Las playas más bonitas de Mallorca
En la de por sí bella isla de Mallorca encontraremos playas y calas de ensueño.
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Playas urbanas, recónditas calas solitarias, arenales para nudistas, playas a pie de tu hotel en Mallorca, naturaleza y mar Mediterráneo en la isla más grande del archipiélago balear. Este verano podrás comprobarlo.
Cala Varques, en Manacor
Se encuentra en la zona oriental de la isla. Sólo tenemos que seguir en coche la dirección “Calas de Mallorca”. Justo a 12 kilómetros de Puertocristo hay un camino que, tras 20 minutos andando, nos llevará hasta la cala. La caminata evita las aglomeraciones, así como las vacas que encontraremos en el trayecto. La recompensa, una playita de transparentes aguas y rodeada por pinares que oculta una sorpresa: una red de galerías subacuáticas.
Caló des Moro, en Santanyí
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Situada seis kilómetros de la localidad de Santanyí, la playa de Caló des Moro parece una gran piscina ubicada entre rocas. Es mucho mejor visitarla en los meses de junio y septiembre, ya que en julio y agosto sus 30 metros de extensión presentan un alto grado de ocupación. De arena blanca y aguas cristalinas, posee un entorno natural que rivaliza con la belleza de la propia cala.
Cala de Torrent de Pareis, en Tramuntana
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En la zona costera de la sierra de Tramuntana se halla esta cala de grava y pequeños guijarros, pero realmente bonita. Se encuentra encajonada en un cañón con paredes verticales que alcanzan en algunos puntos los 200 metros de altura. Los bellos parajes naturales que la rodean se encuentran prácticamente intactos. Su acceso a pie es algo complicado, pero también se puede llegar a este pequeño paraíso a lo grande: en un barco desde el puerto de Sóller y bordeando la costa norte de Mallorca.
La playa de Alcudia
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Para los que prefieran una playa urbana, con todo tipo de servicios en infraestructuras pero con mucho encanto, la de Alcudia les agradará, y mucho. Es de gran tamaño, más de siete kilómetros, y se divide en dos zonas: un tramo donde hallaremos una excelente oferta de ocio y de servicios, junto al puerto deportivo, y una segunda zona más tranquila llamada Ciudad Blanca, que llega hasta el límite de la Playa de Muro. Podremos tumbarnos en su suave arena blanca, pero si lo preferimos hay servicios de hamacas y sombrillas.
Cala S´Almunia, en Santanyí
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Situada también en el término municipal de Santanyí, como el Caló des Moro, esta cala resulta mucho más tranquila. Para adentrarse en el agua hay que hacerlo por una entrada junto a unas pequeñas casitas de pescadores o dando un salto desde alguna roca. Para los más valientes, se puede realizar un impresionante salto desde su arco natural. Sus aguas transparentes de color turquesa son muy apropiadas para la práctica del esnórquel.
Cala Mondragó, en La Turquesa
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La cala Mondragó se halla en la Reserva Natural La Turquesa, junto a las calas Sa Amador y Es Borguit. De fácil acceso, está rodeada por pinares y rocas, desde donde también podrás lanzarte a sus cristalinas aguas y de poca profundidad, pero la suficiente para no revestir peligro. Es de arena fina y relativamente tranquila.
Hay muchas más playas y calas bonitas en Mallorca, como la playa de Formentor, en Pollença; la Playa de Es Trenc, en Campos, o la Cala es Caragol, junto al faro de Ses Salines, pero lo mejor será que las descubras por ti mismo.
