Guía de la ciudad de Palma de Mallorca
La ciudad de Palma de Mallorca es sorprendente y cómoda de visitar. Arte, buena gastronomía, fiestas, agradables rincones, cielo azul..., y el mar Mediterráneo siempre omnipresente. ¡Qué más se puede pedir!
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Capital de la isla balear de Mallorca, la ciudad de Palma está situada en la preciosa bahía homónima. Esta moderna urbe tiene a sus espaldas más de 1.000 años. Fue fundada por los romanos, ocupada por los árabes, conquistada por el rey Jaime I de Aragón, atacada por piratas turcos y magrebíes o controlada por bandoleros.
De su agitado y apasionante pasado quedan interesantes muestras en esta villa, que ha ido creciendo con una clara vocación turística. El agradable clima insular, la estupenda infraestructura de alojamiento y restauración, las playas y calas locales o el hermoso paisaje que rodea la ciudad convierten a la capital mallorquina en un apreciado destino en cualquier época del año.
Descubre con esta guía de Palma de Mallorca todo lo que puedes ver, descubrir, apreciar, saborear y vivir en esta maravillosa ciudad mediterránea.
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Qué ver en Palma de Mallorca
- Catedral de Palma: su nombre completo es Catedral-Basílica de Santa María de Palma de Mallorca, pero los lugareños la conocen popularmente como la Seu. Se remonta al siglo XIII, y por su situación junto al mar puede verse desde casi todas partes. Destacan su nave, la más alta de España, y su excepcional rosetón de estilo gótico levantino.
- Palacio de la Almudaina: surgió como un alcázar real, símbolo del poder árabe, y tras la reconquista pasó a ser residencia de las cortes de los reinos de Mallorca, de Aragón y de España. En su interior hay una ecléctica mezcla que incluye desde baños árabes a tapices flamencos.
- La Lonja de Palma de Mallorca: conocida como Sa Llojta, representa una de las mejores muestras de arte gótico en la isla. Fue diseñada por el arquitecto Guillem Sagrera entre 1420 y 1452, y funcionó como sede del Colegio de Mercaderes.
- Castillo de Bellver: no se halla en la misma ciudad, pero está sólo a tres kilómetros, siendo su visita altamente recomendable. Y es que se trata del único castillo medieval redondo que hay en España, además de ser el primero en ser construido en Europa, a principios del siglo XIV.
- Castillo de San Carlos: se trata de una pequeña fortaleza ubicada a la entrada del puerto de Palma, y que actualmente alberga el Museo Histórico Militar.
- Baños árabes: esta sala cuadrada rodeada de columnas es una de las pocas muestras de arquitectura musulmana que se conserva en la isla. Se utilizaba para disfrutar de baños calientes, gracias a un doble suelo con orificios por donde circulaba el agua caliente y salía el vapor.
- Iglesia de Santa Eulalia: la hallarás en el casco antiguo de la ciudad, y en ella fue coronado como rey de Mallorca Jaime II el 12 de septiembre de 1276. Posee tres naves y dos puertas de acceso.
- Parque del Mar: este parque urbano se construyó en los años 70 para emular el recuerdo del mar bañando la muralla, tal y como sucedía antaño. Para ello se excavó un gran lago de agua salada sobre la superficie ganada al mar, sobre el que se refleja la Catedral.
- Convento de San Francisco: tanto la Iglesia de San Francisco como su claustro gótico, declarado Monumento Nacional, conforman uno de los conjuntos arquitectónicos más bonitos y mejor conservados de la ciudad.
- Plaza Mayor: es el centro de la vida social y comercial de Palma. Esta gran plaza está rodeada por edificios del siglo XIV que antaño acogieron las oficinas de la Inquisición, y que actualmente albergan tiendas, cafés, bares, restaurantes, galerías... Aquí se celebran varios mercados semanales.
- Fundación Pilar i Joan Miró: se trata de una fundación creada por el pintor catalán Joan Miró y su esposa Pilar, quienes quisieron proporcionar a la ciudad de Palma un centro cultural y artístico. En su interior alberga una destacada colección de cerca de 6.000 obras.
