Guía de Melilla

Hay que cruzar el Estrecho de Gibraltar, en barco o en avión pero hay que hacerlo, para descubrir la Ciudad Autónoma de Melilla. Y merece la pena llegar a este pequeño reducto español en el continente africano, que sorprende al viajero por muchos motivos. Para empezar, que en este destino se han entremezclado hasta cuatro culturas distintas: la cristiana, la musulmana, la hindú y la judía. Buena forma de comprobarlo es haciendo la Ruta de los Templos, donde podremos ver los santuarios de cada una de las religiones.

Otra curiosidad de esta villa costera es su abundante arquitectura modernista. Y es que, estando tan lejos de Catalunya, todo tiene una explicación. Aquí vivió y trabajó Enric Nieto, un discípulo de Antonio Gaudí, que trasladó este estilo arquitectónico hasta esta ciudad dotándola de numerosos edificios modernistas, siendo su obra más destacada los grandes almacenes La Reconquista.

Pero hay mucho más que nos sorprenderá de esta población ubicada en tierras africanas, como sus playas, sus propuestas culturales y de ocio o su excelente oferta de alojamiento y restauración. Te lo contamos todo en nuestra Guía de Melilla.

Playas de Melilla

• Playa de la Alcazaba: esta playa de nueva creación, situada en la parte norte de la ciudad, tiene una longitud de 200 metros y una anchura de 30 metros. Es de arena dorada, y su oleaje es moderado, siendo su nivel de ocupación medio. Cuenta con paseo marítimo, alquiler de sombrillas, duchas y lavapiés.
• Playa de la Ensenada de los Galápagos: playa urbana situada bajo unos acantilados. Tiene 200 metros de largo, y está compuesta por arena dorada. Su oleaje es moderado, y su grado ocupación medio. Cuenta con servicio de alquiler de sombrillas y aseos.
• Playa del Hipódromo: con 750 metros de longitud, es la playa más larga de Melilla. Suele ser de aguas tranquilas, aunque cuenta con días de oleaje moderado. Está compuesta de arena dorada, y dispone de paseo marítimo, alquiler de sombrillas, aseos, duchas y lavapiés. Su grado de ocupación es alto.
• Playa de las Horcas Coloradas: situada al norte de la ciudad, este bonito arenal tiene una extensión de 400 metros de largo y 40 metros de ancho. Es de arena dorada, y su grado de ocupación es medio. Rodeada de un paseo marítimo, cuenta con servicio de alquiler de sombrillas, aseos, duchas y lavapiés.

• Playa de La Hípica: es la playa que se encuentra más cerca del puerto marroquí de Beni-Enzar. Tiene 600 metros de largo y 70 de ancho, y es la más popular de la ciudad, contando con el mayor grado de ocupación. Se puede llegar a ella andando por un paseo marítimo, aunque también se puede acceder en coche. Es de fina arena dorada, y cuando sopla el levante se forman pequeñas dunas. Cuenta con alquiler de sombrillas y hamacas, aseos, duchas y lavapiés.
• Playa Los Cárabos: con 300 metros de largo y 100 de ancho, es una playa urbana de arena dorada a la que se puede acceder a pie o en coche, ya que cuenta con aparcamiento. Dispone de aseos, duchas, lavapiés, servicio de alquiler de hamacas y sombrillas, paseo marítimo y lugares de restauración.
• Playa de San Lorenzo: playa urbana con 240 metros de largo y 100 de ancho. De arena dorada, suele contar con un alto nivel de ocupación. Se encuentra al lado del espigón sur del Puerto Deportivo, y posee buenos servicios y equipamientos. Entre otros, servicio de alquiler de sombrillas y hamacas, aseos, duchas, lavapiés, aparcamiento y lugares cercanos de restauración.
• Playa de Trápana: pequeña playa de 60 metros de largo y 30 de ancho ubicada al pie de unos acantilados. Es de arena dorada, y su acceso a pie es complicado. No cuenta con ningún tipo de servicios, siendo su grado de ocupación bajo.

