Estación de Esquí de Cerler, en el Pirineo Aragonés
En el Valle de Benasque, en pleno corazón de los Pirineos, se encuentra la Estación de Esquí Aramon Cerler. Situada en la provincia de Huesca, es la más alta de Aragón. Es un auténtico paraíso para los amantes de los deportes de invierno.
La estación de Cerler se halla en la población del mismo nombre, que pertenece al municipio de Benasque. Está rodeada de un precioso escenario compuesto por grandes pinares y hasta sesenta picos que superan los 3.000 metros. La estrella es el Aneto, conocido como “el techo de los Pirineos”. Cerler posee uno de los mejores desniveles para esquiar de los Pirineos, situado entre los 1.500 metros de altura de cota mínima y los casi 2.700 del Pico Gallinero, la cota máxima.
Ficha técnica de Cerler
Los datos de Cerler hablan por sí solos. La estación cuenta con 68 pistas, que incluyen ocho verdes, 17 azules, 26 rojas, 15 negras y un itinerario. En total, 79 kilómetros esquiables y 38 kilómetros de innivación artificial, que se mantienen con 375 cañones. Las pistas de Cerler reciben nombres tan originales como La Canal Amplla, Muidors, Quebrantahuesos, La Canal de Gallinero, Pinar, Basibé o La Rabosa. También dispone de un Snowpark y un circuito de moto de nieve.
Respecto a los remontes, Cerler ofrece a sus visitantes seis cintas transportadoras, cuatro telesquíes, dos telesillas biplaza, cinco telesillas cuatriplaza y dos telesillas para seis plazas. La capacidad total de sus remontes mueve una cifra de 26.120 esquiadores por hora.
Oferta de servicios de Cerler
Para hacer la estancia más agradable y segura, Cerler ofrece una serie de servicios adicionales, como una enfermería, locales de alquiler de material, una escuela de esquí y una completa oferta de restauración. También resulta de lo más atractiva la oferta de hoteles en Cerler, variada y adaptada a todos los bolsillos.
Para los que acudan con niños, Cerler les propone el Jardín Nieve. Situado en el sector Ampriu, se trata de un parque dotado de las más modernas instalaciones destinadas a los reyes de la casa, que incluyen todo tipo de juegos y actividades en la nieve. Está orientado a los niños con edades comprendidas entre los tres y los seis años, ambas inclusive.
El Valle de Benasque
A las cinco de la tarde se cierran las pistas. Aunque Cerler dispone de una interesante y completa oferta Après Ski, siempre está la posibilidad de realizar excursiones por el precioso Valle de Benasque. Durante todo el año, el valle ofrece una variada oferta de actividades. En invierno se pueden practicar los paseos con raquetas, la escalada en hielo o sencillamente dejarse mimar en un spa. En verano, con el buen tiempo, las posibilidades se amplían, incluyendo el senderismo, el rafting, el descenso de cañones y barrancos, los paseos en bicicleta o las rutas a caballo, entre otras.
En el mismo municipio de Benasque también podremos disfrutar de una interesante oferta monumental, que incluye la Iglesia románica de Santa María, del siglo XIII, el palacio renacentista de los Condes de Ribagorza, el torreón de Casa Juste o la Casa Faure.
Finalmente, pero no menos importante, está la impresionante naturaleza del Valle de Benasque, con maravillosos parajes que invitan a perderse y desconectar. Entre otros, el Parque Natural de Posets-Maladeta, el fantástico fenómeno kárstico de Forau de Aigualluts, los Ibones de Batisielles, el Plan del Hospital o la Vía ferrata de Sacs.
Estamos en plena temporada de nieve, y Cerler, en el Pirineo Aragonés, es una de las mejores estaciones para disfrutarla hasta el último momento.