Guía de Noja, en Cantabria
La localidad cántabra de Noja se ha convertido en uno de los mejores enclaves costeros del Norte para vivir intensamente los meses de verano, pero también para disfrutar de su excelente oferta turística el resto del año.
Situada en la comarca de Trasmiera, Noja es una de las poblaciones turísticas más importantes de la Comunidad de Cantabria. Y lo es por contar con dos buenas playas, con un espectacular entorno natural y con una gran oferta de ocio, alojamiento y restauración.
Su excelente situación junto a la costa hacen de esta villa cántabra un destino vacacional ideal para los amantes del mar. Pero no se trata sólo de un destino veraniego, ya que bien entrado el otoño todavía se pueden practicar actividades como el piragüismo o el surf. Las temperaturas medias son ideales para poder, durante todo el año, pasear por la costa, practicar el senderismo por el Monte Mijedo o contemplar los gigantescos árboles que crecen por toda la villa, como tilos y encinas centenarias, entre otras muchas y variadas propuestas que te ofrecemos en nuestra Guía de Noja.
Playas de Noja
- Playa de Ris: no tendremos problema alguno para localizar esta bonita playa que ostenta la Bandera Azul, y que está ubicada entre la Playa de Trengandín y la localidad cántabra de Isla. La forma más cómoda para acceder a ella es por la carretera CA-151, estando perfectamente señalizada. Una vez allí veremos que tiene aparcamiento vigilado con capacidad para más de 100 vehículos. Se trata de una playa urbana de fina arena dorada y en la que suele soplar el viento. Está rodeada por los islotes de San Pedruco y el de la Oliva, a los que se puede acceder cuando la marea está baja. Tiene 2.220 metros de largo y 1.000 metros de ancho, y cuenta con duchas, aseos, servicio de alquiler de hamacas y de material náutico y con socorristas en la época estival. En verano su grado de ocupación es alto.
- Playa de Trengandín: dotada de accesos muy bien señalizados, la forma más cómoda de llegar a este arenal en coche es por la carretera CA-141, disponiendo también de accesos adaptados para personas con movilidad reducida. Posee un aparcamiento vigilado con capacidad para alrededor de 100 vehículos. Es una playa de fina arena dorada en la que, cuando baja la marea, quedan a la vista rocas negras rodeadas de pozas, y en las que encontraremos camarones, lapas y erizos. Posee una extensión de 3.700 metros de longitud y 200 metros de anchura, siendo su grado de ocupación medio. Está equipada con duchas, aseos, kiosco y servicio de socorristas en verano de 11:30 a 19:30 horas.
Qué visitar en Noja
- Palacio de Albaicín: es popularmente conocido como la Casa para Doña Obdulia Bonifaz, el nombre de la persona que compró esta casona del siglo XVI, pero lo hizo tres siglos después, en el XIX, para utilizarla en la temporada estival. Hoy en día es propiedad municipal y acoge la Casa de la Cultura. Cuenta con grandes salones, varios dormitorios, una espaciosa cocina y hasta con capilla, y está rodeada por unos preciosos jardines.
- Casa-Palacio de Velasco: situada en la plaza de la Villa, no sólo es uno de los edificios más emblemáticos de Noja, también de Cantabria, ya que justo por delante de su fachada pasaba el Camino Real. Se cree que es original del siglo XII, aunque desde entonces ha experimentado muchas reconstrucciones y modificaciones.
- Puente Romano de Helgueras: aunque sea denominado como romano, en realidad se trata de un puente medieval muy bien conservado que encontraremos bajando hacia la Playa de Trengandín, por el camino del barrio de Helgueras. Se halla sobre las aguas de la Marisma Victoria, luciendo sus bellas dovelas en arco apuntado. Cuenta con cinco ojos, de los que sólo son visibles tres.
- Casa-Palacio del Capitán Venero: está ubicada a la entrada de Noja, en el barrio de Cabanzo. Esta casa solariega fue construida por el capitán Francisco de Venero y Cabanzo, y posee un precioso jardín romántico. Fue adquirida y restaurada por Eloy Arnáiz de Paz, y hoy en día se conoce como la Casona Arnáiz.
