Brunete, el pueblo madrileño que resurgió de los escombros

A sólo 28 kilómetros de la ciudad de Madrid, en la zona oeste de la Comunidad Autónoma, se halla Brunete, una encantadora localidad en la que habitan alrededor de 11.000 personas. Su nombre está asociado a una triste batalla acontecida durante la Guerra Civil Española, y en la que casi 40.000 personas, de ambos bandos, perdieron la vida, quedando el pueblo prácticamente destruido tanto por los bombardeos como por los enfrentamientos.

Pero ese triste episodio hace mucho que quedó a atrás, y esta villa madrileña hizo una gran esfuerzo para recuperarse. En la reconstrucción se prestó una mayor atención a su bonita Plaza Mayor y a la antigua iglesia parroquial.

Hoy en día Brunete es un buen destino de fin de semana, y no sólo por su proximidad a Madrid, también porque se encuentra en una hermosa zona, la de la Cuenca del Guadarrama, que invita a realizar rutas de senderismo, paseos a caballo o a hacer excursiones en bicicleta.

Qué ver en Brunete

Ponemos el foco de interés durante nuestra visita a Brunete en su Plaza Mayor, que ha sido declarada Bien de Interés Cultural. Se halla en el centro físico y neurálgico del casco histórico, y de ella parten las calles más importantes. La plaza es de estilo herreriano, es cuadrada y está abierta por dos grandes escalinatas, llevando una de ellas hasta los llamados Jardinillos.

El segundo lugar que es inevitable visitar es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, original del siglo XVI, pero que ha experimentado diversas restauraciones, contando en la actualidad con una torre también de estilo herreriano. En su interior, el altar mayor está dedicado al Cristo del Patrocinio, patrón del municipio.

El recorrido por Brunete también puede incluir la visita a la Ermita de San Sebastián, del siglo XVII, pero reconstruida en 1985, o a las históricas fuentes de la villa, como la Fuente de los Morales, la Fuente de Pablo o el Caño Nuevo. También se conservan en su término municipal, como recuerdo de algo que no debe volver a pasar, 14 fortines de la Guerra Civil, que han sido incluidos en el Catálogo de Bienes Protegidos.

Qué hacer en Brunete

Disfrutar de la gastronomía tradicional de Brunete es un recomendable plan. Aquí preparan uno de los mejores cocidos madrileños, elaborado con un producto local, el rico garbanzo madrileño, que también está presente en otra receta de la villa, el potaje con collejas. Y es que aquí gustan mucho los platos de cuchara, y también los asados de carne y los platos de caza. Todavía quedan algunos agricultores que siguen elaborando artesanalmente el vino de la tierra, que te recomendamos probar.

Hay que dedicar tiempo a conocer el precioso entorno natural de esta localidad madrileña, que linda con el Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama, y con la Zona de Especial Protección de Aves de los encinares del río Alberche y el río Cofio. Para recorrerlo a nuestras anchas, el pueblo cuenta con cuatro agradables sendas ecológicas.

Y si buscas animación, un buen momento para visitar Brunete es durante sus Fiestas Patronales en Honor del Santísimo Cristo del Patrocinio, que se celebran en torno al día 14 de septiembre. Incluyen un completo programa de conciertos, actos culturales, competiciones deportivas, juegos para los más pequeños, un animado mercadillo, una feria con muchas atracciones y tómbolas y por supuesto fuegos artificiales.