San Ciprián, un pueblo marinero en la provincia de Lugo

San Ciprián, o San Cibrao en gallego, es un pequeño puerto pesquero situado en el norte de la provincia de Lugo, próximo a Burela. Hay dos áreas diferenciadas en el pueblo para entender su distribución, el Porto de Arriba y el Porto de Abaixo. San Ciprián nació de la unión del primero, que en su origen era una isla, con el segundo, en la zona continental.

Probablemente ambas partes acabaran uniéndose por la acumulación de grandes cantidades de arena y otros restos, creando así una especie de pasillo entre ellas. Así pues, el barrio de marineros está en la parte del Porto de Arriba, un enclave maravilloso en el que contemplar un lugar único en Galicia.

Qué ver en San Ciprián

Uno de los mayores atractivos de San Ciprián es una curiosa sirenita: la Maruxaina. Dice la leyenda que la Maruxaina vive en un castillo bajo el agua, junto a Os Farallóns, y que a veces ayuda a los marineros a volver sanos y salvos a casa y otras, por el contrario, trata de confundirlos con sus cantos para que sus barcos naufraguen en el mar. Así pues, cada agosto, se celebra en San Cirpián la tradicional fiesta del ‘juicio a la Maruxaina’, en el que se procesiona por las calles del pueblo con su figura y se sentencia si es culpable o se indulta.

Otro de sus puntos de referencia es su tradicional puerto pesquero, pues ya en época medieval destacaba por construir carabelas y, años más tardes, por las fábricas de salazón. De hecho, todavía se conservan los restos del Castillo Marino de San Cibrao. Continuando con el mar enfrente, cabe destacar el faro de Punta Atalaia, cuya construcción actual es bastante nueva, de 1983. Sin embargo, el primero que tuvo la localidad fue construido en el siglo XIX. Muy cerca están los tres islotes conocidos como Os Farallóns: Sombriza, Baixa y Pe.

Y sin dejar el mar, un lugar al que acudir son los arenales, tranquilos y recogidos. Las más populares son la Praia de O Torno, la de Cubelas y A Caosa. Precisamente la Praia do O Torno tiene alrededor de 1000 metros cuadrados de dunas, de un gran valor natural, por lo que siempre se recomienda ayudar a preservarlas.

Qué visitar en San Ciprián

Ante el gran patrimonio que significaba el mar y todo lo relacionado con él para el pueblo de San Ciprián, la Diputación de Lugo fundó el ‘Museo do Mar de San Cibrao’, en el que se hace un auténtico homenaje a la Mariña Lucense a través de una exposición permanente en el que se muestra la vida marinera de estas costas a la largo de los años. También se le da una gran importancia a todos los oficios derivados de las actividades del mar y hay un pequeño rincón que habla de la caza de ballenas, que fue habitual en Galicia hasta principios del siglo XIX.

Si hay un pequeño lugar con encanto en San Ciprián, ese es su Capilla. Se trata de un pequeño templo cuyo origen parece estar en el siglo IX, pero del que solo se recoge en los archivos de la Catedral de Mondoñedo a partir del año 1128. En el siglo XVIII se reformó, aunque manteniendo su trazado original, y fue entonces cuando se colocó un retablo rococó con la imagen de San Cibrao.

Por último, no te puedes ir si haber visitado el Castro de la Atalaya, uno de los más importantes de Galicia por su extensión y por haberse encontrado en él una pieza única: un machete votivo de sacrificio castreño de entre los siglos I a.C. y II d.C. Su descubrimiento fue fortuito, debido a unas obras, que lamentablemente también destruyeron gran parte del mismo.