Cuatro refrescantes cascadas en la Comunidad de Madrid
Madrid cuenta en su comunidad autónoma con una buena lista de cascadas que refrescarán hasta el verano más sofocante, y todas se encuentran situadas en parajes realmente bonitos.
Si estás en verano en Madrid, y necesitas urgentemente realizar una refrescante escapada, qué mejor que visitar algunas de las preciosas cascadas que hay repartidas por la Comunidad de Madrid. Muchas de ellas no se encuentran en su mejor momento durante la época estival, pero siguen contando con agua, y se encuentran en parajes que te dejarán sin aliento.
Para disfrutar de un momento de relax, y huir de las altas temperaturas veraniegas, ahí van cuatro magníficas propuestas de lo más frescas y sorprendentes: la Chorrera de Litueros, la Cascada del Purgatorio, la Cascada del Hervidero y la Chorrera de San Mamés.
- La Chorrera de los Litueros, en Somosierra: considerada la más alta de la Comunidad de Madrid, cuenta con una altura de 40 metros de altura. Viniendo desde Madrid, se encuentra pasado el Puerto de Somosierra en dirección a Segovia, y hay que realizar una pequeña ruta de senderismo para llegar hasta ella, aunque la cascada se puede ver desde la misma carretera A-1. En sus mejores momentos, a partir de finales de otoño y hasta bien avanzada la primavera, su fría agua cae con fuerza para más adelante originar el río Duratón, en el que también confluyen las aguas del Arroyo de las Pedrizas. Es una cascada realmente fotogénica.
- La Cascada del Purgatorio, en Rascafría: uno de los pueblo serranos más bonitos de Madrid es, sin duda, Rascafría. Y qué decir de su entorno natural, realmente espectacular. Desde el Puente del Perdón, frente al histórico Monasterio de El Paular, parte una ruta que discurre por el bello Valle de El Paular y está rodeada por la Sierra de Guadarrama. Es un fresco camino junto al río Aguilón, envuelto por bosques de robles, pinares y otros árboles de ribera, como fresnos. Al final del trayecto, de dificultad alta y una extensión de trece kilómetros ida y vuelta, se encuentra la Cascada del Purgatorio, que en realidad se trata de dos grandes saltos de agua originados por el propio río Aguilón.
- La Cascada del Charco del Hervidero, en San Agustín del Guadalix: situada a cinco kilómetros de este pueblo madrileño, está considerada como una de las cascadas más bonitas de la Comunidad de Madrid. Originada por el río Guadalix, a ella se llega tras una ruta circular de baja dificultad que se tarda en realizar entre tres y cuatro horas, dependiendo de la marcha y las paradas. La mejor época para visitarla es en primavera, aunque durante los meses de verano tanto esta cascada como su entorno natural nos dejarán también totalmente fascinados.
- La Chorrera de San Mamés: originada por el arroyo del Chorro, a esta espectacular cascada de la Sierra Norte de Madrid se llega tras un ruta de nivel medio y con cierto desnivel de subida. El punto de partida es la localidad de San Mamés, uno de esos pueblos que todavía conservan su encanto serrano. La cascada tiene una altura de 30 metros, y se encuentra rodeada por un precioso entorno natural protagonizado por los Montes Carpetanos, además de contar con la cercana presencia del enorme embalse de Riosequillo. El verano, al igual que el otoño y la primavera, es una buena época para disfrutar de la chorrera, de los agradables pueblos de la zona y de la exultante naturaleza que los rodea.