Qué ver en Melilla

• Melilla “La Vieja”: así se conoce a la zona amurallada a la que los melillenses llaman popularmente “el Pueblo” o “La Ciudadela”. Está integrada por un recinto fortificado que se remonta al siglo XV, y que se halla sobre la roca que antaño, en época de los fenicios y los romanos, ocupaba la antigua Rusadir. Es una buena muestra de la evolución de la arquitectura militar hasta el siglo XVIII. Toda esta zona forma parte del Conjunto Histórico Artístico de la Ciudad de Melilla, siendo un Bien de Interés Cultural.
• Melilla Modernista: estamos en la segunda ciudad de España con mayor número de edificios modernistas y “art decó”, alrededor de 500, siendo los más famosos los diseñados por Enric Nieto. Entre los ejemplos más destacados se encuentran el edificio La Reconquista, del año 1915; el Palacio de la Asamblea, actual sede del Ayuntamiento de Melilla; la Casa de los Cristales, del año 1927; la Sinagoga Yamín Benarroch, que mezcla el modernismo con elementos califales y nazaríes; la Mezquita Central, en la que destaca su enorme cúpula; el edificio de la Cámara de Comercio, situado en la calle Miguel de Cervantes; la Casa Tortosa, del año 1927, o el Edificio El Acueducto, en la Avenida de los Reyes Católicos, en el que se combinan los estilos modernista, clásico y “art decó”.
• Museos de las Peñuelas: los almacenes de las Peñuelas fueron creados en el año en 1781 para guardar los productos y materiales con los que se abastecía a la ciudad fortificada. Tras una restauración realizada en el año 2007, en la actualidad acogen los Museos de Historia, Arqueología y Etnografía de Melilla. Se encuentran en la calle de la Maestranza 2-4, y el acceso es gratuito. Cierran los lunes.
• Hospital del Rey: ubicado en Melilla la Vieja, en su origen, en el siglo XVIII, era el principal hospital de la región del Rif. Hoy en día alberga el archivo municipal, y puede visitarse sólo por las mañanas.
• Iglesia de la Purísima Concepción: edificada en el siglo XVII, tuvo que ser restaurada por el terremoto del año 2016. De fachada sobria, en su interior atesora numerosos altares, imágenes y retablos, la mayoría de estilo barroco.

• Capilla de Santiago: es la única única construcción religiosa de estilo gótico que existe en todo el continente africano. Edificada en el siglo XVI, la encontraremos en la Plaza de la Avanzadilla.
• Cuevas del Conventico: situadas en la calle de la Iglesia, 2-4, se remontan al siglo XVIII. Originalmente daban cobijo en momentos de peligro, contando con imágenes religiosas para oficiar misa. Están divididas en tres niveles, y pueden visitarse de martes a sábado.
• Casa Melul: para muchos, es el mejor trabajo modernista de Enric Nieto. De principios del siglo XX, está ubicado en la plaza de España, dentro del Ensanche Modernista, formando parte del Conjunto Histórico Artístico de la ciudad.
• Faro de Melilla: se encuentra en Melilla la Vieja, sobre el baluarte del Bonete. Hay otros
  baluartes y torreones en la Ciudadela, como el de las Cabras, el de Bernal Francés, el de las Pelotas o el baluarte de la Concepción, donde se ubica el Museo de Historia Militar.
• Puerto Deportivo: lleva el nombre de Puerto Noray, y tiene capacidad para 397 embarcaciones deportivas y de recreo. Es el lugar perfecto para pasar el día, ya que cuenta con actividades náuticas, zona comercial y de ocio, restaurantes y cafeterías.
• Jardines del Agua: situados en la margen izquierda del río de Oro, estos modernos jardines están jalonados por grandes palmeras. Además de contar con una abundante flora, acoge dos grandes fuentes, una de ellas con una estatua de una gigantesca sirena.
• Monte Gurugú: ubicado en la sierra de Nador, se halla a unos 20 kilómetros de Melilla, y para visitarlo hay que cruzar la frontera con Marruecos. Es el lugar ideal para pasar un día en la naturaleza, haciendo senderismo o montando en bicicleta. Habitado por monos, se trata de una volcán extinto de 890 metros altura. Desde su cumbre, en la que permanecen las ruinas de dos fuertes españoles, se disfruta de unas impresionantes vistas de la ciudad de Melilla. En días claros, incluso se pueden ver Argelia, las islas Chafarinas o Sierra Nevada, ya en la Península Ibérica.

