Los molinos de viento de Alcublas, únicos en Valencia
La localidad valenciana de Alcublas cuenta con dos de los mejores ejemplares de molinos de viento de toda la provincia, un singular patrimonio a descubrir.
Los molinos de Alcublas se han convertido en todo un atractivo turístico de la provincia de Valencia. Están situados en el Cerro de los Molinos, a algo más de 900 metros de altitud, a las afueras de la población, lo que lo convierte en un lugar ideal para contemplar desde lo alto el paisaje que rodea a esta zona del interior de Valencia.
Se trata de dos de los mejores ejemplos de este tipo de construcción, únicos en la provincia de Valencia, que fueron restaurados en 2019 y que actualmente tienen un estado óptimo de conservación.
Alcublas y los molinos de viento
Alcublas se encuentra a unos 50 kilómetros al noroeste de la ciudad de Valencia, en la comarca de los Serranos, entre las Sierras Calderona y de Andilla, y limita con algunas conocidas poblaciones como Jérica, Altura o Llíria. Su terreno está formado por un relieve de contrastes, en el que coinciden llanuras y fosas, colinas y montañas. Debido a su situación geográfica, lejos de cursos fluviales próximos, los molinos que se construyeron fueron de viento y no de agua, como ha sido más habitual en el territorio valenciano.
En el Cerro de los Molinos se encuentran, además de los dos molinos restaurados, un área recreativa con mesas y bancos en los que poder disfrutar de un agradable rato de calma, así como un par de pinos que dan sombra en los meses más calurosos. Aunque los molinos datan del siglo XVIII, hay archivos históricos que acreditan que podrían haber sido construidos en el siglo XIII, tras la conquista del rey Jaume I.
Los molinos de Alcublas son una edificación alta, cilíndrica, están realizados en mampostería y tienen una techumbre giratoria. Se dividen en tres plantas y es en la última en la que, antiguamente, estaba el eje del molino, también conocido como ‘rueda catalina’. Desde ahí se transmitía la fuerza a las piedras que molían el grano, que bajaba desde la tolva a través de la canaleta. Para sustentar toda la maquinaria que había en la planta superior, el molino contaba con dos grandes traviesas de madera, que eran llamadas ‘marrano’.
Qué más ver en Alcublas
El patrimonio cultural de Alcublas engloba una parte arquitectónica, en la que destaca su Ayuntamiento del siglo XVII, un antiguo matadero rehabilitado que en la actualidad tiene una curiosa muestra etnológica, o la iglesia de San Antonio Abad, de los siglos XIII y XVII. Destaca también el Acueducto de la Mena, del siglo XVII, que se construyó con piedras y mármol de La Pedrera, y tiene una longitud de un kilómetro.
En Alcublas ofrecen diferentes tipos de visitas turísticas para revitalizar y poner en valor su patrimonio cultural. Entre ellas, existe una que recorre los molinos de viento y los refugios del aeródromo, y otra en la que poder visitar la cueva Sabuquera, la balsa Silvestre, el ventisquero del barranco de Lucía y un horno de cal. Además, para los más deportistas, pueden hacer por su cuenta alguna otra ruta de senderismo, como la del Paraje de La Solana, u otra que comunica los pueblos más próximos a Alcublas.
Un poco más alejado del pueblo, pero también perteneciente a su término municipal, están unas trincheras que se construyeron durante la Guerra Civil por el Ejército Republicano, en concreto en el año 1938. En esta zona, conocida como Línea de la Sabuquera o Línea Intermedia, se encuentran puestos de tiro, trincheras, e incluso una cueva-refugio que se puede cruzar.
