Punta Mujeres, parada obligatoria en Lanzarote
A veces es necesario desconectar, para poder volver a conectar con todo. Punta Mujeres es uno de esos destinos que te brinda esa oportunidad. En su belleza, su calma y sus gentes encontrarás todo lo que necesitas si buscas un poco de relax.
En la maravillosa isla de Lanzarote, dentro del municipio de Haría, se encuentra Punta Mujeres. Su nombre tiene origen en dos leyendas, aunque ninguna podría ser cierta. Una hace referencia a unas rocas que antiguamente mostraron la silueta de mujer; la otra al abandono de un grupo de mujeres en esta zona por los piratas en el siglo XVII.
Comenzó siendo un pequeño pueblo de pescadores que vio incrementada su población al construirse en su costa unas salinas y, más adelante, debido al desarrollo del turismo, ha llegado a ser el núcleo más poblado del municipio de Haría. Su proximidad a los Jameos del Agua y a la Cueva de los Verdes, así como sus piscinas naturales, hacen de este lugar, un punto de referencia en la isla.
¡Qué bien se está en Punta Mujeres!
Una de las cosas buenas que tiene Lanzarote es que pese a ser un destino turístico no está excesivamente masificado y, en Punta Mujeres, se sigue aplicando esta máxima. La calidad de vida de este pequeño pueblo situado al noreste de la isla de Lanzarote es increíble y, además, en él se reúnen lo mejor de la tradición y arquitectura típicas de la isla canaria.
Las Islas Canarias ofrecen durante todo el año un ambiente agradable y templado, pero este lugar suele tener unos grados menos que el resto de la zona sur de la isla, con lo que lo convierte en especialmente deseable en los meses de verano. Los atardeceres extraordinarios que pueden observarse desde allí, así como la gran oferta gastronómica, centrada sobre todo en el mar, hacen el resto.
Si te gustan las arepas, ‘Casa Lucho’ es tu lugar; aunque otra buena opción que permite acercarte a los sabores más típicos y a buen precio es el teleclub del pueblo. Los quesos canarios y el vino lanzaroteño no pueden faltar sobre la mesa, un buen blanco seco o semiseco no defraudarán a ningún paladar.
Piscinas naturales en Punta Mujeres
Las piscinas naturales de Punta Mujeres son de parada obligatoria. Los vecinos decidieron amurallar las pequeñas calas de su costa con el fin de hacer el baño más fácil a todo aquel que quisiera darse un buen chapuzón cuando la bajamar no se lo permitiera.
Aunque no son el único lugar en el que darse un baño, no tienen nada que envidiar a ninguna playa y, además, por cada grupo de vecinos o barrio hay una. En los meses de verano, sobre todo, se convierten en un agradable punto de encuentro donde que disfrutar del sol, el océano, el ambiente y la conversación con los más allegados.
En torno al litoral hay también pequeños muelles y varaderos que son, sin duda, una de las estampas más fotogénicas de Punta Mujeres. Allí se resguardan las embarcaciones en una combinación digna de mención entre el color de las mismas, el azul profundo del océano y el gris de la lava.
Espíritu surfero, en Punta Mujeres
Para los más deportistas y aventureros, Punta Mujeres acoge grandes profesionales del surf y del bodyboard. Los mejores meses de año para realizar esta práctica deportiva son de octubre a abril; eso sí, no son olas para principiantes.
‘El Espino’ es el mejor establecimiento al que acudir para practicar surf. Si aún no eres muy diestro con la tabla, ellos mismos te recomendarán que observes desde tierra firme el espectáculo. Las aguas poco profundas dejan muy cerca del bañista un fondo bastante afilado debido a su origen volcánico.
En la costa de Punta Mujeres se producen olas con tubos de hasta 10 segundos en los mejores días con viento del oeste. Una experiencia inolvidable que realmente vale la pena vivir.
