Tornavacas, la entrada natural al Valle del Jerte
Lugar de nacimiento del río Jerte, Tornavacas es una de esas localidades cacereñas que invitan a disfrutar de la naturaleza y de todos los atractivos de la tranquila vida rural.
Encajonado entre los macizos de Gredos y la Sierra de Béjar, en la cabecera norte del Valle del Jerte, el pueblo cacereño de Tornavacas es un fantástico destino para los aficionados al turismo rural. La localidad, que limita con la provincia castellano-leonesa de Ávila, tiene una larguísima calle principal que se divide en tres partes: el tramo Real de Arriba, el Real de Enmedio y el Real de Abajo.
Los distintos tramos de esta calle quedan unidos por dos puentes, el medieval Puente Cimero y la Puentecilla. La arquitectura tradicional de la villa es la característica de los pueblos de esta zona de Cáceres, con el típico entramado de madera y decoradas profusamente con tiestos siempre floridos.
Qué ver en Tornavacas
Si buscamos el edificio más destacado de Tornavacas comprobaremos que, como en otros muchos pueblos de España, es una iglesia. En este caso se trata de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que tiene un marcado estilo barroco. En su interior conserva dos magníficos retablos, de los siglos XVII y XVII, además de varios cuadros y tallas barrocas, destacando una imagen, de autoría desconocida, del Santísimo Cristo del Perdón, que cuenta con muchos devotos en el valle.
Repartidas por el pueblo y por los alrededores hay varias ermitas, como la de Santa María Magdalena, la del Santo Cristo del Humilladero, la Ermita de los Mártires, la de Santa Bárbara y la Ermita de San Martín.
Y hay una antigua tradición que se sigue manteniendo en la población, la de "Mujer de la Esquila". Consiste en que, al caer la noche, una mujer va recorriendo en silencio la larga calle de la villa haciendo sonar una campana, y a cuyo paso los vecinos se santiguan. Una costumbre que recuerda al Toque de Ánimas de la localidad salmantina de La Alberca.
Cosas que hacer en Tornavacas
- Subir al Puerto de Tornavacas, un estupendo mirador natural sobre el precioso Valle del Jerte. La mejor época para hacerlo es a principios de primavera, cuando florecen los cerezos del valle y ofrecen un espectáculo único.
- Visitar la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, ya que la mayor parte de ella se halla en su término municipal.
- Celebrar alguna de las fiestas más importantes de Tornavacas, como la noche de los Fuegos, el 2 de mayo, que hace que Tornavacas se llene de hogueras en torno a las que beber, comer, cantar y bailar; la festividad del Corpus Christi, a primeros de junio; las Fiestas en honor de la Virgen de la Asunción, el 15 de agosto, o las Fiestas en honor del Cristo de Perdón, las más importantes del pueblo, que tienen lugar a mediados de septiembre.
- Degustar la gastronomía tradicional del Valle del Jerte, en la que tienen un gran protagonismo los productos derivados del cerdo y las cerezas. Son platos típicos las patatas revolcás, las migas, el cabrito o las calderetas. No hay que olvidar que Tornavacas forma parte de la zona de producción de cuatro productos de gran calidad: la cereza, el jamón y el aceite de oliva virgen extra y el cordero.