La ilustre villa medieval de Sigúenza, en Guadalajara

Belén Valdehita

Sigüenza es uno de los pueblos con más historia y renombre de la provincia de Guadalajara, en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha. Es la mayor población de la comarca de la Serranía, y está situada a una altura de 1.004 metros sobre el nivel del mar.



Sigüenza posee un excepcional patrimonio medieval, además de una completísima oferta de alojamientos y locales de restauración. La localidad está rodeada por los sistemas montañosos Central e Ibérico (Sierra Ministra), en la comarca natural del Alto Henares.

El clima de Sigüenza es de tipo mediterráneo, y se caracteriza por contar con unos meses de verano secos y calurosos y con unos inviernos fríos. La temperatura media en el mes más cálido, julio, suele superar los 22 grados centígrados, mientras que la media en invierno es de 2,5 grados en el mes más frío, enero.



Si te gusta el arte y la cultura, Sigüenza es, sin duda, tu destino ideal. La villa fue declarada Conjunto Histórico Artístico en el año 1965, y allí donde miremos encontraremos algún llamativo monumento o un peculiar rincón. El edificio más destacado es la catedral, del siglo XII, seguido del castillo-palacio fortaleza, que fue residencia de los obispos hasta mediados del siglo XIX y hoy en día acoge el Parador Nacional de Turismo. En interior de la catedral se encuentra el sepulcro de Martín Vázquez de Arce, más conocido como El Doncel de Sigüenza, que está considerado todo un símbolo del municipio.



Son muchas las iglesias repartidas por Sigüenza, aunque las más reseñables son las románicas de Santiago y la Iglesia de San Vicente. El lugar más emblemático de la villa es su Plaza Mayor, que mandó construir el Cardenal Mendoza. Otras visitas imprescindibles son las de la Casa Municipal, la Ermita del Humilladero, el Palacio de los Infantes, el Palacio Episcopal, el antiguo Ayuntamiento, la antigua Cárcel, la Posada del Sol (actual Taberna Gurugú) o los restos de varios recintos amurallados, en los que todavía se pueden ver sus puertas y torreones.

Recorriendo a pie Sigüenza seguiremos encontrando lugares entrañables, como la pequeña judería, la Plazuela de las Cruces, Las Travesañas, el Callejón de los Infantes, la Plazuela de las Cruces o el Barrio barroco de San Roque.




La gastronomía es otro de los puntos fuertes de Sigüenza. La oferta de cocina tradicional incluye platos tan típicos como el asado de cordero o cabrito, la sopa castellana, la trucha escabechada o con jamón, los productos de caza o los que se extraen de la matanza del cerdo, y las migas con chorizo, torreznos y huevo frito. De postre, nada mejor que las yemas del Doncel, los bizcochos borrachos y los que llevan miel. Tapear a la hora del aperitivo es toda una tradición en Sigüenza, que cuenta con un circuito de bares donde poder probar todas estas pequeñas delicias locales.



La oferta dehoteles en Sigüenza incluye el Hotel Parador de Sigüenza, de cuatro estrellas, que se encuentra en la Plaza del Castillo. Se puede reservar habitación en este hotel a través de la página web de Hoteles.net a un excelente precio. Además, registrándonos gratis en la web de Hoteles.net obtendremos descuentos directos de entre un 1 y un 7% en todas las reservas. También se acumulan puntos canjeables para descuentos adicionales en las próximas reservas.

Si queremos conocer una auténtica villa medieval, pero no queremos prescindir de una magnífica infraestructura turística, la elección más apropiada es Sigüenza. Su oferta monumental, de alojamiento y restauración es realmente excelente, y no faltan buenas propuestas para vivir la noche seguntina, que es como se conoce a sus visitantes.




La riqueza natural de Sigüenza no nos dejará indiferentes. En su término municipal se hallan parajes de gran belleza, como el Parque Natural del Barranco del Río Dulce, la Microrreserva de los Saladares de la cuenca del río Salado o el Lugar de Interés Comunitario del Valle y Salinas del Salado.

Sigüenza es una villa muy animada, pero lo es especialmente en fechas tan señaladas como las fiestas de su patrón, San Vicente Mártir, que se celebran el 22 de enero; las Fiestas Patronales de Verano, en honor de San Roque y la Virgen de la Mayor, que tienen lugar a mediados de agosto; durante las Jornadas Medievales, que podremos disfrutar el segundo fin de semana de julio, o en Navidades y Semana Santa.

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