Lo mejor de Palma de Mallorca

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Monumentos, espacios naturales, lugares culturales… Palma de Mallorca ofrece a sus visitantes una gran variedad de propuestas para que nuestra estancia sea de lo más completa y grata. Llegar a la isla es fácil, tanto en avión como por barco, y alojarse no plantea ningún problema, gracias a la variada oferta de hoteles en Palma. 

Playas de Palma de Mallorca

Son la estrella del verano, las playas y calas locales. Las encontraremos tanto en la ciudad como en sus alrededores. Durante los meses estivales presentan una alta ocupación, algo a tener en cuenta si lo que buscas tranquilidad. Una de las más grandes es la playa urbana de Palma, que resulta perfecta para realizar actividades como el winsurf, las excursiones en moto acuática o el submarinismo, y también podremos alquilar un velomar. Más pequeños son los arenales de Can Pastilla, Can Pere Antoni, Cala Mayor o Ciutat Jardí, pero a pesar de su tamaño cuentan con bares, restaurantes y chiringuitos, y ofrecen mucha animación por la noche. 

Castillo de Bellver

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Situado a tres kilómetros del casco histórico de la ciudad, esta fortaleza se construyó por orden del rey Jaime II durante el siglo XIV. De estilo gótico, el monarca escogió el castillo para ser su residencia. Se encuentra sobre una pequeña colina que ofrece espectaculares vistas panorámicas de la Bahía de Palma y de la bella Sierra de la Tramontana. Su estructura es circular, y dispone de una gran torre del Homenaje y de otros tres torreones, además de contar con un patio de armas, un segundo patio construido sobre un aljibe y una capilla. 

Palacio Real de la Almudaina

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Construido en el siglo XII durante la ocupación musulmana, es también conocido como el Alcázar Real de Mallorca. Albergó la sede del reino independiente de Mallorca durante los reinados de Jaime II, Sancho I y Jaime III, y bajo la regencia de Pedro IV se incluyó dentro del patrimonio de la corona de Aragón. Está compuesto por un torreón rectangular donde se hallaba el Palacio del Rey; el Palacio de la Reina, la Capilla Real, varios patios y una sala llamada Tinell. Actualmente lo utiliza la Casa Real Española como residencia para las ceremonias oficiales que tienen lugar en verano. 

Casco Histórico de Palma

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La parte más antigua de la ciudad de Palma ofrece cierta tranquilidad a sus visitantes, ya que hay menos comercios. Posee un trazado medieval de calles estrechas, salpicadas por bonitas plazas y varios parques. Es aquí donde se concentran algunos de los principales monumentos de la villa, como la Catedral, los Baños Árabes, el Museo Diocesano, el Palacio de la Almudaina o Es Baluard, además de varias iglesias y conventos. 

Lonja de Palma

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Llama la atención en el casco histórico un edificio de estilo gótico y planta rectangular. Hablamos de la Lonja de Palma, realizada en el año 1426 por Guillem Sagrera en el año 1426. Ya en su interior podremos ver que hay una sola cubierta con bóveda de crucería apoyada en columnas helicoidales. La Lonja está separada por un jardín de otro edificio  emblemático, el Consulado del Mar, de estilo renacentista, que hoy en día es la sede del gobierno autonómico balear.

El Palacio Oleza

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Para conocer una de las mejores muestras de casas señoriales mallorquinas, sólo tendremos que acercarnos al Palacio Oleza, también conocido como Can Oleza. De finales del siglo XVII, incluye un agradable patio interior, propio de este tipo construcciones. De hecho, desde mediados de mayo a finales de junio podemos realizar la “Ruta de los Patios de Mallorca”, ya que los patios privados abren sus puertas a los visitantes con motivo de las fiestas de primavera, y en ellos se celebran conciertos de música clásica gratuitos.

El Pueblo Español

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Una de las visitas más curiosas de Palma es la del Pueblo Español, que consiste en una especie de museo de lugares de España al aire libre. Está situado en el barrio de Son Espanyolet, y fue construido entre los años 1965 y 1967 por el arquitecto Fernando Chueca Goitia. En sus más de 6.000 metros cuadrados se han reproducido a escala algunos de los monumentos, plazas y calles más representativos de varias ciudades españolas. El recorrido también incluye diversas demostraciones de las costumbres más populares de distintos pueblos de España, exposiciones de artesanía y degustaciones gastronómicas.