El Meandro Melero, una joya de la naturaleza en Cáceres
Al norte de la provincia de Cáceres encontramos una auténtico y espectacular capricho de la naturaleza: el precioso Meandro de Melero.
En la extremeña comarca de Las Hurdes, un verdadero paraíso natural, se encuentra uno de los paisajes más bellos de España. Hablamos del que origina el Meandro de Melero, un fantástico capricho de la naturaleza del que es responsable el río Alagón. Para los que todavía no tengan claro lo que es un meandro, se trata de una sinuosa y pronunciada curva descrita por el curso de un río, un accidente fluvial de los más vistoso.
Y el de Melero, sin duda, se encuentra entre los meandros más espectaculares de nuestro país. Se halla muy cerca de la población de Riomalo de Abajo, que a su vez dista menos de 10 minutos de la localidad de Las Mestas, uno de los pueblos más emblemáticos de Las Hurdes. Desde Riomalo podremos iniciar una agradable y sencilla ruta entre pinares, muy bien señalizada, y que en sólo tres kilómetros nos acercará a esta joya de la naturaleza.
Aunque cualquier momento del año es buena para visitar el Meandro de Melero, la época de lluvias, en primavera y otoño, es la mejor, ya que el meandro se convierte en una isla totalmente rodeada de agua, haciendo que el río parezca una pequeña laguna. Y la mejor hora para contemplarlo, al atardecer.
Cómo llegar al Meandro de Melero
El camino comienza en Riomalo de Abajo, desde donde parte la ruta que nos acercará al Meandro de Melero. Antes pasaremos por una piscina natural que se forma sobre el río Ladrillar. Aunque se puede hacer en coche, lo más recomendable, y sano, es hacer el recorrido a pie, para disfrutar de los bellos paisajes de Las Hurdes. No hay ningún problema, porque el trayecto está perfectamente señalizado.
Caminando entre bosques de pinos y castaños llegaremos al Mirador de La Antigua, el lugar perfecto para disfrutar del meandro en toda su extensión, con la Sierra de Béjar al fondo, y donde obtener las mejores fotos. Un poco antes de llegar al mirador tendremos la opción de tomar una bifurcación que nos llevará hasta la base del meandro.
Pero no nos limitemos a la contemplación, porque en el entorno del meandro se pueden hacer descensos en canoa o excursiones en catamarán por el río. Otras actividades que se pueden realizar son la pesca o la observación de aves. Desde el mismo mirador tendremos la oportunidad de ver buitres leonados y negros, águilas culebreras y calzadas o cigüeñas negras.
La Comarca de las Hurdes
Si hay un lugar en España donde el hombre y la naturaleza han formado una perfecta simbiosis, ese es la comarca de Las Hurdes. Es pura naturaleza en Cáceres, con profusión de vegetación y de agua, algo que desmonta, una vez más, la equivocada idea que tiene mucha gente de que Extremadura es poco menos que un secarral.
Nada más lejos de la realidad, porque esta comarca forma parte de la llamada “España Húmeda”. Se sitúa al norte de la provincia, en una zona montañosa que limita con la Sierra de Gata, las Tierras de Granadilla y la Sierra de Francia, en Salamanca.
Preciosos paisajes y encantadores pueblos conforman esta recomendable zona cacereña, donde el turismo rural alcanza la excelencia; donde comeremos una cocina sencilla, pero contundente y deliciosa, con platos que llevan nombres tan curiosos como los rebujones, el moje de peces, los socochones o el matajambre; donde el senderismo es una actividad casi obligatoria, y donde podremos disfrutar a lo grande y, sobre todo, relajarnos.