El Paisaje Protegido de Malpaís Grande, en Fuerteventura
Los aficionados a los paisajes volcánicos cuentan en la isla de Fuerteventura con algunos de los parajes más fascinantes de las Islas Canarias, como el Paisaje Protegido de Malpaís Grande.
El verde no es el color predominante esta parte de Fuerteventura, para nada, pero aún así hay algo en el Paisaje Protegido de Malpaís Grande que te atrapa. Se trata de un campo de lavas rodeado por llanuras también de origen volcánico, y se ha ido formando a lo largo de miles de años.
Este bello paisaje se extiende entre los municipios de Antigua y Tuineje, y en algunas zonas se ha visto alterado por la mano del hombre, debido a alguna carretera e incluso a una cantera. Al sur limita con otro impresionante paraje natural de origen volcánico, el Monumento Natural de Los Cuchillos de Vigán.
Además de estar considerado paisaje protegido, Malpaís Grande ha sido declarado zona de especial protección para las aves (ZEPA), y es el lugar perfecto para contemplar el guirre, un ave autóctona de la isla.
Qué ver en Malpaís Grande
En el Paisaje Protegido de Malpaís Grande se pueden distinguir hasta tres tipos de edificios eruptivos: los conos volcánicos, los coneletes escoriáceos y los hornitos, aunque son los primeros los que resultan más abundantes. También se pueden ver los tres edificios volcánicos que expulsaron la lava, y cuyos nombre son la Caldera de la Laguna, la Caldera de Liria y la Caldera de los Arrabales, que es la que se mantiene más virgen.
Apenas hay vegetación en la zona, pero no está exenta, pudiéndose ver algunos matorrales e incluso flores, como la Coronilla viminales o la Asphaltium bituminosum. En cuanto a la fauna, en este paraje habitan la aguililla ratonera, el ya mencionado guirre o el alimoche, además de otras aves de pequeño tamaño.
En el mismo paraje se puede visitar el poblado aborigen de La Atalayita, cuyo origen se remonta a la época anterior de la conquista por parte de los españoles. También es recomendable visitar el centro de interpretación de este poblado, donde nos informarán sobre las labores de excavación realizados en la zona y de los hallazgos arqueológicos.
El pueblo de Antigua
Y tras recorrer el Paraje Protegido de Malpaís Grande, es obligado acercarse a la villa de Antigua, que lo tiene todo: un bonito casco antiguo, un peculiar entorno natural y una impresionante zona costera.
En su término municipal, de poco más de 250 kilómetros cuadrados, podremos ver molinos de viento, un buen patrimonio monumental y cultural, grandes playas y parajes naturales tan espectaculares como el Monumento Natural de La Caldera de Gairía, el Parque Rural de Betancuria, el Monumento Natural de los Cuchillos de Vigán o el Paisaje Protegido de Malpaís Grande.
La lista de lugares imprescindibles en Antigua incluye el Castillo de Fuste, la Iglesia de Nuestra Señora de Antigua, los Hornos de Cal de la Guirra, el Centro Turístico Cultural Molino de Antigua, el Molino de La Corte, el Molino de Durazno, el Molino de Antigua, las Salinas de El Carmen y las playas Leandro, Caleta Blanca, Caleta de la Ballena, la Playa de La Majada de Las Cabras o la Playa del Castillo, también llamada de Caleta de Fuste, entre otros arenales.
