Jardin Botanico Arganzuela

El Invernadero y jardín botánico de Arganzuela es uno de los jardines más bonitos de Madrid y sorprende que aún sea tan desconocido. Tiene unos 7100 metros cuadrados de extensión y se encuentra albergado en el antiguo matadero municipal del distrito de Arganzuela, construido por el arquitecto Luis Bellido y González entre los años 1908 y 1928.

En 1992 fue restaurado y rehabilitado para su uso como invernadero tomando como modelo los invernaderos decimonónicos situados en los parques de ciudades europeas como Viena o Londres, ejemplos representativos de la Arquitectura del Hierro del siglo XIX.

Y sin duda han conseguido crear un lugar único. Alberga 9000 especies de plantas que se presentan en cuatro biotopos perfectamente diferenciados, cada una de ellos con un microclima distinto, albergando cuatro clases diferentes de plantas: flora tropical, flora subtropical, plantas crasas y cactáceas y plantas de crucero y acuáticas .Junto a las plantas encontraremos números y paneles para identificar todas y cada una de ellas. Un pasillo recorre también cada una de las zonas por la parte alta, desde donde podremos ver las plantas desde arriba.

Climas distintos

En la zona desértica por ejemplo hay cactus. Estas plantas se caracterizan por poder almacenar gran cantidad de agua en su interior. Allí encontraremos cactus de todo tipo. Esta zona se mantiene entre 6ºC y 11ºC en los meses fríos y entre 27ºC y 34ºC en los meses más cálidos. La humedad se encuentra en torno a 30%-60%.

La historia del Palacio de Cristal de la Arganzuela comienza en 1908. Fue construido entre este año y 1928 como parte del gran recinto del Matadero de Madrid. En sus orígenes se dedicó al almacenamiento de las hortalizas que consumían los animales que acaban en otras instalaciones del Matadero. De ahí que fuera conocido popularmente como la Nave de Patatas.

Desde los años 70 el Matadero fue rodeado por la ciudad y fue cerrando instalaciones, y estas fueron quedando en el olvido. En 1992 se puso fin al abandono de este edificio cuando fue reformado y modernizado para crear un gran invernadero para exhibir plantas de climas tropicales, subtropicales y desérticos, y algunas especies animales. Se ganó en claridad, y los madrileños ganaron otro espacio verde.

El sitio es una sorpresa y fotogénico como pocos. Es un lugar perfecto para hacer sesiones de fotos porque además del entorno ideal no suele tener mucha gente.

Entrada gratuita

Una de las grandes ventajas de este plan es que la entrada es gratuita. Se puede llegar hasta el lugar en cercanías, en metro o en autobús y dentro del invernadero está prohibido fumar, jugar a la pelota, las bicicletas y acceder con perros sueltos.

Un paseo por este invernadero es un plan más que recomendable para hacer en familia o con amigos. Los niños podrán disfrutar de una gran cantidad de especies distintas de plantas y podrán ver un espacio enorme lleno de vegetación, algo que no es tan sencillo en una ciudad tan grande como lo es Madrid.

Horarios

El horario de apertura es de martes a viernes de 9.00 h a 15.00h y sábados, domingos y festivos de 10 h a 14h.