Escapada a Saelices, en Cuenca
Aunque eclipsada en cierta medida por los restos de una antigua villa romana, la localidad de Saelices cuenta con sus propios atractivos, lo que hace su visita recomendable.
Ubicado a poco más de tres kilómetros del destacado Parque Arqueológico de Segóbriga, y a unos 75 kilómetros de la preciosa ciudad de Cuenca, el municipio de Saelices se encuentra un tanto eclipsado por la popularidad de estas importantes ruinas romanas. La población se halla sobre una colina en la que destaca una imponente iglesia, siendo el preludio de un pueblo que merece la pena descubrir.
Ubicado junto al río Cigüela, el origen de este municipio conquense se calcula en la Edad Media, en torno a la época de la repoblación que se llevó a cabo tras a la Reconquista por parte de la Orden de Santiago en las tierras del Priorato de Uclés, al que perteneció durante la Edad Media.
Qué ver en Saelices
Es inevitable comenzar la visita a Saelices acercándonos a la Iglesia de San Pedro, un templo de grandes dimensiones que comenzó a construirse en el año 1577. Está dotado de un ábside poligonal de tres lados y una torre de tres cuerpos. En el interior llama la atención el restaurado Retablo Mayor, de estilo barroco, que posee dos cuerpos.
Recorriendo las calles de esta población de la comarca de la Macha nos encontraremos varias ilustres construcciones civiles, entre las que destaca la Casa-Palacio de Martínez Falero, que es de planta rectangular de dos alturas con patio interior. Para visitar su interior hay que preguntar en el Ayuntamiento de Saelices.
Y si salimos del pueblo por la zona sur, por el llamado camino de Villa Paz, llegaremos hasta los restos del Castillejo de Luján, que fue construido durante la segunda mitad del siglo XVI con fines principalmente residenciales.
Qué hacer en Saelices
No se puede visitar Saelices sin acercarse a conocer el Parque Arqueológico de Segóbriga. Se trata de los restos de una ciudad romana cuyo nombre significa "ciudad de la victoria". La zona donde se halla ya estaba habitada en la Edad del Bronce, y se cree que en la zona hubo también un importante castro celtíbero, debido a los vestigios hallados en el parque y en sus alrededores.
Los vestigios que quedan en Segóbriga nos dan una idea del gran esplendor que tuvo esta próspera ciudad, de la que todavía se pueden ver su teatro, el anfiteatro, un acueducto, varios edificios administrativos, una necrópolis, una muralla o las termas.
Hay dos buenos momentos para visitar Saelices: durante las animadas y populares Fiestas en honor de la Virgen de los Remedios, que se celebran durante el último fin de semana de mayo, o durante la Fiesta del Cristo del Amparo, que tiene lugar el 14 y 15 de septiembre, y en la que predominan los actos religiosos.