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Playas cerca de Palma de Mallorca
- Playa de Can Pere Antoni: podrás llegar a ella en bicicleta por un carril bici del Paseo Marítimo, y está sólo a dos kilómetros del centro de Palma de Mallorca. Con 750 metros de longitud, cuenta con todos los servicios necesarios, incluyendo socorrista, aparcamiento y acceso para personas con movilidad reducida.
- Playa de Palma: situada a 14 kilómetros del centro de la ciudad, es una de las más largas de la isla. Cuenta con 4.600 metros de fina arena blanca y está dotada de todo tipo de servicios, por lo que cuenta todos los años con la distinción de Bandera Azul.
- Calas del Mago y Portals Vells: están comunicadas entre sí. La cala del Mago es nudista y posee arena dorada y cristalinas aguas de tonalidad turquesa. Por su parte, Portals Vells cuenta con una cueva, de unos 80 metros de largo por unos 60 de ancho, de la que se extrajeron las piedras para edificar la catedral de Santa María de Palma de Mallorca.
- Cala Blava: se puede acceder a esta tranquila cala en el autobús número 23 desde la Plaza de España de Palma. Es muy familiar y siempre está muy limpia.
- Cala Fornells: se puede llegar a ella tanto en coche como en el autobús 102 que sale desde la Estación Intermodal de Plaza España de Palma. La diferencia entre ambas opciones es el tiempo, en coche 20 minutos y en autobús casi una hora, pero el recorrido es muy bonito, y la playa merece la pena.
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Comer en Palma de Mallorca
Como turística y cosmopolita ciudad que es, Palma de Mallorca cuenta con todo tipo de locales de restauración: restaurantes de cocina tradicional, bares y tabernas de tapas y raciones, locales de comida rápida o restaurantes con cocina de casi cualquier lugar del mundo. Pero, ya que estás aquí, qué mejor que conocer la gastronomía local.
No dejes de probar platos tan típicos como el frit mallorquí, una fritura de hígado con patatas y pimientos; la porcella asada, que es un lechón asado que suele acompañarse con patatas y con hierbas de la isla, especialmente romero; el arròs brut, un arroz caldoso con setas, caracoles y carne de cerdo, de conejo y de aves; las sopas mallorquinas, el tumbet, el lomo con col o con esclatasang, la coca de verdura, el trampó o el pa amb oli. Prueba también las ensaimadas, que pueden estar rellenas de crema, cabello de ángel o chocolate, incluso con sobrasada.
Entre los restaurantes más recomendados de la ciudad hoy en día se encuentran Es Rebost, en el número 20 de la Avenida de Jaume III; La Mirona, en Carrer Sant Jaume, 21 A; Emilio Innobar, en Carrer de la Concepción, 9; Patrón Lunares, en Carrer de la Fàbrica, 30; Restaurante Sa Roqueta, en Carrer Sirena, 11; Tast Avenidas, en Comte de Sallent 13; Adrián Quetglas, en Paseo Mallorca 20; Quadrat, en la plaza Sant Francesc 5, o el Restaurante Amaya, en Carrer de la Fàbrica.
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La noche en Palma de Mallorca
- Zona de la Playa: es quizá la zona más masificada y turística de la ciudad. El ambiente nocturno, tanto el del Arenal como el de Can Pastilla, se reparte por entre los muchos bares de copas y discotecas que abren hasta altas horas de la mañana. Aquí, más que español o mallorquín, se habla alemán, dado el gran el gran numero de jóvenes de este país que se concentran en esta parte de la ciudad todos los veranos.
- Paseo Marítimo: está parte de la ciudad ofrece el ocio nocturno más elegante y sofisticado. Aquí se encuentran los bares de copas, clubes y discotecas más exclusivos, los cuales cierran a altas horas de la madrugada. Como contrapunto, hay una pequeña zona en el paseo conocida como Dársena Can Bárbara, con un ambiente mucho más juvenil e informal.