- Casa-Palacio El Carmen: se halla en el barrio de Fonegra, y se remonta al año 1735. Los grandes escudos de su fachada nos cuentan que la vivienda era de don Juan Antonio Cabanzo y de la Gándara y de doña Josefa de Assas Venero. Es una gran casa en forma de "L" que cuenta con una torre. Actualmente está siendo restaurada para albergar un centro multidisciplinar especializado en diferentes áreas, como la investigación o el turismo.
- Casona de la Torre: fue edificada en el siglo XVII en el barrio de Cabanzo, y su nombre se debe a la gran torre de tres cuerpos que posee, además de la propia vivienda y de contar con una capilla. Perteneció a Juan de Cilla, el que fuera el primer alcalde de Noja.
- Ermita de San Juan de Ris: situada en el barrio de Ris, esta ermita de planta rectangular es seguramente de la época bajo-medieval, más o menos de cuando se construyó el Puente Romano. Tiene dos cuerpos, uno cuadrado, y está hecha de mampostería con refuerzo de sillería. Su espadaña, además de incluir la campaña, cuenta con una cruz y con dos pináculos.
- Ermita de San Pedruco: se halla en el islote del mismo nombre, y en realidad se trata de los restos de una antigua ermita muy apreciada por los nojeños. Acceder a ella en la isla es complicado, ya que está rodeada por centenarias higueras que prácticamente impiden el paso. Hace mucho, mucho tiempo a ella acudían en barco muchos romeros en procesión todos los años para rogar al Santo, hasta que una día unas fuertes olas volcaron las barcas, pereciendo muchos de los que iban en ellas. Desde entonces no volvió a celebrarse la procesión.
- Iglesia de San Pedro: está en la Plaza de la Villa, y su magnífica torre es de estilo gótico trasmerano. Según una antigua documentación hallada, podría remontarse al siglo XI, aunque algunos expertos la datan en una fecha anterior. En su interior se hallan las imágenes de San Emeterio y San Celedonio, a los que los nojeños sacan en procesión el 30 de agosto acompañados de danzantes, pitero y tamboril. Tras dar una vuelta a la iglesia con ellos, comienzan a tañer las campanas, aviando de que comienzan las fiestas de Noja.
La oferta de naturaleza de Noja
Prácticamente el 75% del territorio de Noja se encuentra protegido por alguna medida medioambiental, lo que ha favorecido la preservación de su naturaleza. Además de sus dos grandes playas, la de Ris y la de Trengandín, entre ellas surgen varias calas de pequeño tamaño pero muy bonitas.
Por encima de las playas y calas transcurre la Ruta de la Costa, un precioso y tranquilo recorrido que no reviste ninguna dificultad. Está rodeado por tamarindos, pinos y encinas, que nos acompañan en este agradable paseo con magníficas vistas de los alrededores y del mar Cantábrico.
Noja posee otros parajes naturales de gran valor, como las Marismas de Victoria y Joyel, que forman parte del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel. Estas marismas son un referente de la ornitología en España, y en ellas se han registrado más de 20.000 aves de 120 especies distintas. De preservarlas y estudiarlas se encarga la organización SEO/BirdLife, que cuenta en la marisma de Victoria con una torre de observación y con un centro de interpretación, el Molino de las Aves, emplazado en un bonito molino de mareas. También organizan interesantes rutas guiadas por la marisma de Victoria tanto para pequeños como para mayores.
Planes en Noja para toda la familia
El agradable clima de Noja facilita la realización de numerosas actividades de ocio durante prácticamente todo el año. Se puede jugar al golf en el Campo de Golf Berceda, disfrutar del avistamiento de aves en las marismas, hacer rutas de ciclismo o practicar el turismo activo. Otra interesante y divertida propuesta es el Paddle Sup, una modalidad de surf con remos que no necesita oleaje. Para iniciarnos en su práctica, en la playa de Trengandín se halla la escuela Enjoy Sup School. Es más sencillo de lo que parece, y desde el primer día se puede hacer un ameno recorrido por la línea de costa. Y si el agua está fría, no hay problema, porque cuentan con equipos de neopreno.
