Tres bellas ermitas que no te puedes perder en España
Históricas y emplazadas en entornos naturales privilegiados, así son estas tres ermitas que tienes que visitar, sí o sí, en España.
Nuestro país está salpicado de hermosas ermitas, unas más grandes que otras, pero la mayoría de ellas conlleva una larga historia. Y lo mejor de todo es que casi todas las ermitas suelen estar ubicadas a las afueras de los pueblos, en el campo, o directamente fueron construidas en medio de un impresionante paraje natural, alejadas de cualquier urbe.
Éste es el caso de estas tres ermitas españolas que merece la pena visitar, para disfrutar de su encanto, su misticismo, su espiritualidad y su maravilloso entorno natural: la Ermita de Las Fuentes, en San Juan del Olmo, Ávila; la Ermita de Santa Margarida, en La Garrotxa, Girona, y la Cueva-ermita de San Bernabé, en el Monumento Natural de Ojo Guareña, en Burgos.
Ermita de Las Fuentes, en San Juan del Olmo, Ávila
Si de ermitas distanciadas de un núcleo urbano se trata, la Ermita de Las Fuentes es un buen ejemplo de ello. Se encuentra muy cerca de la cima del Puerto de las Fuentes, en el macizo de las Fuentes de la sierra de Ávila, y pertenece al término municipal de San Juan del Olmo.
También es una estupenda muestra de las ermitas que están ubicadas en plena naturaleza, encontrándose junto a las fuentes que dan origen al afluente del Tormes. La ermita fue construida en el siglo XVII, y es de estilo barroco. Su situación no es fruto del azar, ya que cuentan que aquí se apareció la Virgen. En su fachada destaca su hermosa espadaña, que tiene dos alturas y está hecha en piedra, y en su interior no te pierdas el estuco y la imagen de la Virgen, de estilo románico.
Ermita de Santa Margarida, en La Garrotxa, Girona
¡El cráter de un volcán! Ese es el lugar donde se encuentra situada la Ermita de Santa Margarida, en la comarca de la Garrotxa, en Girona, y pertenece a la localidad de origen medieval de Santa Pau. Llegar hasta ella es toda una experiencia en plena naturaleza, siendo realmente especial el recorrido en otoño, cuando los bosques del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa se llenan de colores otoñales.
Originalmente de estilo románico, y probablemente del siglo XII, la ermita primigenia fue totalmente destruida durante los terremotos que se produjeron entre los años 1427 y 1428. Hoy en día ya no hay actividad sísmica, y el volcán lleva extinto desde hace unos 11.000 años. El terreno volcánico dio lugar a la abundante vegetación que actualmente envuelve a esta ermita que fue reconstruida en torno al siglo XV.
Cueva-ermita de San Bernabé, en Burgos
El espectacular Monumento Natural Ojo Guareña, en la burgalesa Merindad de Sotoscueva, es el impresionante escenario donde se encuentra la ermita troglodita de San Bernabé. Se trata de un gran complejo kárstico integrado por 18 cuevas principales, y rodeado por un privilegiado entorno natural.
El acceso a una de esas cuevas fue aprovechado para construir esta ermita que en su origen estaba dedicada a San Tirso, y posteriormente a San Bernabé. En su interior, la bóveda natural nos sorprende con un interesante conjunto pictórico en el que se narran los martirios y milagros de San Tirso, y que fue realizado en el siglo XVIII. Durante la visita también podremos ver la Pila del Santo y la Galería de los Silos, y contemplar una proyección de 10 minutos de duración.