Santuario de la Virgen de los Ángeles, en Sant Mateu
En pleno Maestrazgo, Sant Mateu esconde uno de los tesoros patrimoniales de Castellón, el santuario de la Virgen de los Ángeles, un conjunto arquitectónico digno de visitar.
Sant Mateu es una pequeña localidad en la provincia de Castellón, a menos de 30 kilómetros de Albocàsser, con mucho encanto. Uno de sus principales atractivos es el santuario de la Virgen de los Ángeles, un interesante conjunto arquitectónico de los siglos XVI al XVIII formado por una iglesia, una hospedería, un mirador, un pozo y otras construcciones colindantes.
La Virgen de los Ángeles empezó a ser venerada en Sant Mateu en el año 1584, cuando un ermitaño encontró en el altar de la ermita de San Antonio Abad y San Pablo Ermitaño, que existió desde el siglo XV. En esta misma ubicación se decidió alzar el templo en honor a la Virgen de los Ángeles, absorbiendo la anterior iglesia. Los trabajos de construcción empezaron en 1590 y terminaron en el año 1622.
Iglesia de la Virgen de los Ángeles
Esta iglesia tiene una mezcla de estilos, pues su arquitectura es renacentista, pero el decorado es barroco, concretamente del siglo XVII. La nave está cubierta por una bóveda y tiene capillas laterales. Otros elementos de la construcción son el crucero, la cúpula, el coro, la sacristía y el camarín. En este último, se venera la imagen de la Virgen de los Ángeles. Su portada está formada por un arco de medio punto, rodeado por dos pilastras con motivos geométricos, y espirales con relieves que representan figuras de ángeles.
Como muchas iglesias, su construcción duró años, en concreto 32, durante los cuales se iban completando las fases poco a poco. El ábside se estuvo trabajando del 1590 al 1600; por su parte, del año 1602 al 1622 se construyó el resto del conjunto de la mano de Lázaro de Reinaga y Bernardo Cumba. Se reformó el crucero y el muro almenado en 1685 y se decoró el interior entre 1690 y 1693. Por último, se alzó el campanario; una tarea en la que se emplearon 5 años, de 1725 a 1730.
Lamentablemente, a principios del siglo XX un incendio arrasó con el interior de la iglesia. No fue hasta años más tarde que se entronizó una nueva imagen, hecha con mármol blanco de Carrara en Italia, y bendecida por el Papa. En la Guerra Civil de 1936, esta nueva imagen fue echada en una hoguera, pero, cuando ya casi estaba el fuego apagado, se pudieron rescatar los tres trozos en los que se había roto. Fue rehabilitada y, hoy en día, todavía se pueden apreciar estos lugares por los que se partió.
Conjunto arquitectónico de la Virgen de los Ángeles
Este bello conjunto arquitectónico destaca por estar muy bien cuidado, pero también por la historia que cuenta y el gran patrimonio cultural que supone. Lo componen la iglesia, hospedería, mirador, pozo y otras construcciones, como se ha nombrado anteriormente. La zona está rodeada de pinos y otras especies de vegetación, aunque un árbol monumental destaca sobre el resto, el conocido como Lledoner de la Mare de Déu.
Otro lugar clave en este conjunto, declarado Bien de Relevancia Local, es el mirador natural, que ofrece unas espectaculares vistas de todo el paisaje que rodea a Sant Mateu, en la comarca del Maestrazgo así como del propio término municipal.
El conjunto de la Virgen de los Ángeles se llena de vida cada segundo sábado después del Domingo de Pascua, cuando el pueblo entero celebra a su patrona, conmemorando el hallazgo de su imagen. Se hace una romería desde la Plaza Mayor hasta el santuario y, al acabar, se disfruta del reparto de las típicas calderas y del Ball Pla en la hospedería.