- Zona del Casco Antiguo: el ambiente hipster y bohemio se concentra por la noche en esta parte de la ciudad, en los locales de las callejuelas que rodean a la catedral, ofreciendo la mayoría de ellos música en directo. Aquí también podrás empezar la noche cenando en alguno de los estupendos restaurantes.
- Zona Paseo Mallorca: en esta céntrica zona encontraremos los locales más clásicos, desde elegantes pubs a coctelerías, todos ellos con muy buen hacer.
- Plaza Gomila: es aquí donde se reúne lo más cool de la ciudad, donde se abren los locales mas modernos y donde la marcha no termina nunca. No apto para claustrofóbicos, porque las aglomeraciones son habituales.
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Ir de compras en Palma de Mallorca
En Palma se encuentran las mejores tiendas de Mallorca. Aquí encontrarás una gran variedad de tiendas y boutiques. Los objetos más codiciados en el shopping insular son los realizados en cuero y piel, como chaquetas, bolsos y zapatos; las joyas realizadas con perlas de Manacor; los objetos de vidrio soplado, de arcilla o de madera y productos gastronómicos como la sobrasada, el paté de hígado de cerdo, la ensaimada o el Gató de Almendra.
Al Paseo del Borne se le conoce como la Milla de Oro de Palma. En esta parte de la ciudad han ido abriendo sus tiendas diseñadores como Louis Vuitton, Hugo Boss, Carolina Herrera o Mulberry. Antes de que el Borne se hiciese con el dominio de la moda, la Avenida de Jaime III era el lugar ideal para salir de compras. Sigue siendo una buena zona, con tiendas como Cartier, Lottusse, Farinelli o “El Corte Inglés”. Los comercios más tradicionales los encontrarás en torno a la Plaza de España, repartidos por la calle Sant Miquel, el Mercado del Olivar, la Plaza Mayor, la Calle Oms o Las Ramblas.
Si te van los mercadillos, aquí los hay para todos los gustos. El de la Plaza Mayor se monta los lunes y viernes, excepto en enero y febrero, y se centra en la artesanía. El de Can Pastilla los martes y jueves, y cuenta con todo tipo de productos. El de Pere Garau se celebra los martes, jueves y sábados, y dispone de más de 200 puestos. El mercado de Santa Catalina también se monta los martes, jueves y sábados, pero sólo cuenta con una docena de puestos. El mercadillo de S’Arenal, los miércoles, ofrece recuerdos de la isla y productos de la tierra. Y para acabar, el Baratillo, el mercadillo más grande de la isla. Se monta los sábados en la Avinguda de Gabriel Alomer i Villalonga, y cuenta con cerca de 245 puestos.
Fuente de la imagen: Viajero Turismo
Fiesta de San Sebastián en Palma
Si hay una fiesta que identifica y se celebra por todo lo alto en Palma es la de San Sebastián. Ya la noche del día 19 de enero, víspera de la celebración, la ciudad se llena de hogueras. Alrededor de ellas los vecinos se reúnen para “torrar” carne, sobrasada o butifarra, y se celebran conciertos por toda la villa.
La hoguera más grande, y la primera en encenderse, es la de la Plaza Mayor. El encargado de prenderla es el “Drac de Na Còca”, que lo hace tras haber bailado a su alrededor al ritmo de las xeremies. Ya el día 20, festividad de San Sebastián, tiene lugar un intenso calendario de actividades culturales. Además, en esta fecha, los museos y monumentos más emblemáticos abren de forma gratuita.
Como en todas las fiestas baleares, aquí también hay correfocs, y las calles se llenan de todo tipo de demonios y monstruos que escupen fuego. Por lo tanto, si piensas asistir a esta fiesta y bailar bajo el fuego al ritmo de los tambores, debes ir bien equipado con guantes, gorra y gafas.
Fuente de la imagen: EWallpapers
Palma de Mallorca es una ciudad que brilla al sol y se refleja sobre el azul del Mediterráneo. Un lugar para callejear y perderse, para salir de compras, para comer como un rey y para vivir cada noche como si fuera la última. Disfruta de sus playas, de su patrimonio artístico-cultural y de su oferta cultural, y convierte esta villa en punto de partida para conocer el resto de la isla balear de Mallorca.