El pueblo pirenaico de Siresa, en Huesca
A la entrada del Valle de Hecho, en Huesca, se halla Siresa, una localidad medieval que surgió en torno al impresionante monasterio románico de San Pedro.
Situado a 882 metros de altitud, sobre la falda del monte Santidoro, Siresa es un encantador pueblo de la provincia de Huesca que está rodeado por un envidiable entorno natural. Hasta el siglo XIX era un municipio con entidad propia, pero después pasó a formar parte del término municipal de Hecho.
Esta pirenaica villa se desarrolló en torno al impresionante conjunto monástico de San Pedro, cuyos restos se alzan de manera imponente sobre el Barranco de Espetal. Este monasterio llegó a ejercer como capilla real en el siglo XI, en la época en que Siresa estaba gobernada por la condesa Doña Sancha, hermana del rey Sancho Ramírez. Probablemente estemos ante el monasterio más antiguo de Aragón, el cual llegó a funcionar como hospital para peregrinos y como escuela para los reyes aragoneses, incluido Alfonso I El Batallador.
Qué ver en Siresa
Un relajado paseo por las estrechas calles empedradas de Siresa, y por sus pequeñas plazas, nos permitirá contemplar las tradicionales casas de la montaña pirenaica, que se reparten por los dos barrios en los que se divide el pueblo. Por un lado está el barrio alto, que creció en torno a la Plaza de la Virgen, y por otro la zona del arrabal, la que surgió junto al monasterio.
Del que fuera un magnífico conjunto monástico, y en el que según una leyenda estuvo guardado el Santo Grial, hoy sólo se conserva la Iglesia de San Pedro, de enormes proporciones. Posee una planta de cruz latina, un ábside semicircular y un original pórtico, y está considerada Monumento Nacional.
El otro edificio religioso del pueblo, la Ermita de la Virgen del Pueyo, fue edificado en el año 1816, tras la ocupación napoleónica.
Qué hacer en Siresa
En el Centro de Interpretación del Megalitismo Pirenaico, que se encuentra en el kilómetro ocho de la carretera a Oza, organizan visitas guiadas al que fuera el Monasterio de Siresa, además de a otros puntos de interés del valle, como la bonita villa de Hecho, a la calzada romana o a los monumentos megalíticos de la zona.
Y a sólo 15 kilómetros de Siresa se halla la Selva de Oza, un verdadero paraíso natural integrado por frondosos bosques. Son muchos los senderos que surcan este hermoso paraje, y que nos acercan a lugares tan impresionantes como la Boca del Infierno, Guarrinza o Aguas Tuertas.
Hay dos momentos muy especiales en la localidad de Siresa. Uno es el día 3 de febrero, cuando se celebran las Fiestas Mayores, que son en honor de San Blas, y el otro es el día 29 de julio, cuando tienen lugar las Fiestas Menores en honor de San Pedro.