Otro plan para toda la familia es hacer un recorrido en barco por toda la costa. Y es que, aunque Noja no posea puerto, la cercana localidad de Santoña sí que tiene. Allí, además de embarcarnos, podremos comprar unas ricas anchoas. A lo largo del trayecto iremos contemplando unas magníficas vistas del mar, de la montaña y los bosques de la zona, de los bellos acantilados de Noja, de los faros, y de las playas y calas. Y lo mejor de todo es que contaremos con la compañía del Capitán de Navío Luis Vicente de Velasco, un valiente héroe de la Armada Española que nació en Noja en 1711. Está claro que se trata de una recreación del personaje realizada por un actor, y no de un fantasma.
También para mayores y pequeños está el Karting Los Molinos, que se encuentra junto a la marisma de Joyel, lo que le proporciona un entorno natural de lujo. Dispone de unas estupendas instalaciones, con vehículos en perfecto estado, y la pista es rápida y muy divertida. Y si te atreves, puedes probar una experiencia única, la Conducción a Ciegas, un sistema de conducción autónoma para personas invidentes que también pueden realizar las personas no invidentes que quieran experimentar esta sensación tan especial.
Hora de comer en Noja
Como buena localidad costera que es, en Noja podremos degustar excelentes platos elaborados con frescos pescados y mariscos, especialmente las exquisitas nécoras de la zona. Para los que prefieren la carne, el ganado local también proporciona excelentes ingredientes para cocinar sus contundentes cocidos. Y es que uno de los platos más típicos es el cocido montañés, junto con las mariscadas, las sardinas a la brasa o las carnes locales asadas al carbón.
Los más golosos disfrutarán a lo grande con las especialidades artesanales que elaboran las hermanas del Convento de Santa María de la Merced, como las perlas de Noja, los sobados, las quesadas, el mazapán o el dulce de manzana.
Y para los aficionados al enoturismo, muy cerca de esta localidad cántabra se encuentran las Bodegas Vidular, que desde el año 1999 llevan elaborando buenos vinos, como los blancos Ribera del Asón y Cantabricus, además de tres orujos, el orujo blanco, el orujo de hierbas y la crema de orujo. Las variedades de uvas con las que trabajan son Chardonnnay, Albariño y Treixadura, y ya cuentan con nueve hectáreas de viñedos, un centro de Turismo Enológico y un alojamiento, la Casa Rural Vidular. La visita a la bodega incluye una cata con maridaje, y si el tiempo es bueno, contaremos con la posibilidad de poder realizar la cata al aire libre, junto a los viñedos y bajo una gran encina.
Noja en fiestas
- Fiestas de San Juan: la noche del 23 al 24 de junio se celebra una de las fiestas con mayor arraigo en Noja, la de San Juan, que se festeja montando varias hogueras por distintos lugares de la población, siendo las más populares las que se encienden en el barrio de san Juan, en Ris.
- Fiestas de San Pedro: esta festividad, que tiene lugar el 29 de junio, marca el inicio del verano, y con él la llegada de turista. Antaño esta fiesta se celebraba en la Isla de San Pedruco, frente a la playa de Ris pero, debido a las dificultades que existen de acceso, actualmente se festejan en la iglesia parroquial y en sus alrededores.
- Fiesta del Carmen: esta marinera Virgen es muy querida en la villa de Noja, sobre todo por las gentes de la mar. Por eso el 16 de julio se la rinde homenaje con una peculiar procesión marinera. Comienza en la Iglesia de San Pedro, para después hacer parada en la Casa Palacio del Carmen en Fonegra. Allí tiene lugar una misa popular en la capilla de este ilustre edificio, y después se bailan y cantan canciones del folclore cántabro, además de celebrarse concursos de marmita y de asados marineros.
- Fiestas de San Emeterio y San Celedonio: con esta fiesta que tiene su día grande el 30 de agosto se da por finalizada la temporada veraniega. La última semana del mes se celebran todo tipo de actos festivos en honor de estos Santos Mártires. El día 29 arrancan las fiestas con la lectura del pregón a cargo de un personaje popular. Los días 30 y 31 se suceden las competiciones deportivas, los conciertos, las demostraciones gastronómicas o los fuegos artificiales, entre otras actividades, siendo la mejor forma de dar por finalizada la temporada estival.