La comarca de Los Ancares, en León

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En la provincia de León, entre el límite de Asturias y la provincia gallega de Lugo, en Galicia, se encuentra, casi escondida, la preciosa comarca de Los Ancares. Se trata de un auténtico paraíso natural desconocido durante siglos, que ahora empieza a ser considerado como un destino estrella.

A ello han colaborado los títulos que posee, como ser Espacio Natural y estar considerado por la UNESCO Reserva de la Biosfera. Y no es para menos, porque su belleza es impresionante. Merece la pena dedicarle tiempo a esta zona leonesa, donde los bosques y valles se suceden, y a la que se accede por angostas y sinuosas carreteras.

Durante el trayecto podremos hacer parada y conocer los pueblos de Villafranca del Bierzo, Fabero, Páramo del Sil, Palacios del Sil, Vega de Espinareda, Villablino, Peranzones o Candín, a cuyos términos municipales pertenecen medio centenar de pequeñas poblaciones.

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Qué ver en Los Ancares

En nuestro recorrido por esta parte de León atravesaremos varios valles, los cuales reciben los nombres de los ríos que los surcan, como el Ancares, el Burbia, el Cúa o Fornela. Hay un valle que no está relacionado con ningún río, el de Balboa. A nuestro alrededor veremos montañas con alturas superiores a los 1.500 metros, en las que la acción del hielo, durante siglos, ha originado enormes valles glaciares, circos y lagunas.

Son más de 70.000 hectáreas de bosques de robles, encinas, arces, castaños, acebos, alisos, sauces, rebollos, serbales, abedules, mostajos, avellanos, brezos, enebros o arándanos. Es tan grande la variedad que en cualquier época del año disfrutaremos de hermosos paisajes, aunque de manera especial en primavera y otoño.

Por estas tierras campan a sus anchas urogallos, lobos, corzos, gamos, nutrias o liebres, además de aves como el águila real, el halcón peregrino, el alimoche, el pico mediano, el águila culebrera o la perdiz pardilla. Con un poco de suerte puede que veas algún ejemplar de oso, aunque quedan pocos.

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Tesoros de Los Ancares

A la espectacular oferta de naturaleza se unen otras propuestas etnográficas, monumentales, culturales y de ocio. Es el caso de un claro ejemplo de arquitectura tradicional de la zona: las pallozas. Son unas cabañas circulares con paredes bajas de piedra y un tejado vegetal en forma de cono rematado en pico, cuya cubierta se suele hacer con tallos de centeno.

En el municipio de Pereda merece la pena visitar su Museo Etnográfico, una buena forma de conocer todo lo relacionado con Los Ancares. Otros lugares de interés son el monasterio benedictino de San Andrés, del siglo X, que se halla en Vega de Espinareda;  los restos de unas explotaciones auríferas de la época romana, en Candín; el Castillo de Sarracín, en Vega de Valcarce, o el grandiosos Castillo de los Templarios del siglo XII, situado en la cercana localidad de Ponferrada.

También hay momentos para disfrutar del ocio, porque ésta es una zona ideal para practicar diversas actividades y deportes, como el senderismo, el ciclismo, los paseos a caballo o la pesca.

Fuente de la imagen: Diario de León

Comer en Los Ancares

Vas a quedar encantado con la magnífica cocina tradicional de esta zona leonesa, que incluye platos tan típicos como el caldo ancarés o los asados y calderetas de cordero. Por influencia y cercanía también descubrirás la cocina de El Bierzo, con recetas tan famosas como el botillo o la androlla. Acompaña estos platos con los reputados vinos con Denominación de Origen Bierzo.

Galicia tampoco queda lejos, y en los restaurantes locales suelen preparar empanadas, aunque las elaboran de una manera distinta a la gallega. La masa es de centeno, y se rellena con tocino y verdura. De la costa también llegan buenos y frescos pulpos.

Tómatelo con calma, porque las prisas no tiene lugar en Los Ancares. Hay que dedicar tiempo para vivir intensamente las tradiciones, la cultura, la gastronomía y la impresionante oferta de naturaleza de esta comarca leonesa. Descubrirás lugares y costumbres que no existen en ninguna otra parte de la Tierra.