El encantador pueblo extremeño de Montánchez

Nos acercamos por la carretera EX-381 a la localidad de Montánchez, en la provincia de Cáceres, y ya desde la lejanía su castillo, situado en un alto, nos avisa de que nos queda poco. Esta antiquísima localidad, por donde caminaron romanos, godos y musulmanes, ya contaba con cierto trasiego en la Edad de Bronce, tal y como demuestran los numerosos vestigios arqueológicos hallados en la zona.

Este gran bagaje histórico ha proporcionado un buen legado cultural a esta villa extremeña, que presume de tener una clima de lo más agradable. Quizá ese sea uno de los secretos del magnífico jamón que aquí se elabora, y que cuenta con Denominación de Origen Dehesa de Extremadura, y del buen carácter del que hacen gala sus habitantes, que son siempre hospitalarios con cuantos se acercan a conocer su bonito pueblo.

Qué ver en Montánchez

No hay duda alguna de cual es el monumental protagonista de Montánchez, su castillo. Su actual aspecto se remonta a la época de la Reconquista, aunque fue construido en el siglo VIII. De esta época todavía se conservan el aljibe y el lienzo de muralla. En el interior de esta fortaleza amurallada se halla la Ermita de Nuestra Señora de la Consolación.

Pero Montánchez es mucho más que su castillo, y nos quedan por ver lugares como el barrio del Canchalejo, el más antiguo del pueblo, con su irregular trazado de calles y sus encantadores rincones. Realmente bonita es la torre campanario que se halla junto a Iglesia Parroquial de San Mateo, situada junto a un hermoso mirador y agradables zonas verdes.

Seguimos la visita por esta población extremeña recorriendo las tres cruces del calvario, realizadas en granito; la Iglesia Parroquial de San Mateo, edificada en el siglo XIV pero reformada en el año 1694, o las siete ermitas de la villa, dedicadas a la Virgen del Pilar, la Virgen de Fátima, Santo Domingo, La Virgen de los Remedios, San Antonio, los Mártires y a la Consolación, patrona de Montánchez. Nos queda por conocer la Fundación Vanderlinde, conocida popularmente como “La Casa de las Nogalas”. Ubicada en un histórico edificio, acoge la exposición permanente del pintor realista Alwin VanderlLinde.

Qué hacer en Montánchez

Hay un lugar peculiar, tétrico y bello que hay que visitar, sí o sí, en este pueblo de Cáceres. Se trata del Cementerio de Montánchez, que en el año 2015 fue elegido como el más bonito de España. Se encuentra en la ladera del escarpado risco sobre el que se halla el castillo, y se remonta al año 1810, conservando un misterioso y romántico ambiente.

Y en Montánchez hay que probar su excelente y afamado jamón, además de otros deliciosos embutidos, como chorizo, salchichón, la morcilla patatera, el morcón o el lomo ibérico. Además, en el pueblo hay varias bodegas centenarias que se pueden visitar, incluyendo una del siglo XV situada en el castillo.

Una época altamente recomendable para visitar la localidad es durante los Carnavales. Aquí tienen una figura central, el jurramacho, un peculiar personaje bastante estrafalario. Va ataviado con ropas viejas, y tapa su cara con el mismo tipo de paño con el que se envuelven los jamones. La fiesta no para en Montánchez durante estos días, ni en la calle ni en los bares ni en las casas. Desde su origen, en la Edad Media, se convirtió en un Carnaval único, y ni la iglesia ni los poderes políticos consiguieron nunca suprimirlo.