El pueblo burgalés de Villarcayo
Villarcayo ostenta el título de ser la Capital de las Siete Antiguas Merindades, además de ser Bien de Interés Cultural en la categoría de conjunto histórico. Si a eso le sumamos un maravilloso entorno natural, ¿a que te está apeteciendo conocer este destino de Burgos?
También conocido como Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja, el municipio de Villarcayo se encuentra en pleno centro de la comarca de Las Merindades, en el norte de la provincia de Burgos. El pueblo está limitado por el río Ebro, y surcado por dos de sus afluentes, los ríos Nela y Trema. A su alrededor también se hallan la sierra de la Tesla y las primeras estribaciones de la Cordillera Cantábrica.
Con este espectacular marco natural, ya podemos imaginar que estamos ante un destino ideal para la práctica del senderismo y de otras actividades que se realizan en la naturaleza. Pero, además, el pueblo posee una magnífica oferta cultural, monumental y gastronómica.
Villarcayo ejerce como la capital de Las Merindades, y también lo es del propio término municipal, al que pertenecen más de 30 núcleos de población, todo ellos con sus propias propuestas histórico-artísticas, y rodeadas por hermosos parajes naturales. Hay mucho que ver y hacer en Villarcayo.
Los lugares de interés de Villarcayo
Un paseo por Villarcayo te permitirá descubrir su preciosa Plaza Mayor, con sus tradicionales con galerías acristaladas. En este plaza se encuentra el edificio del Ayuntamiento, construido en el año 1891, además de una fuente que se ilumina de principios del siglo XX y un encantador kiosco en medio de al plaza.
Entre los lugares que más llaman la atención en el pueblo están la Torre del Reloj, situada el edificio del juzgado, detrás del ayuntamiento, y las casa blasonadas, principalmente las de la Calle Santa Marina, como la casa de la familia Díez Isla y la de la familia Danvila, de los siglos XVII y XVIII. Muchos de los lugares importantes de la villa, tristemente se perdieron durante un incendio provocado durante la segunda Guerra Carlista.
Quedan sobre todo edificios religiosos de interés, como la Ermita de San Roque, que acoge al patrón de la localidad, y que aunque está reconstruida se remonta al año 1784; la Iglesia de Santa Marina, del año 1967, y el Monasterio de Santa María la Real de Vileña, que alberga un estupendo museo de sepulcros góticos e imaginería religiosa, como un calvario del siglo XIV o la talla de Santa María de Vileña, del siglo XIV.
Cosas que hacer en Villarcayo
Si visitas Villarcayo en verano, un lugar que no debes dejar de visitar es El Soto, un gran espacio natural ubicado a orillas del río Nela, el cual ha originado en esta zona unas estupendas piscinas naturales. También es un lugar ideal para ideal para pasear, pues cuenta con jardines y zonas verdes, o para que los más pequeños disfruten de las áreas infantiles. También cuenta con instalaciones recreativas y deportivas.
Conocer y disfrutar de la gastronomía es también un excelente plan. La villa es famosa por su importante industria chacinera, especialmente por su chorizo. También podremos degustar magníficas morcillas, carne de cordero o carnes de vacuno. Otros productos tradicionales en la villa son el licor de guindas, las patatas fritas, los quesos frescos, la miel y sus derivados, los productos de la huerta o la buena repostería local.
Un buen momento para visitar Villarcayo es a mediados del mes de agosto, cuando tienen lugar las fiestas patronales realizadas en honor a Nuestra Señora y a San Roque. Durante varios días la fiesta no para en el pueblo, algo de lo que se encargan las peñas locales, y no faltan conciertos, bailes, concursos o degustaciones gastronómicas.