Uclés, un pequeño pueblo con un gran monasterio

Ubicado en las estribaciones de la Sierra de Altomira, y rodeado por un paisaje de campos de cultivo y suaves elevaciones del terreno, el municipio de Uclés es un destino a tener en cuenta en La Mancha Alta Conquense. Su origen se pierde en la noche de los tiempos, ya que por aquí pasaron los romanos, los visigodos o los árabes, y dejaron huella.

Desde el mirador natural que constituye el Cerro del Portillo podremos contemplar las joyas monumentales que el paso del tiempo ha legado a esta localidad de la provincia, y entre las que destaca el impresionante Monasterio de Uclés. Su bucólico paisaje, su buena oferta gastronómica o el hospitalario carácter de sus habitantes son valores añadidos que hacen de Uclés un gran destino de turismo rural en Cuenca.

Qué ver en Uclés

Predominando sobre toda esta población conquense encontramos el imponente Monasterio de Uclés, conocido como “El Escorial de La Mancha” y declarado Bien de Interés Cultural. Se trata de un histórico edificio del siglo XVI que en la actualidad cuenta con una vida de lo más intensa y animada. Y es que en su interior se celebran habitualmente una gran variedad de propuestas culturales y de ocio, como conciertos, exposiciones, conferencias o actividades educativas. Su visita es de de lo más recomendable.

El recorrido monumental por este pueblo también incluye los restos de una muralla del siglo XII que fue ampliada en el siglo XVI, y que sólo conserva la Puerta del Agua o Arco de la Fuente; diversas casas solariegas, como la casa de Pareja y Cedillo o la Casa-Palacio de los Torres, la Fuente de los Cinco Caños y algunas torres medievales, como las del Pontido o la del Palomar.

Junto al monasterio se hallan los restos de la que fue una antigua fortaleza musulmana del siglo IX. Pero del conocido como el Castillo de Albar Llana sólo se conservan la Torre del Homenaje, la Torre de la Plata y la Torre Albarrana.

Qué hacer en Uclés

Tras la obligada visita al pueblo, y especialmente al Monasterio de Uclés, llega el momento de conocer los alrededores, que nos reservan tanto parajes naturales como lugares de interés histórico. No hay que perderse el Sepulcro, la Fuente de los Cuernos, el Paseo de las Huertas o la Fuente Redonda.

Llegada la hora de comer, en Uclés podremos dar buena cuenta de la cocina tradicional manchega y de los productos típicos de La Alcarria. La lista de delicias locales incluye el pisto manchego, las gachas, las migas, el morteruelo, el ajoarriero, el queso frito, el cordero asado y en caldereta o las judías con perdiz. Y para acompañar, nada mejor que el vino de Uclés, que cuenta con Denominación de Origen.

El calendario festivo incluye festividades a lo largo de todo el año. Entre las más señaladas se hallan la Fiesta de San Sebastián, el 20 de enero; las populares Fiestas del Santísimo Cristo de la Humildad, que comienzan el primer domingo de mayo, y las Fiestas Patronales de Nuestra Señora la Virgen de las Angustias, el penúltimo sábado de agosto. Y justo el fin de semana anterior se celebra el Mercado Medieval de Uclés.