Los castillos más impresionantes de Andalucía
Andalucía es la comunidad autónoma con más fortalezas de toda España y presume de ello por todo su territorio. Recorre algunos de los castillos y alcazabas más importantes.
Los secretos y leyendas que guardan los castillos han sido siempre fuente de inspiración de poemas, novelas o películas; pero también un atractivo para cualquier visitante que se precie.
España tiene en su haber cerca de 10.000 castillos catalogados, sin embargo, no todos están en buenas condiciones. Los hay en ruinas y olvidados, otros tienen algunas líneas reconstruidas y los más afortunados han sido recuperados en su totalidad y albergan actividades relacionadas con el turismo o la hostelería. Jaén es la provincia de Andalucía con más castillos, pero hagamos un repaso de otras fortificaciones a lo largo de toda esta comunidad autónoma.
Las alcazabas de Málaga, Granada y Almería
La principal construcción que se conserva en Málaga de la época árabe es la Alcazaba. Sus murallas y edificios se asientan sobre el cerro de Gibralfaro, un excelente mirador desde el que contemplar la ciudad, el puerto y la bahía. Las zonas de más antigüedad se levantaron en el siglo XI, durante el Califato cordobés, sobre restos romanos y fenicios. Su trazado es asimétrico, amoldándose así al cerro sobre el que se encuentra, y actualmente conserva parte de su muralla, así como algunas de sus puertas. Su interior alberga el Centro de Interpretación con las diferentes etapas del conjunto monumental.
Una de las edificaciones más conocidas en el mundo entero es la Alhambra de Granada. En su extremo, sobre una colina que cae sobre el río Darro, está la fortaleza puramente militar o alcazaba. Se trata de un espacio de planta trapezoidal protegido con fuertes muros. Cuenta con elevadas torres defensivas, entre las que destacan la del Homenaje, la Quebrada y la Hueca en un extremo, y la de la Vela y la de la Pólvora en el otro. Esta última tiene contiguo un mirador en el que hay una placa donde se pueden leer los conocidos versos de Francisco de Icaza: “Dale limosna, mujer, que no hay en la vida nada tan triste como la pena de ser ciego en Granada”.
También Almería conserva su alcazaba, máximo exponente de la herencia musulmana en la provincia y declarada Bien de Interés Cultural. Destaca por sus dimensiones, pues es la de mayor tamaño entre las que construyeron los musulmanes en la Península. Se considera que fue Abderramán III, califa cordobés, el que la mandó levantar en el año 955, aunque más adelante fuera ampliada, concretamente en tiempos de Almanzor. Destaca un triple anillo amurallado que la protege y que, a su vez, la conecta con la ciudad baja.
Los castillos más bonitos de Córdoba, Cádiz y Sevilla
La fortaleza palaciega de Almodóvar del Río, en la provincia de Córdoba, guarda en su historia y arquitectura vestigios de diversas culturas, entre las que destacan la musulmana y la cristiana. Empezó a construirse, a partir de ruinas íberas y romanas, sobre el año 740 en tiempos del califato cordobés. Conserva nueve torres en su muralla y, en su interior, destaca un Patio de Armas muy protegido por almenas, pasadizos o las propias torres. En 1901 comenzó su restauración, estando en manos del XII conde de Torralva. Hoy en día es, además, un museo que poder visitar con visitas guiadas y teatralizadas, entre otras actividades.
El castillo de Castellar de la Frontera, en Cádiz, fue construido en el siglo XIII. La parte antigua de esta villa fue declarada Monumento Histórico Artístico en 1963. Tuvo una gran importancia en la defensa marítima, especialmente en los enfrentamientos entre los cristianos y los musulmanes cuando trataban de hacerse con el control del Estrecho. Años más tarde, formó parte de la Casa Ducal de los Medinaceli, hasta que se les expropió en el siglo XX. Actualmente, acoge un hotel.
La población de Carmona, en la provincia de Sevilla, posee un Alcázar que se erige sobre la Puerta de Sevilla. Está, concretamente, en la Plaza de Blas Infante y, aunque sufrió importantes cambios en los siglos XIV y XV, fue restaurado entre los años 1973 y 1975. Destaca la torre del Homenaje, que conserva perfectamente los sillares almohadillados, así como el Patio de los Aljibes, en cuyo centro hay un aljibe cavado en la roca y seis lucernas alrededor. Actualmente, alberga la sede del Centro de Recepción Turística y sus dependencias se han habilitado para poder celebrar actos culturales y turísticos.
