Motivos para visitar El Puerto de Santa María

La localidad gaditana de El Puerto de Santa María, ubicada en plena Bahía de Cádiz, es un lugar ancestral. Por sus calles ya caminaron en la Antigüedad los griegos, los visigodos o los musulmanes, y todos fueron dejando su huella.

Como sucede en todo los municipios de Cádiz, El Puerto disfruta de mucha animación a lo largo de todo el año, pero especialmente en los meses estivales. Los viajeros llegan atraídos por suave clima, su histórico legado monumental, su magnífica oferta gastronómica y sus bonitas playas. Y no suele haber problema de alojamiento, porque la oferta de hoteles en el Puerto de Santa María es variada y muy completa.

El clima y las playas de El Puerto de Santa María

• Un agradable clima: aunque son las aguas del Océano Atlántico las que bañan la costa de Cádiz, el clima sigue siendo de lo más mediterráneo. Una singularidad de esta zona de Andalucía son los vientos, de Levante y de Poniente, que suelen soplar con regularidad, aunque no son muy fríos. Son los responsables de que los veranos en El Puerto de Santa María no sean demasiado calurosos, resultando mucho más agradable el clima que en otras localidades andaluzas, donde hace excesivo calor. Por lo que se refiere a las temperaturas, la media anual se halla en torno a los 18 grados centígrados, y las lluvias no son muy abundantes, con una media de entre 400 y 500 mm al año. Pero lo mejor de todo son las más de 3.000 horas de sol que disfrutan en El Puerto, por lo que no es extraño que a este litoral se le conozca como la Costa de La Luz.

• Playas de ensueño: de fina arena y aguas cristalinas, las playas de El Puerto de Santa María suelen ser galardonadas anualmente con la Bandera Azul que concede la Fundación Europea de Educación Ambiental. Están rodeadas por bellas marismas y extensas zonas de pinares y dunas. En el término municipal hay seis playas. Tres de ellas se encuentra al sur, la de Valdelagrana, la de Levante y la Playa de La Puntilla, por lo que se hallan protegidas por la Bahía de Cádiz y poseen escaso oleaje. Las de la zona norte del municipio, como las de Santa Catalina o Fuentebravía, cuentan con un oleaje más agitado, sobre todo en ciertas épocas del año, aunque bañarse en ellas no resulta peligroso. Las playas con mayor ocupación son las de Valdelagrana, la Puntilla y las que se hallan junto a las urbanizaciones de Vista Hermosa y Las Redes.

Monumentos y gastronomía de El Puerto de Santa María

• Patrimonio monumental: un paseo por las calles de esta localidad gaditana nos llevará a descubrir su excelente legado histórico-monumental. Incluye lugares tan interesantes como el Antiguo Convento de Capuchinas, del siglo XVIII, que actualmente funciona como un hotel; la Casa Cargadores a Indias, del siglo XVII; el Castillo de San Marcos, del siglo X; la Iglesia Mayor Prioral, del siglo XV, o el Monasterio de la Victoria, del siglo XVI. En el puerto también podremos visitar una réplica de la carabela “La Niña”, una de las tres que acompañaron a Colón en su viaje a América, o el poblado fenicio Doña Blanca. Muy recomendable es realizar la Ruta Sacra, que nos llevará a recorrer diversas iglesias, conventos, capillas y ermitas que han sido catalogadas de Interés Histórico Artístico.

• Buena cocina y excelentes vinos: El Puerto de Santa María es famoso en todo Cádiz por su buena gastronomía y su excelente oferta de restauración. Es uno de los mejores lugares para degustar un magnífico pescado y mejor marisco. Son típicos en esta localidad platos como la raya al pan frito, los lenguados con fideos, el malarmao a la sal, una sopa marinera llamada caldillo de perro o la fritura de pescado, que incluye acedías, boquerones, chocos o cazón en adobo, entre otros productos del mar. Muy tradicionales son también los aliños, que son huevas de merluza, huevos de choco o piriñacas aderezados con un buen aceite de oliva y vinagre de yema. Y como no hablar de las bodegas del Puerto de Santa María, donde se producen y conservan excelentes botellas de Fino, de Pedro Ximénez, de Moscatel, de Amontillados y de aromáticos Olorosos.

Estos son sólo algunos de los motivos por lo que no hay que dejar de visitar el Puerto de Santa María, en Cádiz, aunque hay otros muchos que podrás ir descubriendo por ti mismo.