Fraga, un destino por descubrir en Huesca
La ciudad de Fraga, en Huesca, es un gran destino cultural y para amantes del arte.
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Con una extensión de 435 kilómetros cuadrados, el término municipal de la ciudad oscense de Fraga es uno de los más grandes de España. Se encuentra ubicado al sureste de la provincia de Huesca, junto a las estribaciones del Valle del Cinca.
La villa aragonesa ofrece un rico patrimonio monumental, una cuidada gastronomía y numerosas propuestas culturales y de ocio. No tendremos problema en encontrar alojamiento, ya que existe una buena oferta de hoteles en Fraga.
El tiempo en Fraga
La ciudad fragatina disfruta de un clima de tipo mediterráneo-continental, siendo la temperatura media anual de alrededor de 15 grados centígrados. Las precipitaciones no son muy abundantes, recogiéndose una media de 384 mm, principalmente en los meses de primavera y, sobre todo, en la época otoñal.
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Qué ver en Fraga
Nuestra visita a la ciudad de Fraga nos permitirá descubrir su riqueza monumental. La villa conserva edificios que se remontan a la Edad Media, como la Iglesia Parroquial de San Pedro, que en sus orígenes fue una gran mezquita árabe. A lo largo del siglo XII se reconvirtió en un templo católico, siguiendo la línea del románico aragonés.
De la misma época es el Palacio Montcada, un palacio árabe transformado en la que fuera residencia de los Montcada, por entonces los señores de la villa. Posteriormente fue renombrado como Palacio del Gobernador, funcionando como palacio real y llegando a alojar a Felipe IV. También funcionó como consistorio y como cárcel, y en la actualidad alberga la biblioteca municipal y un museo.
Lo que llaman el Castillo de Fraga son en realidad las ruinas de la Iglesia de San Miguel, que fue construida sobre un antiguo castillo medieval que a su vez había sido edificado sobre un asentamiento musulmán.
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A las afueras de Fraga, en la salida a la autopista AP2, se encuentra la Torre de los Frailes. Se trata de una torre almenada de planta rectangular atribuida a los caballeros templarios del siglo XIII. En los alrededores, no hay que dejar de visitar la Villa Fortunatus, de origen romano, y la Ermita de San Salvador, en Torrente de Cinca, donde disfrutaremos de unas magníficas vistas del valle y del meandro del río Cinca.
Qué comer en Fraga
La actividad agrícola ha sido durante siglos el principal motor de la villa, sobre todo lo relacionado con el cultivo de frutales. Estos productos forman parte activa de su cocina tradicional, estando muy presentes en sus platos más típicos. Mención aparte merecen los dulces fragatinos, como el pan de higos o el Coc, que se elabora con membrillo. Este último dulce ha sido galardonado con la “C” de Calidad que otorga el Gobierno de Aragón.
Qué hacer en Fraga
Merece la pena hacer una detenida visita a Fraga para recorrer su casco histórico de origen medieval, que acoge importantes casas blasonadas, como el Palacio del Gobernador o la Casa de Junqueras. En los alrededores de la villa disfrutaremos con los bellos parajes de su entorno natural, como la Serreta Negra, que está considerada el último reducto de vegetación mediterránea de la depresión del Ebro. Otra bonita excursión es la que lleva a la Presa de Mequinenza, en el embalse del Ebro, un lugar ideal para realizar actividades como la pesca o la vela.
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Del calendario de eventos, destacar el Día de la Faldeta, considerada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Se celebra, cada año, el domingo más próximo al día 23 de abril. En esta fecha, son muchos los fragatinos que, vestidos con sus trajes tradicionales, recorren la antigua ciudad de Fraga, que hoy en día puede presumir de una variada oferta turística.
