Xert, la montaña del Maestrazgo
Descubre uno de los lugares más espectaculares de la provincia de Castellón, una localidad entre montañas que guarda numerosas sorpresas a sus visitantes.
En uno de los enclaves más destacados del Maestrazgo, en la provincia de Castellón, se encuentra la población de Xert. Se ubica a unos 30 kilómetros de Morella y está rodeado de bellos picos y muelas, como Les Moles o el Turmell. Dentro de su término está el remoto núcleo poblacional de Anroig, con apenas habitantes y cuenta, también, con diversas construcciones como fuentes, molinos, masías, etc.
Los visitantes de Xert son testigos de la riqueza de las tradiciones allí arraigadas, a través de los oficios artesanales relacionados con la agricultura o la madera, así como de sus fiestas patronales. Pero hay más, los escaladores encontrarán su lugar en las vías ferratas de La Moleta; y los espeleólogos podrán adentrarse en cuevas como las del Avenc de Comanegra. Y no olvidemos su gastronomía típica, que tiene como protagonistas la carne “al tombet”, la cuajada o los rollitos de aguardiente.
Monumentos de Xert
Una de las primeras paradas en el casco histórico de Xert será probablemente en la Plaza Vieja, en la que destaca el portal con un arco de medio punto del año 1609 y que da paso al “Portal Fosc” y soportales. El “Portal Fosc” es un pasillo que hay entre la plaza y la calle Fredes, y todavía conserva vestigios de las antiguas fortificaciones de las murallas de la población. Como curiosidad, en una de las columnas de la viga maestra del Ayuntamiento se puede ver una inscripción de 1691 y, además, este enclave fue la plaza mayor de la villa.
La siguiente parada es el edificio civil más importante de la población, el Palacio de los condes de Pestagua. Los primeros habitantes de esta morada fueron la familia noble de los Feliu, que recibieron el título de condes de Pestagua, y les perteneció hasta principios del siglo XX, cuando lo vendieron. Su estilo es gótico en transición al renacentista y todavía conserva algunos detalles arquitectónicos.
La población de Xert tiene dos iglesias, una es conocida como la iglesia vieja de la Asunción, de época renacentista, aunque con algunos trazos góticos. Se encuentra en el centro histórico y actualmente todavía se celebran algunos oficios religiosos y culturales, como exposiciones y conciertos. Fue declarada Bien de Relevancia Local con la categoría de Monumento de Interés Local. En la parte baja de la población está la iglesia nueva, encomendada también a Nuestra Señora de la Asunción. Tiene dos alturas, una de baldosas recubiertas con un aplacado de piedra, y una segunda con una torre de hierro.
Qué visitar en Xert
Xert cuenta con un conjunto típico de lavadero del siglo XIX-XX, con tres pilas y techo de teja árabe que se sigue usando en la actualidad. También vale la pena acercarse a “El Molinar”, un antiguo paraje en el que se encontraban los molinos de cereales que aprovechaban el agua que brotaba del manantial y bajaba por el barranco. En esa zona, destacan las construcciones del Puente de la Senieta, el cortijo que está junto a él y las ruinas de una antigua presa de agua. Cerca de esta zona, hay un área en la que poder descansar tranquilamente y reponer fuerzas.
En cuanto al entorno natural, podemos visitar la sierra del Turmell, cuyas montañas y colinas suelen tener poca actividad de paseantes, por lo que es un lugar tranquilo. Allí nace el río Cérvol y, además, los picos muchas veces yacen cubiertos de nieve en invierno. Otro lugar clave es la Mola Murada, un yacimiento arqueológico declarado Bien de Interés Cultural.
También en los aledaños de Xert, concretamente a unos 5 o 6 kilómetros, está la Ermita de San Marcos. Actualmente se conserva el conjunto de iglesia, la vivienda del ermitaño, la torre de vigilancia y el porche que formaba parte de la hospedería, pues antiguamente había también una abadía que acabó utilizándose como escuela hasta mediados del siglo XX. Por fuera es un edificio sencillo con una mampostería basta y refuerzos de sillares en las esquinas. La puerta de entrada se presenta con un arco de medio punto y una ventana rectangular en el frontón que acaba en cornisa curviforme y una pequeña cruz de forja. Sin duda, Xert se suma a la lista de los pueblos más bonitos del Maestrazgo, junto con Catí o Herbeset, entre otros.
