El erótico Bosque de Can Ginebreda, en Girona

Viajamos hasta el pintoresco municipio de Porqueres, situado a sólo 6 kilómetros de Banyoles y a 30 kilómetros de la ciudad de Girona. Allí, en una extensión de 40.000 metros cuadrados de naturaleza, descubriremos el Bosque de Can Ginebreda. Con más de 100 peculiares esculturas, este espacio acoge a sus visitantes en un entorno donde el arte y la cultura despliegan su magia, invitando a la comprensión y a la provocación.

Realizadas por el artista Xicu Cabanyes, en este bosque veremos una serie de esculturas eróticas que incitan a la reflexión, creando un ambiente único entre robles, encinas y pinos. Algunas de estas esculturas, elaboradas con diversos materiales, han sido modeladas a partir de moldes de glúteos reales, ofreciendo una experiencia sensorial única.

El Bosque de Can Ginebreda no es sólo un museo al aire libre, también es un lugar donde puedes disfrutar de barbacoas y picnics en espacios habilitados.

Xicu Cabanyes, forjador de esculturas y emociones

Nacido en una familia campesina, Xicu Cabanyes es el creador y escultor detrás de Can Ginebreda. Ha participado en más de 2.000 proyectos, y continúa creando las esculturas en este fascinante lugar. En palabras del propio Cabanyes en una entrevista para RTVE, "El arte, si no provoca, ¿de qué sirve?". Se presenta como un defensor apasionado de utilizar el arte como medio para crear conciencia, destacando la importancia del erotismo en su obra.

En una entrevista con el Ayuntamiento de Girona, Xicu comparte recuerdos de su infancia en una época marcada por el miedo y la inhibición de temas como el desnudo y el erotismo. Su obra, centrada en la figura femenina, el desnudo y los genitales, también aborda temáticas diversas, desde el colectivo LGTBI+ hasta la iglesia.

Para Cabanyes, la escultura es un lenguaje que permite abordar políticas, erotismo, adversidades trascendentales y más. "Con la escultura puedes hablar de todo", asegura el artista.

Paseando por el Bosque de Can Ginebreda

Comenzamos nuestra travesía aparcando el coche en un amplio descampado. A sólo unos pasos, nos recibe la entrada al Bosque de Can Ginebreda, un espacio que va más allá de ser simplemente un parque. Un camino llano de tierra y gravilla nos conduce a través de este museo al aire libre, donde diversas obras capturan nuestra atención. Las esculturas, elaboradas con materiales como hormigón, hierro, elementos vegetales, alambres o madera, ofrecen una experiencia visual única.

Con más de 40 años de existencia, el bosque alberga obras que datan desde la década de 1980 hasta la actualidad. Destacan piezas como "El Pluviòmetre", que evoca las partes más íntimas de la mujer y recibe agua "fecundante" de la lluvia, o "Les Taules Fornicant", dos mesas en pleno acto inspiradas en conversaciones y momentos importantes.

Al adentrarnos en el bosque, es probable que nos encontremos con Xicu o su taller, reconocible por el "Mural de Culs", una escultura que retrata glúteos de voluntarios.

Un museo al aire libre adaptado a los nuevos tiempos

El Bosque d'en Xicu se ha adaptado a las necesidades contemporáneas. Cuenta con presencia en Instagram, donde se comparten las últimas novedades. Además, los códigos QR que aparecen en las obras más representativas permiten acceder a videos donde el escultor explica cada pieza y su proceso de creación. Actualmente, 20 esculturas ofrecen esta experiencia, junto con un video de bienvenida que brinda una visión más profunda del bosque y de la comarca del Pla de l’Estany.

El recorrido es libre, permitiendo a todos explorarlo a su propio ritmo. Con exposiciones al aire libre y eventos esporádicos, el Bosque de Can Ginebreda va más allá del erotismo, explorando temas que abarcan desde la vida y la muerte hasta la violencia, la justicia, la política y la dialéctica entre el bien y el mal.