Madarcos, el pueblo más pequeño de Madrid que rebosa encanto

Situada en la zona septentrional de la provincia de Madrid, próxima a Buitrago de Lozoya, en las estribaciones de Somosierra y al pie del cerro Majada de la Peña, Madarcos es una localidad asentada en un altiplano bordeado por la hoz que forma el río Madarquillos. A una altitud de 1059 metros sobre el nivel del mar, nos encontramos con un territorio accidentado y de suaves pendientes.

Destaca de forma especial por su arquitectura tradicional, ya que su núcleo urbano no ha sufrido grandes cambios a lo largo de su historia, y mantiene elementos de su actividad tradicional fundamentalmente ganadera. Si se busca una escapada en un lugar tranquilo, pintoresco, un lugar para disfrutar de la naturaleza y de la historia, Madarcos es el destino ideal.

Qué ver en Madarcos

Según datos del INE, en 2023 Madarcos tenía una población de tan solo 72 habitantes y es considerado como el pueblo más pequeño de la Comunidad de Madrid. No por ello deja de tener una historia rica que se remota a la Edad Media. Un paseo por sus calles empedradas nos traslada atrás en el tiempo, pudiendo admirar casonas de piedra y tesoros históricos como la iglesia parroquial de Santa Ana, el Potro de Herrar, el Reloj de Sol y el conjunto arquitectónico del Ayuntamiento.

Madarcos, de origen medieval, se fundó como un pequeño asentamiento rural en la comarca de la Sierra de Ayllón. Durante esa época, las actividades principales fueron la agricultura y la ganadería. El pueblo estuvo bajo la jurisdicción de los señoríos de Buitrago y de Ayllón entre otros, lo cual influyó en su desarrollo a lo largo del tiempo. Un paseo por sus escasas diez calles es suficiente para disfrutar de un ambiente pintoresco y rural que nos aporta tranquilidad y transporta a tiempos remotos.

Su patrimonio arquitectónico incluye edificios con un gran interés cultural e histórico, destacando la iglesia de San Nicolás, datada en el siglo XIII, siendo uno de los lugares más emblemáticos de Madarcos. Aunque en las afueras de la localidad, también cabe mencionar la ermita de Nuestra Señora de la Soledad, de sencilla arquitectura, se ubica en un lugar perfecto para la contemplación del entorno.

Qué hacer en Madarcos

El valor del patrimonio natural de Madarcos hace de éste un lugar excepcional. A corta distancia encontramos el Parque Natural Hayedo de Tejera Negra, con picos tan importantes como el Cerro Quiñones situado a una altitud de 1324 metros o el Pico de la Dehesillas a 1316 metros sobre el nivel del mar. En junio de 2022, la UNESCO decidió ampliar los límites de la Reserva de la Biosfera del Rincón, incluyendo a Madarcos, otorgándole así el estatus de Patrimonio de la Humanidad.

Este Parque ofrece numerosas opciones de senderismo con diversas rutas que parten del mismo pueblo. A través de ellas observaremos paisajes naturales impresionantes. También existen rutas para disfrutar de la bicicleta de montaña con terreno variado y diversos niveles para todo tipo de ciclistas. Además, para los amantes de la pesca, el embalse de Puentes Viejas, cerca de Madarcos, es el lugar idóneo. Y si el objetivo es la observación de las aves, la zona es un refugio para numerosas especies que podremos observar sin grandes dificultades.

No podemos despedirnos de Madarcos sin hacer referencia a su gastronomía. La antigua y tradicional matanza del cerdo ha dado paso a otras actividades dignas de mencionar. Aunque la ganadería sigue siendo una de las principales actividades económicas de la localidad, una pequeña pero importante industria artesanal lleva años elaborando ahumados utilizando sal marina y humo de maderas nobles. Entre sus clientes encontramos a numerosos chefs que los incluyen en sus restaurantes. Podremos comprarlos y/o degustarlos en restaurantes cercanos. Además, uno de los atractivos del pueblo es su escuela de hostelería que ofrece una gran variedad de cursos. Además, dispone de parcela con huertos, invernadero, gallinero… con productos ecológicos y naturales que pasaran a las manos del alumnado.