El Parque Natural de la Tinença de Benifassà, en la provincia de Castellón
Este parque natural de la Comunitat Valenciana hará que disfrutes de una experiencia plena entre el patrimonio natural y el cultural que alberga.
En el extremo norte de la provincia de Castellón, y limitando con las comarcas catalanas de Puertos de Tortosa y la aragonesa de Matarraña, nos encontramos con el Parque Natural de la Tinença de Benifassà. De forma muy irregular, este parque representa una de las mejores muestras de las montañas del Sistema Ibérico de la Comunidad Valenciana.
Comprende las poblaciones de la Pobla de Benifassà, Fredes, Coratxà, El Ballestar, Bel, Castell de Cabres, Vallibona y parte del Rossell. Esta área destaca por su relieve abrupto, fruto de la confluencia de sistemas montañosos con diferente orientación, y su escasa población. Estamos ante un territorio de paisajes espectaculares y de una gran biodiversidad. Fue declarado Parque Natural en 2006 sobre una superficie de 5000 hectáreas y forma parte del Plan de Ordenación de Recursos Naturales, que amplía su actuación sobre 26000 hectáreas.
Patrimonio cultural del Parque Natural de la Tinença de Benifassà
Parece que los restos más antiguos de la zona se corresponden con el tercer milenio a.C., aunque se estima que no es hasta el segundo milenio a.C. cuando se produce una primera colonización de esta zona. Destaca el conjunto de pinturas rupestres típicas del arte levantino de la cueva dels Rossegadors, en el término de la Pobla de Benifassà. En su interior se encuentran toda una serie de representaciones de figuras que simbolizan escenas de caza, danza y brujería. El arte rupestre levantino de la Comunidad Valenciana fue declarado Patrimonio de la Humanidad el 1998. También se conservan los yacimientos del antiguo poblado íbero de la Morranda, a unos 2 kilómetros de El Ballestar, y numerosos restos cerámicos que pueden adscribirse a esta época, que se exponen en dependencias municipales de la localidad.
Su época musulmana se sitúa entre los años 714 y 1208. Parece que los musulmanes dominaron la zona con fines militares, ubicando sus poblados en los altos de las montañas y dependiendo del dominio de Morella, defendiendo el castillo de Benifassà, datado entre los siglos X y XII. Originariamente, este castillo se denominaba de Beni-hazà o Beni-Hasan.
Durante la época cristiana se produjo un mayor auge económico, social y cultural en estas comarcas, que fueron conquistadas por la corona catalano-aragonesa, es en el año 12332-1233 y pasó a formar parte del monasterio de Poblet. Dependiente de éste se creó el convento de Santa María de Benifassar, cuyas obras se acabaron en 1250. Se trata del monumento más representativo de la Tinença, situado a los pies de “Santa Escolàstica”, montaña en la que se encontraba el antiguo castillo musulmán. En su arquitectura se pueden encontrar diferentes estilos, como el románico de la puerta de entrada o el gótico del ábside. La Diputación de Castellón lo declaró Monumento Nacional el año 1931.
Entorno natural del parque
El relieve accidentado del Parque Natural de la Tinença de Benifassà, la baja productividad agrícola y ganadera de la zona, así como la escasa población, ha generado el desarrollo de comunidades vegetales muy interesantes. De esta forma, hay grandes masas de carrascales que conviven con masas de quejigar y con considerables extensiones de boj. Los espectaculares collados y barrancos conforman un macizo con una flora que reúne especies propias de climas húmedos como el tejo, el haya, el acebo y el pino negral. El gran valor botánico de este Parque Natural se completa con plantas únicas y endémicas que han motivado la declaración de diversas microrreservas de flora. Además, la zona es rica en setas, destacando el robellón, la seta de cardo y la negrilla.
En cuanto a la fauna, hay que destacar que el Parque Natural de la Tinença, se considera la mejor reserva de cabra hispánica o montés, ya que existe aquí una de las mejores poblaciones de esta especie de España. La cabra hispánica se ha convertido en uno de los símbolos del parque, ya que en cualquier momento se hace fácil su observación. Otras especies que destacan en la zona son el gato montés, jabalíes y muflones. De entre las aves, destacan el águila real y culebrera, el halcón peregrino, el buitre leonado, el martín pescador y el mirlo de agua.
El centro de Interpretación del Parque Natural está situado en la población de El Ballestar. Allí se puede obtener información de los valores naturales y culturales del parque, así como de las distintas actividades a realizar en este espacio protegido. Son numerosas las rutas y senderos que hoy, como la Ruta azul: una vuelta por el embalse, Ruta amarilla: los bosques del Mas de Boix, Ruta verde: cumbres de las minas de hierro, Ruta morada: los Maquis en la Tinença, etc. Además, si añadimos sus espectaculares miradores, concluiremos que el Parque Natural de la Tinença bien merece una visita.