El pueblo marinero de El Port de la Selva, en Girona
Además de conservar todo su encanto de villa marinera, El Port de la Selva nos reserva buenas playas, un buen patrimonio monumental y de naturaleza y una cuidada infraestructura turística.
En la Costa Brava todavía se pueden encontrar pueblos con sabor marinero. Es el caso de El Port de la Selva, que se encuentra en la costa norte del Cabo de Creus, en la gerundense comarca catalana del Alto Ampurdán, en Girona.
Esta antigua aldea de pescadores mantuvo la pesca como su principal actividad económica hasta el siglo XX, pero sus estupendas playas, sus bellos paisajes y otros muchos atractivos han hecho que gran parte de sus habitantes vivan actualmente del turismo.
Monumentos y gastronomía de El Port de la Selva
Dentro del patrimonio monumental que posee este pueblo gerundense destaca la Iglesia de Sant Pere de Rodes, originalmente de estilo catalán del siglo X. Con el paso de los siglos ha ido incorporando elementos de otros estilos arquitectónicos, como mozárabes o románicos. Cuenta con tres naves, crucero y tres ábsides, y está flanqueada por dos torres.
Otras visitas claves en la localidad son las de sus restos arqueológicos, como el dolmen de Taballera; la Iglesia de Sant Fruitós o el conjunto medieval de la Serra de Rodes, compuesto por el Monasterio de Sant Pere de Rodes, el Castillo de Sant Salvador (siglo XIII), la Ermita de Santa Elena y el poblado de Santa Creu.
Llegada la hora de comer, comprobaremos que en El Port de la Selva la cocina tradicional es de tipo mediterráneo. En sus recetas más típicas predominan los pescados y los mariscos, contando también con platos que combinan los productos del mar y los de interior, conocidos como de “mar y montaña”. No dejes de probar las cigalas de esta zona de la Costa Brava y los espárragos silvestres que crecen en el municipio, los cuales cuentan en el mes de marzo con su propia feria.
Qué hacer en El Port de la Selva
La mejor forma de empezar el día es visitando algunas de las estupendas playas de El Port de la Selva, como la Cala de Portaló, la Playa de Les Olisques, la Playa de les Violetes, Cala Francó, Cala Tamariua o la Playa de La Ribera. Otro buen plan mañanero consiste en recorrer su entorno natural, integrado en el Parque Natural del Cabo de Creus, o hacer senderismo por parajes como el de Sant Salvador o el Puig de Queralbs, situados en la Serra de Rodes.
El mar Mediterráneo es una constante fuente de actividades náuticas. En la bahía del municipio se puede practicar algunas de ellas, como el esquí acuático, la natación, el remo, la pesca o la vela, entre otras posibilidades.
Y no dejes de dar un paseo en barco por el Cabo de Creus. Para ello puedes alquilar un barco o contratar algunos de los cruceros establecidos en la zona. En el interior te proponemos practicar el ciclismo de montaña por algunas de las muchas pistas forestales que hay señalizadas, y si eres de los valientes puedes hacer parapente saliendo de la zona de Sant Salvador y aterrizando en la Playa de la Ribera.