De compras por Melilla

Melilla tiene la consideración de Puerto Franco y Zona de Baja Imposición “Tax Heaven”. Esto significa que aquí no se aplican aranceles ni se paga IVA, resultando los precios más bajos. Esto hace del shopping en esta ciudad autónoma todo un placer. Podremos comprar tanto en los económicos bazares como en tiendas de prestigiosas firmas y marcas, y siempre más barato.

La mejor zona comercial es la conocida como el "Triángulo de Oro", que comienza en la Plaza de España y se extiende a lo largo de la larga Avenida Juan Carlos I. En esta parte de la ciudad no sólo se encuentran los principales edificios modernistas, también se concentra el mayor número de establecimientos comerciales. Hay tanto grandes firmas como tiendas regentadas por musulmanes, hebreos e hindúes.

Y, ¿qué comprar en Melilla? Pues, para empezar, objetos de oro y plata a un excelente precio. Las joyerías en Melilla son todo un reclamo. También se pueden adquirir artículos de artesanía, especialmente de cuero, tapices o cerámicas. No faltan tiendas de regalos, boutiques, zapaterías o tiendas de complementos, entre otras muchos posibilidades. Para compras gastronómicas, hay que acercarse al Mercado Central y al Mercado del Real, donde encontraremos, con una excelente presentación, los mejores pescados, mariscos, frutas, verduras, especias…

Tapear en Melilla

Comer en esta ciudad autónoma es un sabroso placer, y lo es más salir de tapas por Melilla, que aquí se ponen gratis con cada consumición. Son muchos los bares y tabernas por los que podremos realizar una buena ruta de tapeo, ya que todos están siempre bien surtidos de aperitivos y de tapas.

La oferta de tapas incluye desde los tradicionales montaditos a especialidades culinarias locales, como el pastel de pescado o los riñones a la plancha. La cocina berever está también muy presente, con tapas como los exquisitos pinchos morunos, el cuscús de verdura con carne, el pollo al moruno, el cuscús dulce o la pastela, que es parecido a una empanada de pollo, pero espolvoreada con azúcar glasé y canela.

Una de las mejores zonas para tapear por Melilla incluye el barrio Reina Victoria y sus alrededores, que conforman el denominado Triángulo de Oro del Modernismo.

De fiesta por Melilla

• Mercado Renacentista: tiene lugar a finales del mes de junio, e incluye torneo de justas a caballo, un baile renacentista o pasacalles, además de contar con numerosos puestos de artesanía. Las actividades se extienden por la Plaza de Armas, la Avenida Juan Carlos I, la Plaza de las Culturas o el Foso de los Carneros.
• Fiestas de la Virgen del Carmen: tiene lugar el día 16 de julio, fecha en la que se homenajea a la Patrona de los pescadores. El principal lugar de celebración es el barrio de Corea, el de ambiente más marinero. Entre los actos se incluyen una verbena, actividades para los más pequeños o una gigante paella popular. También se celebra la tradicional procesión de la Virgen desde el Hipódromo, pasando por la Iglesia de San Agustín, hasta la playa. Allí la suben a una barca para realizar la travesía por el mar. El día termina con una ofrenda floral en la Plaza de los Pescadores.
• Día de Melilla: el 17 de septiembre se conmemora la fecha en la que ciudad pasó a ser plaza de soberanía española, tras ser conquistada por las tropas castellanas en el año 1497. Esta jornada incluye diversos actos institucionales, como el Homenaje a la Bandera o el desfile militar.
• Fiestas Patronales de la Virgen de la Victoria: conocida popularmente como la Feria de Septiembre o Feria de Melilla, se celebra en honor de la Patrona de la ciudad. El recinto ferial se instala en la Explanada Multifuncional de San Lorenzo, muy cerca del puerto deportivo. Suele durar una semana, y cuenta con Feria de Día y Feria de Noche. La de Día es para ir de tapeo por las casetas, habiendo particulares y oficiales, y también por los establecimientos montados para la ocasión. El ambiente es muy andaluz, con música de rumbas y sevillanas, y los asistentes van ataviados con trajes flamencos. Por la noche, la Caseta Oficial de Festejos ofrece actuaciones musicales de primer nivel. El día 8, festividad de la Virgen de la Victoria, tiene lugar una multitudinaria procesión por la zona del Ensanche Modernista.