Destinos secretos en Mallorca: la aldea de Randa

En el interior de Mallorca (Islas Baleares), alejada de las zonas turísticas y de las masificaciones estivales de litoral, se encuentra la pequeña población de Randa. Esta encantadora aldea se encuentra situada a los pies del monte Puig de Randa, de 543 metros de altura, y es un destino perfecto para disfrutar de la naturaleza y de la espiritualidad y tranquilidad que emanan sus tres santuarios.

Randa pertenece al municipio de Algaida, y su en bello entono podremos ver numerosas fuentes naturales, las cuales vienen utilizándose desde la antigüedad. Con un agradable clima mediterráneo, bonitos parajes e interesantes tradiciones, su visita es de lo más recomendable en cualquier época del año.

Qué visitar en Randa

Sin lugar a dudas, la montaña de Puig de Randa y sus santuarios son los principales atractivos de esta villa mallorquina. Al Puig se accede desde una carretera que parte de la misma población y llega hasta la cumbre, llamado Puig del Cura. Subiendo hacia la cima nos encontraremos con el primer santuario, el de Nostra Senyora de Gràcia. Su origen fue la Cueva de s'Aresta, un lugar donde a mediados del siglo XV se trasladaron a vivir dos frailes franciscanos, que construyeron una pequeña ermita. Desde la localidad de Llucmajor también se puede acceder a este santuario por otro camino distinto, pero igual de bello.

Seguimos ascendiendo y llegamos a la Ermita de Sant Honorat. Su origen se remonta al año 1394. Fue entonces cuando un noble caballero, llamado Arnau Desbrull, decidió retirarse voluntariamente a este paraje como ermitaño y construir una pequeña capilla. En 1661, debido a su ruinoso estado, la primitiva ermita fue derruida y se edificó en su lugar la actual iglesia.

Finalmente, en la cumbre del monte se encuentra el Santuario de Nostra Senyora del Cura. Aquí vivió, en torno al año 1273, el filósofo, poeta, místico y teólogo Ramon Llull. En este mismo lugar se fundó en el siglo XV una escuela luliana para difundir su doctrina. Ubicado en el mismo Puig del Cura, las vistas de la isla de Mallorca desde el santuario son realmente espectaculares. Otros lugares que recomendamos visitar en Randa son su iglesia parroquial, las casas tradicionales de la aldea o las fuentes de la localidad, especialmente la Fuente de Randa.

Otros atractivos turísticos de Randa

En Randa podremos disfrutar de la tradicional gastronomía mallorquina, que cuenta con platos tan exquisitos como las sopas mallorquinas, los butifarrons, el trampó, el frit, la caldereta de langosta, las cocas, las ensaimadas o la sobrasada.

La belleza natural que envuelve a este pueblo balear, y la proximidad de tres santuarios, hacen de éste un lugar ideal para evadirse de la rutina diaria, relajarse y meditar. Los santuarios pueden visitarse tanto de día como de noche, y si lo hacemos por la noche podremos deleitarnos con unos espectaculares cielos estrellados.

Para los que prefieran una estancia algo más animada, en los alrededores de Randa se encuentran los campos Golf Son Gual y Golf Park Puntiró, el Parque Acuático Aqualand, las playas de El Arenal y el Puerto de El Arenal.