos religiosos como lúdicos, siendo especialmente populares los jaleos, una tradición que se celebra en la Plaza Mayor, y en la que tanto los caballos como los jinetes y el público son parte del espectáculo. Además del tradicional jaleo, se entona el Volem vi, se pueden ver pasacalles con gigantes, tiene lugar el típico "Esclat de la Mascletà", hay ferias y también un mercado medieval gastronómico. La fiesta termina con todo tipo de actuaciones musicales en los escenarios instalados en el puerto, y con un gran castillo de fuegos acuáticos.
Otros dos destacados eventos que tienen lugar en la ciudad de Mahón son la Semana de la Ópera, que se celebra en el Teatro Principal, el más antiguo de España, y el Festival de Música d´Estiu, que como su nombre indica se celebra en verano, y cuenta con una gran variedad de actuaciones relacionadas con el mundo de la música y de la danza.